Boletín de Malariología y Salud Ambiental
versión impresa ISSN 1690-4648
Bol Mal Salud Amb v.51 n.2 Maracay dic. 2011
El Hombre y la Ciencia
Robert Killick-Kendrick
FIBMS, D.I.C., M.Phil, Ph.D., DSc., FIBiol., C.Biol
Néstor Añez1 & M. Dora Feliciangeli2
1 Investigaciones Parasitológicas "J.F.Torrealba", Universidad de Los Andes, Facultad de Ciencias, Departamento de Biología, Mérida, 5101, Venezuela
2 Centro Nacional de Referencia de Flebótomos (CNRFV), BIOMED, Universidad de Carabobo, Facultad de Ciencias de la Salud. Sede Aragua. Maracay, Venezuela
Robert Killick-Kendrick desapareció físicamente el día sábado 22 de octubre de 2011 en Sumene, Francia. Se marchó, luego de luchar heroicamente contra el mal que padecía, volando, cual feliz flebotomino, hacia los confines del más allá una vez cumplido su exitoso ciclo entre nosotros. Nos deja una estela de sabiduría, buenos ejemplos y recuerdos imperecederos de su exquisito buen humor.
Robert René Killick Kendrick nació el 20 de junio de 1929 en Hampton, Inglaterra, iniciándose en las labores de investigación a los 17 años como asistente de laboratorio en el Departamento de Bioquímica del Ministerio de Agricultura en Weybridge, carrera que mantuvo ininterrumpidamente durante 65 años, entre la mitad del siglo XX y la segunda década del siglo XXI (1946-2011). El desempeño de múltiples actividades dentro y fuera del laboratorio le fue dotando de una impresionante experticia, la que unida a su constancia, inteligencia, honestidad, disciplina científica y deseos de superación, le permitió escalar todas las posiciones dentro de la actividad científica incluyendo desde los aspectos técnicos comunes de la investigación hasta la de consejero experto de entes rectores de la salud a nivel mundial en enfermedades parasitarias como malaria, tripanosomiasis y leishmaniasis. Su paso por instituciones como la Escuela de Higiene y Medicina Tropical y el Imperial College de la Universidad de Londres, el Instituto de Investigaciones Africanas para la tripanosomiasis y otras muchas más relacionadas con el estudio de infecciones parasitarias transmitidas por insectos, le permitió investigar con personalidades relevantes del mundo científico de la época. Especial mención debe hacerse de su trabajo junto a su guía espiritual y científico el venerable Profesor P.C.C. Garnham FRS, y los seminales aportes en asociación con el gigante de la eco-epidemiología sobre la leishmaniasis en el Sur de Francia Prof. J.A. Rioux, entre otros. Al mismo tiempo, durante ese período pudo establecer para siempre fraternos nexos con sus colegas D. Godfrey, E. Canning, R.S. Bray, J.R. Baker, R. Lainson, D. Molineux, W. Peters, I. Landau, N. Léger y muchos otros investigadores en la profundidad de la selva amazónica brasilera, las planicies de la India u otros exóticos lugares, así como en hospitales, laboratorios o campo abierto en Italia, España, Grecia, Turquía, Israel, Rusia, Arabia Saudita, Irak, Pakistán, Afganistán, Siria, Egipto, Tunisia, Perú, Colombia y Venezuela.
Aunque miembro de muchas asociaciones científicas durante su vida como investigador, merece resaltar el reconocimiento como miembro honorario de la Sociedad Argelina de Parasitología (Argelia, 1984), la Sociedad Italiana de Parasitología (Italia, 1991), la Sociedad Americana de Medicina Tropical e Higiene (USA, 1996), la Academia Francesa des Hauts Cantons (Francia, 2008), Sociedad Turca de Parasitología (Turquía, 2011). Asimismo, por sus contribuciones a la Medicina Tropical el Prof. Killick-Kendrick fue honrado con las medallas Samuel Rickard Christophers por la Royal Society of Tropical Medicine and Hygiene (UK, 1991) y con el Premio Internacional Emile Brumpt (Francia, 2006) y, anteriormente, distinguido como "Honorary Fellow" de la Royal Entomological Society (Londres, UK, 2005).
La producción de Bob Killick-Kendrick sobrepasa las 300 publicaciones en revistas científicas sobre tripanosomiasis africana, malaria, leishmaniasis y flebotominos, en asociación con investigadores de los cinco continentes. Complementa su dilatada contribución, la edición de varios libros incluyendo "Rodent Malaria" (1978) y "The Leishmaniases in Biology and Medicine" (1987), ambos editados junto a W. Peters.
El protagonismo de Bob Killick-Kendrick en el establecimiento de colonias cerradas de flebotominos, lo cual ha permitido estudios en diversas direcciones sobre la relación Leishmania-vector, ha sido compartido durante, al menos, las últimas tres décadas con su inseparable esposa Mireille. A decir de muchos colegas y amigos, un binomio perfecto, una fantástica complicidad humana y profesional con un privilegio recíproco, lo cual ha permitido ayudar a colegas de distintas latitudes.
Larga es la lista de estudiantes llegados desde distintas latitudes para compartir, a través de los años, la experiencia científica de Bob Killick-Kendrick. La mencionada lista incluye a quienes esto escriben, cuando tuvimos la fortuna de disfrutarlo como supervisor académico durante los tiempos de "Ashurst Lodge at Imperial College" hace más de 30 años. Con Bob como supervisor se disfrutaba de la amistad, del fino y constante buen humor, de las tertulias científicas sobre el tema abordado para desarrollar la tesis con la férrea disciplina que el rigor científico impone, pero también se lograba la ansiada libertad como científico al permitir, sin egoísmo alguno, el pleno desarrollo del investigador en cierne.
Con el transcurrir del tiempo la figura del estricto supervisor fue dando paso a la del colega siempre presto a colaborar, haciéndose presente a la inmediatez del llamado para juntos colaborar, idear, ejecutar o tan sólo soñar con las posibles soluciones de los problemas que aquejan a los que más contacto tienen con los elementos de la naturaleza que nos mantienen unidos profesionalmente. Todo lo anterior amalgamado con la broma fina de exquisito buen humor, el constante olor a humo de tabaco expelido de su inseparable pipa, la entonación de una melodía o la risa explosiva luego del ocurrente cuento , todo eso fue y será Bob para nosotros.
The Man and Science
Robert Killick-Kendrick,
FIBMS, D.I.C., M.Phil, Ph.D., DSc., FIBiol., C.Biol
Nestor Añez & M. Dora Feliciangeli
Robert Killick-Kendrick passed away on Saturday October 22nd 2011 in Sumène, France. He left us after a brave fight for life. His passing was fleeting, as a happy sand fly moves towards eternity once his successful cycle among us was completed. He left us a radiant stele of wisdom, good examples and lasting memories of his exquisite sense of humor.
Robert René Killick Kendrick was born on June 20, 1929 in Hampton, England. He started his scientific work when he was 17 years old as a laboratory assistant at the Department of Biochemistry, Ministry of Agriculture, Weybridge. His work continued uninterrupted for 65 years (1946-2011).
The diverse activities carried out inside and outside the laboratory produced an impressive array of expertise. His high performance together with his perseverance, intelligence, honesty, scientific discipline and desire to excel enabled him to advance to the highest positions within the scientific activity, from laboratory technician to expert advisor of rector bodies responsible for global health in parasitic diseases such as malaria, trypanosomiasis and leishmaniasis.
His passage through institutions like the London School of Hygiene and Tropical Medicine, Imperial College-University of London, the Research Institute for African trypanosomiasis, and others related to the study of insect-borne parasitic infections allowed him to make research with the relevant scientific personalities of the time. Special mention should be made of his work carried out with his spiritual and scientific guide, the venerable scientist Professor PCC Garnham FRS. Other important highlights are his seminal contributions in association with Prof. JA Rioux on the eco-epidemiology of leishmaniasis in southern France. At the same time, during that period Bob established fraternal ties with colleagues D. Godfrey, E. Canning, R.S. Bray, J.R. Baker, R. Lainson, D. Molineux, W. Peters, I. Landau, N. Leger and many other researchers in the depths of the Brazilian Amazon, the plains of India and other exotic locations, as well as hospitals, laboratories or in the open field in Italy, Spain, Greece, Turkey, Israel, Russia, Saudi Arabia, Iraq, Pakistan, Afghanistan, Syria, Egypt, Tunisia, Peru, Colombia and Venezuela.
Although a member of many scientific associations during his life as a researcher, it is worth highlighting his recognition as a honorary member of the Algerian Society of Parasitology (Algeria, 1984), the Italian Society of Parasitology (Italy, 1991), the American Society of Tropical Medicine and Hygiene (USA, 1996), the French Academy des Hauts Cantons (France, 2008) and the Turkish Society of Parasitology (Turkey, 2011). Also, for his contributions to Tropical Medicine, Prof. Killick-Kendrick was honored with the Samuel Rickard Christophers Medal by the Royal Society of Tropical Medicine and Hygiene (UK, 1991) and the International Award Emile Brumpt (France, 2006) and, some years earlier, recognized as "Honorary Fellow" of the Royal Entomological Society (London, UK, 2005).
The productivity of Bob Killick-Kendrick exceeds 300 publications in scientific journals on African trypanosomiasis, malaria, leishmaniasis and sand flies, in partnership with researchers from the five continents. It complements his extensive contribution to the publication of several books including "Rodent Malaria" (1978) and "The Leishmania in Biology and Medicine" (1987), both edited with W. Peters.
His protagonist role in the establishment of closed colonies of phlebotomine sand flies, which has led to studies in various directions on the Leishmania-vector relationships, has been shared for at least the last three decades with his inseparable wife Mireille. According to the opinion of many colleagues and friends, it was a perfect combination, a great human and professional complicity with a reciprocal privilege, which enabled them to help colleagues from different latitudes.
Long is the student list coming from different parts of the world to share Bob´s scientific expertise. The mentioned list includes the writers of this tribute to our professor. We had the good fortune to enjoy him as our academic supervisor during the times of "Ashurst Lodge at Imperial College" some 30 years ago. With Bob as supervisor, we enjoyed his friendship, his fine and constant good sense of humor, scientific gatherings on the subject addressed to develop the thesis with the strict discipline imposed by scientific rigor, but we also achieved the desired freedom as scientists because he allowed us, without any selfishness, our full development as researchers under his tutelage.
Over the years Bob changed from rigorous supervisor to that of a colleague always ready to help. He was always present to the immediacy of the call to work together; he was with us to develop, execute or just dream up possible solutions to problems affecting people who have most the contact with the elements of nature that hold us together professionally. All these facts, together with his generosity, special sensitivity, his way to amuse with his jokes, that characteristic and constant smell of tobacco smoke expelled from his trusty pipe, the pitch of a melody or a witty story that ended in an explosive laughter all of this together was and will be Bob for us!