1. INTRODUCCIÓN
El desarrollo de las civilizaciones ha dado pasos vertiginosos impulsando la producción de bienes y servicios que han mejorado la calidad de vida dentro de la cotidianidad de todos los individuos, un proceso masificado y manufacturado cuyo ciclo engloba desde la materia prima utilizada para la elaboración, hasta su adquisición en los anaqueles. Pero, que durante un tiempo no ha añadido la vida posterior al uso de esos bienes, más bien paulatinamente ha impregnado negativamente el medio en el que las sociedades se desenvuelven, ya que no se tenía establecido de manera eficiente el paradero de los residuos influyendo cada vez más en las condiciones de vida y desarrollo de las comunidades.
Para definir de manera eficiente el desarrollo sostenible se busca el progreso económico, la equidad y cohesión social, la conservación y optimización de los recursos, o sea, su inclusión de las materias primas y desechos en el mismo círculo de uso, entendiéndose que las ciudades se tratan de organismos que consumen recursos y producen residuos. En consecuencia, se proyectan como urbes con metabolismos circulares, que minimizan las materias primas nuevas e incentivan y aprovechan al máximo el reciclaje.
Se desenvuelve este artículo en la temática del reciclaje arquitectónico, a su vez, se manejan procesos y actividades relacionadas a las problemáticas del servicio en la actual situación del país, a partir de la implantación de una red de espacios estratégicos que funcionen de manera independiente y en conjunto con la infraestructura urbana. Para la comprobación y desarrollo de lo planteado se utilizó la ciudad de Barquisimeto, Venezuela, en cuanto a infraestructura urbana y servicios, como lugar de estudio, tomando en cuenta las problemáticas que actualmente afectan más la calidad de vida de la sociedad y el deterioro de la ciudad.
Como medida ante el paradigma de la situación actual del país, se toma en cuenta la factibilidad para abordar cada uno de los servicios básicos, como son, agua, electricidad, aseo urbano y trasporte. Como cada uno estos afectan en mayor o menor medida la contaminación del medio ambiente; la intervención que puede hacerse en cada uno de ellos, a manera de soporte o alternativas de abastecimiento que funcionen en paralelo con las infraestructuras existentes; y el alcance que se generaría en cuanto al impacto ambiental.
2. SITUACIÓN ACTUAL
Para entender el panorama particular es necesario hacer revisión de los datos obtenidos por las diferentes fuentes en tema de impacto ambiental, destacando la Global Waste del 2015 (1), registrando que anualmente se desechan 2 mil millones de toneladas de residuos sólidos urbanos. Ahora bien, delimitando la visión de esta situación, se indica que el impacto ambiental generado por Venezuela se ha incrementado incluyendo la contaminación por basura y otros desechos sólidos, marcada por la deficiencia del servicio de recolección de un 19% para el 2019 (2).
Dicho esto, se contextualiza la situación del espacio de estudio, que corresponde a la ciudad de Barquisimeto ubicado al occidente de Venezuela, mejor conocida como la ciudad musical del país. Capital del estado Lara, con una población estimada de 881.127hab para el año 2015, produciéndose 0,85kg/día (r) per cápita con un total de 704.901,6kg/día y 21.147.048kgal mes. Las empresas operadoras responsables de la gestión de los residuos y desecho sólidos reportan un promedio de 11.585.666kg al mes, es decir, que solo abarcan el 54,79% de la basura que produce la ciudad, el 40,25% termina en botaderos, ríos, es quemada o enterrada, y solo el 4,97% es procesado por empresas recicladoras (ver Figura 1). En una encuesta realizada a consumidores y recuperadores informarles, con un universo de 200 consumidores y 200 recuperadores informales para eso del 2019, se dio con la finalidad de encontrar soporte, factibilidad, potencialidades y/o deficiencias de las ideas a desarrollar.
De esta forma se logró determinar 3 variables a explorar: información, satisfacción y disponibilidad. Con éstas se avaluaron a los encuestados para establecer el nivel con el que manejan la información sobre el tema, si existe alguna contrariedad o beneficio con la que analizar oportunidades para la apertura de nuevos sistemas de recolección (ver Figura 2).
2.1. Análisis de la Ciudad
En este ámbito, se estudia qué escenario afecta en mayor medida a la imagen, a los habitantes, y los recursos básicos necesarios, agua, electricidad, gas, aseo urbano, para el desempeño de la ciudad; dando cómo mayor tendencia el tema de los servicios, el que más afecta la estabilidad, del desarrollo y dinámicas cotidianas. En cuanto al estudio de los servicios básicos, se tomaron en cuenta los siguientes aspectos:
La factibilidad para abordar cada uno de los servicios como agua, electricidad, aseo urbano y trasporte
La afectación en mayor o menor medida de cada uno de ellos, en la calidad de vida de las personas y el funcionamiento de la ciudad
El nivel intervención que puede hacerse en cada uno de ellos, a manera de soporte o alternativas de abastecimiento que funcionen en paralelo con las infraestructuras existentes
El alcance que se generaría en cuanto el impacto social y ambiental
A nivel de los ítems explorados, se resuelve soportar la gestión de residuos sólidos en Barquisimeto. Debido a que es la principal fuente de degradación del entorno urbano causando epidemias, enfermedades, deterioro del medio ambiente y de la calidad de vida. Por otro lado, el manejo, la logística y la disposición de los residuos sólidos es ineficiente y no existen actividades de selección de residuos.
En cuanto a la estructura y la dinámica que presenta la ciudad, se observa como principal preocupación, los espacios que se encuentran ausentes o negados, áreas en deterioro, edificaciones en desuso, o simplemente espacios que están operativos, pero están en conflicto con el entorno, ya que no poseen una relación o integración adecuada. Estos espacios se muestran como lugares en blanco, que no aportan cualidades que permitan un incremento productivo en las dinámicas en su contexto inmediato. Los mismos, por encontrarse dentro de la poligonal de la ciudad, poseen un elevado potencial de desarrollo, ya que ocupan sectores que están consolidados, por lo que cuentan con la infraestructura urbana, servicios y equipamientos.
Aunado al paradigma de la situación actual del país, en donde la segregación social se ha visto más acentuada, por el desempleo y por el modo en que el ciudadano logra solventar el día a día con trabajos informales, se genera una población inactiva, ociosa y estancada, que afecta de manera decadente el desarrollo de la ciudad. En este contexto, dentro de las pocas soluciones que resuelven las personas para trabajar, se evidencian labores manuales que no dependen de instrumentos complejos; uno de los oficios donde se muestra una diversidad social en cuanto a nivel de estudio, estilo de vida, y vivienda, son el de cartonero, personas que se dedican a la recolección de residuos en las calles de la ciudad para su venta en empresas de reciclaje.
Para favor del ciudadano, es un servicio, del cual su mejoramiento está al alcance de cada persona, empresa o institución, ya que cada uno puede ser participe en el control de los desechos y residuos que se producen. Por ello, es necesario promover la segregación de los mismos desde el origen, a través de nuevas políticas, generando un sistema de equipamientos que se incorporen en las dinámicas de la ciudad, atendiendo a su manejo a través del reciclaje, apoyados en: centros de acopio, capacitación, recreación y emprendimiento; incentivando la cultura de la basura, y disminuyendo el volumen de desechos sólidos que se produce en la ciudad.
3. PLAN PROPUESTO PARA LA CIUDAD DE BARQUISIMETO
Para esta investigación se utilizaron diversos medios y herramientas para la recolección de información pertinente para su desarrollo, obteniendo los datos esenciales para la comparación, análisis y priorización de cada aspecto abordado en esta propuesta:
• Investigación y recopilación de datos acerca del manejo de los residuos y desechos sólidos, empresas competentes, el reciclaje en la ciudad, normativas pertinentes y antecedentes.
• Visitas de campo y entrevistas: empresas relacionadas al manejo de los residuos y desechos sólidos, empresas relacionadas con el reciclaje, personas involucradas en el proceso de selección y clasificación de residuos en la ciudad.
• Selección de espacios a intervenir: se ubican espacios estratégicos de gran impacto, aislados, o subutilizados, en los que no existan relaciones con la ciudad, o se encuentren en conflicto, para reinsertarlos en la vida urbana.
Estudio de dichos espacios: focalización del funcionamiento de cada uno de los espacios seleccionados, dentro del sistema de plataformas y con el entorno inmediato.
• Definición de jerarquías: se clasificaron cada uno de los espacios seleccionados según su posición en la estructura geo-política, equipamientos cercanos y área, para establecer la escala y a su vez programa en cada uno de ellos.
La propuesta: desarrollar el funcionamiento y arquitectura de un centro de acopio, seleccionado según su complejidad e impacto dentro de la ciudad.
3.1. Concepto de Plan Maestro
Se diseñó un Plan Maestro de revitalización y adecuación de espacios inoperativos y en conflicto físico-urbanos para el manejo integral de residuos sólidos, estratégicamente seleccionados como oportunidades en zonas de gran impacto en la ciudad tales como, centros educativos, zonas residenciales, mercados y botaderos; que pueden funcionar de manera interdependiente con la infraestructura urbana. En dicho plan se posibilita la participación de grandes y pequeños actores para lograr un impulso en la modernización y construcción de grandes equipamientos urbanos y metropolitanos, generando empleo, cultura, innovación y conocimiento, en una ciudad en transición. Se realizó un mapa del deterior realizando una extrapolación de los ejercicios y análisis del deterioro de Kevin Lynch (3) (ver figura 3).
Con este proyecto urbano se busca explorar intervenciones en diferentes escalas para la reintegración a la vida urbana de áreas en deterioro en la ciudad de Barquisimeto. Así mismo, se identificó y mostró situaciones específicas de deterioro proponiendo intervenciones tácticas según las posibilidades que brindan las distintas condiciones de deterioro u ocupación, se busca una unidad a través de la fragmentación. Estas intervenciones se enmarcaron en la visión de ciudad de innovación, conocimiento y tecnología, y en el caso específico se proyecta el centro como un nodo de la ciudad que funciona como incubadora de ideas y conocimiento.
3.2. Estrategias
El diseño de este Plan Maestro se fragmenta con el propósito de ofrecer una idea coherente que conecte cada fase, relacionándolo con la proyección general del sistema planteado para el desarrollo de espacios arquitectónicos y urbanos. En el que se desplieguen nuevas dinámicas y procesos que respondan a las necesidades observadas en la ciudad de un manejo eficiente e integral de los residuos sólidos, con esto beneficia la infraestructura de la ciudad y su vez, la estructura sea autosustentable e interdependiente del sistema ya existente en la misma.
Cada Plazo presenta enfoques considerablemente diferentes, se relacionan con el sistema estructural de todo el plan, sistematizando las dinámicas y procesos relacionados al manejo de Residuos Sólidos Urbanos (RSU). Una particularidad que presenta este proyecto, es el desarrollo inicial a menor escala sin la presencia de un centro que disemina los módulos en los puntos estratégicos estudiados, sino que, parte de un puesto piloto con el que se llevará a cabo el estudio de la influencia generada por la presencia de ese módulo en el espacio, posteriormente se proyectará hasta que la situación amerite la presencia de centros con una escala de influencia mucho mayor.
Plazo #1: Eco Puntos - Módulos de Acopio
Asentados en puntos de zonas estratégicas de alta contaminación, se proponen como modelo genérico capaz de flexibilizarse, modificarse y adaptarse a las soluciones de distribución, organización espacial, transformación o ampliación. En primer orden funcional como receptores de residuos inorgánicos con autogestión directa. Este primer plazo se desglosa en tres etapas que darán paso a la inserción de estos módulos al entorno social y sus dinámicas:
Primera etapa, consiste en la colocación de los módulos, para esto se hace un estudio del espacio a intervenir para su adecuación y adaptación en el entorno en que se desempeñará. Se configura este prototipo de acopio, a través del diseño participativo y de cooperativas, que logre generar un modelo genérico que pueda replicarse y extenderse en amplia red como kits a pedido. A su vez, cada dispositivo fuera de lo estandarizado busca responder a una necesidad o problemática específica que determinará su forma y función como se ejemplifica con el módulo de Pescadores de La Ruezga, sector del norte de la ciudad, el cual contará con una bio-barda que ataje cualquier desecho sólido que circule por la quebrada.
Segunda etapa, consiste en una configuración y apropiación, en el que se plantean estos dispositivos como espacios de concientización a través de la programación de talleres y reuniones que incluya a la comunidad, enfatizando la influencia que tiene en las dinámicas de los ecosistemas que los rodea. Simultáneamente, estos programas ofrecerán a la población recolectora un espacio en el cual desempeñar de manera más eficiente sus actividades, otorgándole herramientas que profundicen en la formación del personal, mejorando las mecánicas de trabajo y manipulación de los residuos para ser aprovechados lo máximo posible, transformando estos dispositivos en centros de desarrollo y conexión para las diversas rutas próximas a este punto dentro de la comunidad. Este dispositivo a nivel de infraestructura en su labor principal, recibir residuos sólidos inorgánicos, busca generar recursos económicos directos e indirectos a su comunidad siendo la basura el combustible que opere la máquina pero que a través de su programa complementario pueda ser plataforma para la interactividad y esparcimiento.
Tercera etapa, que ya consiste en la consolidación del dispositivo, amplificando la estructura, generando mayor impacto en las operaciones dentro de las comunidades. Con esta etapa, el espacio se establece como un centro que permita a los recolectores y otras cooperativas, formar asociaciones que le permitan tener visibilidad ante la sociedad.
Paralelamente, la ampliación de estos módulos permitirá aprovechar las virtudes que posee para anexar nuevos servicios, que a su vez, beneficien a la comunidad en sus actividades cotidianas, ofreciendo espacios de recreación y servicios de estudio, remunerados a través de la actividad proactiva de la comunidad de recolección de RSU e intercambio de estos por servicios, garantizando el ejercicio cotidiano del reciclar y la preservación de la labor principal del módulo conjunto a las actividades de las asociaciones que allí hacen ejercicio laboral (ver Figura 4 y 5).
Plazo #2: Eco Titanes - Plantas de Tratamiento
Seguidamente se amplía la red de dispositivos de acopio y recolección tanto para áreas residenciales, como instituciones y espacios públicos. Además, se incluyen zonas de tratamiento generando una banda “inorgánicos” dirigida a la zona industrial y una banda de orgánicos en la periferia de la ciudad. De esta manera se crean espacios especializados, transformando la recolección en una labor formal. Con la estructuración y conexión de cada uno de los Eco puntos integrados en la ciudad, se garantiza un sistema con el que las asociaciones y grupos recolectores pueden acceder a métodos de distribución más eficientes e integrales (ver Figura 6).
De este modo, compenetran las dinámicas aisladas dentro de un proceso interdependiente, obteniendo resultados y cifras específicas de la influencia de estos esfuerzos dentro de las comunidades; demostrando la gran capacidad de organización y planificación que pueden ofrecer a las entidades públicas y privadas. Esto permitirá el crecimiento del sistema y su integración a los movimientos cotidianos, como un nuevo modelo de negocio e inversión al observar las herramientas y oportunidades que estos módulos pueden gestionar de forma interdependiente al resto de Eco puntos, administrando los recursos recogidos para su equitativa distribución a los puntos de tratamientos pertinentes según la clasificación dada a estos residuos.
Plazo #3: Núcleo del Sistema - Centro de Interpretación
En este Plazo, como consolidación, se proyecta el núcleo de todo el sistema en el centro de la ciudad, revitalizando y reciclando una edificación en desuso. Donde se desarrolla una sede de interpretación y administrativa, cuya función principal es la de promover un ambiente para el aprendizaje, buscando revelar y divulgar al público, la complejidad del sistema a través de pequeñas muestras y actividades que vayan dirigidas a la población general. Dedicando especial atención a la visita de grupos organizados y a la capacitación de recuperadores informales.
Para ello, se hace uso de un edificio en desuso, el cual permanece en la memoria colectiva del ciudadano. Este edificio conocido con el nombre de la Galletera el Ávila, ubicada en la zona centro-oeste de la ciudad como fábrica de galletas, el funcionamiento original de la planta, así como como las relaciones sensoriales que ella generaba en su contexto inmediato, se han reinterpretado, y llevado al nuevo funcionamiento propuesto. Se hace representación de las antiguas chimeneas con unas torres de reciclaje, así como la antigua sirena que enmarcaba los horarios de trabajo de la galletera, se propone un mirador, haciendo hincapié en la apreciación de los procesos y el paisaje urbano.
Dicho esto, la estructuración de todo un sistema interdependiente genera este centro a la propia inercia de las necesidades de expansión y compenetración con los sistemas ya existentes que complementen a los programas públicos y privados en carácter de recolección y distribución de recursos sólidos para su posterior tratamiento. Las capacidades que presente son pertinentes considerando la zona de influencia que esta muestra, al tratarse de centro del macro-sector, su labor abarcara el desarrollo de distintas disciplinas que se relacionen directa o indirectamente a la gestión de los residuos sólidos urbanos.
Estos procesos se verán reflejados como parte de un plan denominado del consumidor al productor, ya que los residuos cotidianos serán reintegrados a la dinámica de comercio como materia de producción, siendo este centro el punto de mayor dedicación a las labores de clasificación, inspección y gestión de los procedimientos necesarios para la preparación de los dispositivos RSU. Paralelamente a esto, la administración del centro de interpretación se encargará del desarrollo del ecosistema que hará vida dentro de las instalaciones, aprovechando las oportunidades de empleo que este ente puede generar, se observa la oportunidad de planificar actividades que incentive la participación de la población para el desarrollo de proyectos comunitarios y de investigación en el área. Esto con el fin de acondicionar espacios dedicados a la formación del personal informal (ver Figura 7).
Al mismo tiempo, este centro de interpretación tendrá la cualidad de exponer estos procesos a la población general, con recorridos programados y visitas guiadas que concienticen sobre los procesos que allí se llevan a cabo, promoviendo nuevas dinámicas dentro de centros comunitarios que complementen el ejercicio de las labores. Por consiguiente, el valor de estos bienes presentara una nueva visión, como un nuevo medio y recurso para la financiación y comercialización de materia prima destinada a los sectores de mayor demanda energéticas. Presentándose nuevos panoramas para la las practicas ecológicas al encontrarles un espacio dentro de la sociedad a través de un incentivo económico.
Paralelamente, la consolidación de estos centros otorgara al personal recolector una visibilidad ante la sociedad, en el que podrán ser reconocidos ante las entidades públicas y privadas. Estos espacios representan y les da una identidad a los esfuerzos realizados por cada individuo o agrupación que se encargue de la recolección y distribución de estos residuos.
Naturalmente, estos ejercicios y trabajos serán reconocidos a través de la certificación para asegurar la preservación de un ecosistema saludable y funcional, desde el cual se establezcan normativas para tratado de estos residuos, garantizando un buen manejo y gestión de todos los eco puntos, como módulos interdependientes que representen a su sector correspondiente. Los cuales podrán medir su desempeño en relación con la eficiente ocupación de sus competencias, como un sistema de recompensas que reconozca el esfuerzo realizado por cada módulo de forma independiente pero que beneficia a todo el ecosistema.
4. CONCLUSIONES
El espacio urbano es una posibilidad, un recurso destinado a la ocupación de bienes y la aplicación de éstos para la construcción de ecosistemas, que se relacionan componiendo una maquinaria general como lo son las sociedades. Sin embargo, se pueden ver comprometidos por la mala gestión de los productos creados por estos sistemas, amenazando a la larga el funcionamiento óptimo de cada pieza y la integridad del entorno que permite su existencia. Este programa o propuesta muestra las dimensiones de diversas problemáticas, que de manera aislada no consideran mayor amenaza, pero es la normalización generalizada de estas costumbres lo que incide en gran escala a la imagen y funcionamiento de los espacios.
Profundizando en este campo se revela un área de oportunidad para todos los componentes de las sociedades productivas para el aprovechamiento de recursos aparentemente en desuso para su reinserción en los ciclos de producción como nuevas herramientas que benefician a la eficacia de estos sistemas. A su vez, este cambio de perspectiva en relación con los recursos genera un cambio en las concepciones culturales y sociales al recodificar el valor de estos residuos como un bien para las masas, cuyo valor es remunerado por el esfuerzo de reinsertarlos. Por consiguiente, la población que funcionaba fuera de las normativas sociales y gubernamentales debido a que sus actividades respondían a otras necesidades reflejadas por el espacio, son incluidas nuevamente a las dinámicas cotidianas teniendo una representación y visibilización de sus actividades como parte de un ejercicio ciudadano que beneficia a todo el ecosistema.
Naturalmente, el espacio ofrece las oportunidades para el desenvolvimiento de actividades y la reinterpretación de los espacios existentes y en desuso, son redirigidos a responder a las nuevas necesidades de su entorno, protegiendo estos sitios del deterioro y olvido, son enriquecidos por sus nuevos propósitos dentro de las sociedades, expandiendo el valor de los esfuerzos realizados para el acondicionamientos de estos espacios en el pasado y su resguardo y activación en el futuro, consolidando así una imagen de innovación y prosperidad a las sociedades.