Dr. Rafael Isidro Briceño Carrasquero (1917- 2006)

Dr. Oscar Agüero

El 26 de septiembre de 2006 falleció a los 89 años de edad el notable gineco-obstetra, oriundo del Estado Trujillo, Profesor Rafael Isidro Briceño Carrasquero. Se había graduado de médico en la Universidad Central de Venezuela en 1943 y realizado curso de posgrado en obstetricia y ginecología en la Universidad de Pensilvania, EE.UU, en 1952-1954. Durante su larga vida médica, especialmente en hospitales públicos desarrolló admirablemente las tareas de asistencia, investigación y docencia que nuestros reglamentos asignan al personal médico. Cuando cumplió 50 años de graduado el Concejo Municipal de Trujillo lo honró con el título de “Hijo Ilustre de la ciudad de Trujillo”, en un acto efectuado el 6 de agosto de 1993, en el que el “Discurso de Orden” estuvo a cargo del Dr. Francisco José Llavaneras Torres (“Rafael Isidro Briceño. Imagen de un Médico Ejemplar”. Valera: Editorial Multicolor C.A.; 1994), que resume la biografía del homenajeado y del cual he tomado algunos datos.

Conocí al Dr. Briceño Carrasquero desde su etapa de estudiante de medicina en el Internado de la Maternidad Concepción Palacios y luego mantuvimos una agradable amistad durante muchos años. En sus viajes a Caracas era infaltable una visita al hospital para intercambiar ideas y proyectos de estudios. Fue un hombre culto, estudioso, al día en sus conocimientos, honesto, sencillo, de hablar sosegado y respetuoso. Físicamente, era alto, bien formado, trigueño, con abundante vello facial que exhibía con orgullo y buen cuido. Tenía todo el aspecto de jeque árabe o de un moro invasor de España.

El extraordinario Rector de la Universidad Central, Dr. Francisco De Venanzi, organizó un ciclo de charlas de sus profesores ante otras universidades del país. Fui designado para hablar en los departamentos de Obstetricia y Ginecología de la Universidad de Los Andes en sus sedes de Valera y Trujillo. Allí, Briceño Carrasquero fue mi anfitrión y pude conocer su servicio en el Hospital de Valera que me impresionó como uno de los mejores organizados en Venezuela Sus alumnos, adjuntos y colaboradores, que lo respetaban y admiraban, decían que manejaba su departamento con disciplina teutónica. Allí, ascendió hasta Profesor Titular de Obstetricia y Ginecología.

Hizo publicaciones sobre: síndrome de Demelin, cáncer del cuello uterino y embarazo, tumor de células de la granulosa, cáncer de seno, endometriosis, amibiasis vaginal, colpotomía posterior en el diagnóstico y tratamiento del embarazo ectópico, cesárea, histerectomía vaginal (de la que describió una nueva técnica), cirugía en ginecología, conización de cuello uterino, mortalidad materna, etc. Todos sus trabajos fueron serios, honestos, bien documentados y bien escritos. Merecen una mención especial: su extensa revisión sobre enfermedad trofoblástica en Venezuela en la que reunió no solamente lo publicado, sino que mediante correspondencia y visitas personales logró información de muchos hospitales de nuestros país (hasta ahora es el más completo estudio realizado entre nosotros); su ponencia para la 7ª Reunión Nacional de Obstetricia y Ginecología, “Mortalidad perinatal en el Hospital Central de Valera”, fue una excelente presentación del tópico; su insistencia y defensa de la cirugía genital a través de la colpotomía posterior lo llevaron a redactar una monografía de 123 páginas (“La Vía Vaginal: una Alternativa Para Intervenciones Ginecológicas”. Valera: Editorial Multicolor; 1980); el interés por la oncología femenina, lo condujo a protagonizar y promover en su región, una campaña pro mayor cobertura de su pesquisa y tratamiento.

Con la Sociedad de Obstetricia y Ginecología de Venezuela colaboró ampliamente desde 1952 (había ingresado como miembro titular en 1951), durante la primera Reunión Nacional, en la cual se evaluó la situación de la operación cesárea en Venezuela. En 1957 en la 2ª Reunión Nacional, formó parte del panel que, por primera vez en este país, enfocó bajo la forma de simposio, el tema “Endometriosis en su aspecto patogénico”. En 1972, 7ª reunión ya citada, además de la ponencia, participó en el simposio sobre “Endoscopia pélvica”. En los Congresos de 1980 y 1983 fue coordinador del curso previo que hizo, en el primero, una “Actualización en ginecología y reproducción” y, en el segundo, fue coparticipe en simposio que se refirió a “Histerectomía de causa obstétrica”. Fue Presidente de la Seccional de Los Andes (hoy Sur-occidental) en 1960, Vicepresidente Nacional en 1967 y 1971, Presidente Honorario del 6º Congreso Nacional, 1977.

Esta meritoria labor dentro de la especialidad le fue retribuida con las siguientes designaciones:

1. Maestro de Ginecología y Obstetricia, concedida  por la Federación Latino Americana de Sociedades de Ginecología y Obstetricia, en 1984.

2. Miembro Honorario de la Sociedad de Obstetricia y Ginecología de Venezuela.

3. Miembro Correspondiente de la Academia Nacional de Medicina, puesto Nº 7, por el Estado Trujillo.

Llavaneras, en su citado discurso de orden, cita otros diez premios, órdenes, condecoraciones, medallas, distinciones que le otorgaron organismos nacionales y regionales, todo lo cual es demostrativo de la inmensa labor que llevó a cabo este ginecoobstetra venezolano cuya muerte lamentamos hoy.