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Revista de Obstetricia y Ginecología de Venezuela
versión impresa ISSN 0048-7732
Rev Obstet Ginecol Venez v.67 n.1 Caracas ene. 2007
Carta al Editor
Tumores uterinos y ováricos: ¿Gigantes? o Grandes
Dr. Carlos Briceño-Pérez
Departamento de Obstetricia y Ginecología. Facultad de Medicina. Universidad del Zulia. Maracaibo, Venezuela
El gran tamaño de algunos tumores ha sido descrito con fascinación a través del tiempo. Entre ellos se incluyen los ginecológicos, de los cuales se describen casos de crecimiento descomunal, sobre todo antes del advenimiento del ultrasonido (1). La terminología de estos tumores de gran tamaño contiene calificativos muy variados y confusos, entre los cuales se incluyen inmensos, extensos, voluminosos, masivos, grandes, muy grandes, gigantes, gigantescos, etc. (1).
En Venezuela, durante la práctica médica y en eventos científicos (tanto los que presentan trabajos científicos, como los comités científicos que los aceptan), para referirse a estos tumores ginecológicos de gran tamaño, es frecuente utilizar el término gigante. Asimismo, para denominarlos gigantes usualmente se utilizan sus medidas, pero no se mencionan los límites para su definición.
Sin embargo, en la literatura de habla inglesa, desde hace 35 años hay acuerdo en definir como gigantes a los tumores uterinos u ováricos con peso superior a 25 lbs (11,3 kg). Esto se debe a que en 1971, Beacham y col. (2) revisaron los tumores uterinos u ováricos reportados en la literatura inglesa entre 1946-1970, con peso igual o superior a 25 lbs (11,3 kg). Estos autores destacaron lo siguiente: 1. definieron como gigantes solamente los tumores ginecológicos con peso igual o superior a 25 lbs (11,3 kg) y 2. el parámetro usado para su definición fue el peso, y no sus medidas. Sin embargo, ellos no definieron los tumores con peso menor a 25 lbs (11,3 kg), por lo que en marzo del 2001 Briceño-Pérez y col. (1) propusieron utilizar el término grandes miomas uterinos (GMU) para leiomiomas con peso entre 0,8 kg (peso límite aproximado para decidir la vía quirúrgica abdominal o vaginal) y 11,3 kg (peso límite establecido por Beacham y col. para definir los tumores gigantes).
En cuanto a los miomas uterinos gigantes, hasta el 2001 sólo se habían reportado 57 casos a nivel mundial (1). El caso de mayor tamaño fue descrito por Hunt (3) en 1888, con un peso de 63,5 kg. En Venezuela, hasta el 2001 (1) no se habían reportado miomas gigantes, y el leiomioma de mayor tamaño es un GMU de 8 kg, descrito en 1964 por Guendsechadse y Narváez (4), del Hospital Central Luis Ortega de Porlamar. En la serie de 11 GMU reportada por Briceño y col. (1), el peso osciló entre 0,8-4,2 kg.
Con respecto a los tumores de ovario, en Venezuela, en diciembre de 1985, Gómez (5), del Hospital Rafael Zamora Arévalo de Valle de La Pascua, Estado Guárico, reportó un caso de un cistoadenoma seroso papilar gigante y embarazo. Esta tumoración sí se puede considerar gigante, pues su peso fue 14,5 kg. Posteriormente en septiembre de 2003, Núñez-Troconis y col. (6), de Maracaibo, Estado Zulia, publicaron 2 casos de quistes gigantes del paraovario, los que, según lo descrito antes, no deben calificarse así, pues uno pesó 3,575 kg y el otro fue considerado como tal, en base a sus medidas (25 x 20 x 20 cm) y no a su peso.
Con relación a otros tumores de origen ginecológico (trompas, vagina, vulva), aparentemente no están bien establecidos ni el parámetro a utilizar ni los límites, pues Beacham y col. (2) sólo reportaron tumores uterinos y ováricos. En vagina y vulva la capacidad de crecimiento tumoral puede ser más limitada que en abdomen, y quizás el parámetro a utilizar no necesariamente sea el peso, o si se usa éste, el límite puede ser inferior a 25 lbs (11,3 kg).
En la bibliografía venezolana revisada (7-10) no se han descrito casos que, según esa definición, sean catalogados como gigantes. Se consiguieron 2 trabajos con tumores que, de acuerdo a este concepto, pudiesen etiquetarse como grandes. En el primero, Zambrano y col. (11), de la Maternidad Concepción Palacios de Caracas, en marzo de 1984, presentaron una paciente con embarazo y un gran tumor de vulva (fibromioma), y no reportaron su peso, sino sus medidas (10 x 8 x 7 cm). Y en el segundo, en marzo de 1992, Somogyi y col. (12) de la Unidad de Ginecología, Reproducción y Salud Integral de Valencia, Estado Carabobo, describieron un caso de condilomatosis genital gigante; calificación que basaron sólo en su extensión (toda la vulva, tercio inferior de vagina, periné, ano, pliegue interglúteo y parte del monte de Venus).
Se espera que la presente información sirva para aclarar de una vez por todas, las definiciones y confusiones existente entre los tumores uterinos y ováricos gigantes y grandes; y unificar criterios con la literatura de habla inglesa, en base a lo señalado desde 1971 por los autores citados y col. (2).
REFERENCIAS
1. Briceño-Pérez C, Alaña F, Atencio de Ávila D, Betancourt de Benítez C, Schloeter L, Portillo B, et al. Grandes miomas uterinos. Rev Obstet Ginecol Venez. 2001;61:35-42. [ Links ]
2. Beacham W, Webster H, Lawson E, Roth L. Uterine and/or ovarian tumors weighing 25 pounds or more. Am J Obstet Gynecol. 1971;109:1153-1161. [ Links ]
3. Hunt SH. Fibroid weighing one hundred and forty pounds. Am J Obstet Gynecol. 1888;21:62-63. [ Links ]
4. Guendsechadse D, Narváez M. Un caso de fibromioma uterino gigante. Rev Obstet Ginecol Venez. 1964;24:795-799. [ Links ]
5. Gómez J. Tumor gigante de ovario y embarazo. Rev Obstet Ginecol Venez. 1985;45:224-225. [ Links ]
6. Nuñez-Troconis J, Gómez G, Perche S, Delgado de Fox M. Quiste gigante del paraovario: reporte de 2 casos. Rev Obstet Ginecol Venez. 2003;63:161-163. [ Links ]
7. Agüero O. Publicaciones Obstrétricas-Ginecológicas-Perinatológicas Venezolanas. Volúmenes I y II. Caracas: Editorial Ateproca; 1993. [ Links ]
8. Agüero O, Pérez DGregorio R. Índice global volumen 1 al 50. Rev Obstet Ginecol Venez. 1994;54(Supl):1-160. [ Links ]
9. Agüero O. Publicaciones de la Maternidad Concepción Palacios. Rev Obstet Ginecol Venez. 2000 60(Supl):1-84. [ Links ]
10. Agüero O, Pérez DGregorio R. Indice global años 1991-2000. Rev Obstet Ginecol Venez. 2002;62(Supl):1-58. [ Links ]
11. Zambrano O, Kizer S, Fernández S, González U. Tumor de vulva y embarazo. Presentación de um caso. Rev Obstet Ginecol Venez. 1984;44:45-47. [ Links ]
12. Somogyi L, Malpica C, Hernández C. Condilomatosis genital gigante. Su tratamiento con láser de dióxido de carbono (CO2). Rev Obstet Ginecol Venez. 1992;52:61-63. [ Links ]