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Paradígma

versión impresa ISSN 1011-2251

Paradígma vol.37 no.1 Maracay jun. 2016

 

La Contribución de los Juegos Cooperativos a la Mejora Psicomotriz en Niños de Educación Infantil

Cristina Cuesta Cañadas (*)

Cristina_CC@hotmail.com

Alejandro Prieto Ayuso (*)

Alejandro.Prieto@uclm.es.

Isabel María Gómez Barreto(*)

Isabelmaria.gomez@uclm.es

María Ximena Barrera

mbarrera@fiu.edu

Universidad Internacional de Florida. Miami. EE.UU

Pedro Gil Madrona (*)

Pedro.Gil@uclm.es

(*) Universidad Castilla La Mancha, Facultad de Educación, Departamento de Didáctica de la Expresión Corporal (Albacete, España)

Resumen

El objetivo principal de este trabajo ha sido comprobar en qué medida una propuesta didáctica de juegos motores cooperativos mejora los diferentes ámbitos en los que hemos dividido la motricidad, educación física o psicomotricidad en Educación Infantil, como son el desarrollo físico, motor, perceptivo, social-relacional y emocional, en un colegio público de la provincia de Albacete. El diseño de investigación ha sido cuasi experimental, utilizando un grupo control y un grupo experimental. Los instrumentos utilizados para la evaluación de la propuesta han sido una hoja de observación psicomotor en los ámbitos físico-motor, perceptivo-motor y afectivo-relacional; un test de perfil psicomotor; y una escala de habilidades sociales. Los resultados obtenidos muestran por un lado, que el grupo experimental ha mejorado en habilidades sociales con adultos e iguales, y por otro, que dicho grupo ha mejorado en relación al dominio psicomotor en ejecución motriz, control tónico postural, esquema e imagen corporal y coordinación de brazos y piernas. Se concluye que la propuesta de juegos cooperativos aquí diseñada resulta eficaz para mejorar dichos aspectos.

Palabras clave. Juego, juego educativo, evaluación de la educación, habilidad, educación física, comportamiento social, dinámica de grupo

Contribution to Psychomotricity In Early Education Through Cooperative Games

Abstract

The main purpose of this paper is to show how a didactic proposal, based on cooperative motor games, can improve the different aspects of the Early Education psychomotricity, such as the physical, motor, perceptive, social-relational and emotional development, in a public school in the province of Albacete, Spain. The design of this research has been quasi-experimental, using a control group and an experimental group. The tools used to evaluate this proposal were: a psychomotor observation sheet for the psycho-motor aspect, perceptual-motor aspect and affective-relational aspect; and, a scale to measure the social skills. The results obtained show, on one hand, that the experimental group has improved in its social skills when relating to adults or peers, and on the other hand, that the experimental group has improved in  relationship to its psychomotor domain regarding motor performance, postural control, body image, and arms and legs coordination. In conclusion, it can be said that the proposal of cooperative games, as designed here, is effective for improving the above-mentioned aspects.

Key words. Play, educational games, educational evaluation, skill, physical education, social behaviour, group dinamycs

Recibido: 9 de febrero de 2016 Aceptado: 21 de abril de 2016

Introducción

El origen del aprendizaje cooperativo se produce a mediados de los años 70, a partir de una serie de investigaciones que resaltaron la importancia de la cooperación sobre la competición para promover el aprendizaje (Velázquez, 2012). A partir de este momento, varios autores se han dedicado a su estudio. En este sentido, Mínguez (2009) define el aprendizaje cooperativo como una manera de construir conocimientos trabajando a través de la formación de grupos heterogéneos cuyos componentes son interdependientes y comparten un espacio, unos objetivos comunes, unos materiales de aprendizaje y unos cargos que implican cierto grado de responsabilidad. Otro autor, Pujolás (2008), destaca como característica principal del aprendizaje cooperativo la utilización de la interacción del alumnado en grupos reducidos como recurso didáctico orientado a favorecer el aprendizaje de todos los alumnos y la participación igualitaria como otro de los elementos definitorios del aprendizaje cooperativo.

Estudios previos corroboran los efectos positivos del aprendizaje cooperativo (Velázquez, 2014) en el rendimiento académico, la autoestima, el aprendizaje activo y el desarrollo de habilidades sociales (Johnson & Johnson, 1994; Slavin, 1995), produciéndose estos mismos efectos relacionados con el logro de los estudiantes en el área curricular de Educación Física (Barret, 2005). Es de importancia señalar que en un programa de aprendizaje cooperativo en Educación Física, los estudiantes adquirieron una mejora en interacción, responsabilidad y mayor respeto al resto de sus compañeros de equipo (Dyson, 2001). En un estudio posterior, este mismo autor informó que los estudiantes y los profesores pensaban que un programa de aprendizaje cooperativo en la Educación Física mejoró las habilidades de comunicación de los estudiantes (Dyson, Howes & Roberts, 2002).

Concretando el objeto de estudio de esta investigación, debemos tener en cuenta la principal herramienta dentro del aprendizaje cooperativo con la que hemos trabajado. Estos son los juegos cooperativos. Los juegos cooperativos son juegos en los que los participantes dan y reciben ayuda para contribuir a alcanzar uno o varios objetivos comunes (Garaigordobil, 2002). Además se considera como una actividad liberadora ya que libera de la competición, de la eliminación, de la agresión y da libertad para crear (Orlik, 1990). Por otra parte, es de destacar que este estudia se ha centrado en la etapa de Educación Infantil, en el que la Educación Física ocupa un papel destacado bajo la denominación de psicomotricidad, puesto que se produce el progresivo descubrimiento del propio cuerpo como fuente de sensaciones, la exploración de las posibilidades de acción y funciones corporales, las relaciones afectivas establecidas en situaciones de actividad motriz, y en particular mediante el juego, serán fundamentales para el crecimiento emocional (Gil-Madrona, González-Víllora, Contreras-Jordán & Gómez-Barreto, 2008) .

Diversos autores destacan características de los juegos cooperativos (Orlick 1990; Pérez-Oliveras 1998; Omeñaca & Ruiz, 1999). Desde nuestro punto de vista, las tres características esenciales del juego cooperativo son: (1) ausencia de oposición, (2) inclusión de todos y (3) la diversión y el disfrute. En la Figura 1 puede verse la importancia del juego cooperativo dentro del área curricular de Educación Física.

Una de las personas que más se ha centrado su actividad de investigación en los juegos cooperativos ha sido Orlick (1981), quien valoró el efecto que las actividades lúdicas cooperativas producían en conductas de compartir y en las manifestaciones de alegría por parte de los participantes. Trabajó con una muestra de 71 niños de 5 años, estableciendo dos grupos experimentales sometidos a un programa de juego cooperativo y dos grupos de control que fueron sometidos a un programa de juego tradicional. Los resultados evidenciaron la existencia de diferencias significativas en las conductas de compartir en los grupos experimentales con respecto a los de control tras la aplicación del programa de juegos.

Ahora bien, no se debe pensar que juego cooperativo y aprendizaje cooperativo son términos sinónimos (Velázquez, 2010, 2012). A pesar de presentar similitudes, también tienen sus diferencias, que se sintetizan en la tabla 1:

Tabla 1. aprendizaje cooperativo versus juegos cooperativo (Velázquez, 2010, p. 48)

Para introducir el juego cooperativo en la clase de Educación Física es recomendable que primero se genere en las clases una lógica de cooperación (Velázquez, 2013) y el docente se asegure de que su alumnado tiene, al menos, unas habilidades interpersonales y unas competencias sociales mínimas orientadas al trabajo en equipo.

Además, los beneficios de la utilización de dichos juegos son múltiples. No sólo favorece la participación activa, los juegos cooperativos a su vez, trabajan los valores, entre otros, los interculturales y la mejora de la satisfacción de los participantes en Educación Física con su uso y su capacidad de favorecer en el desarrollo de la autoestima y adquirir un autoconcepto positivo en sí mismo (Omeñaca, 2001). Del mismo modo, otro grupo de estudios han confirmado el efecto positivo del aprendizaje cooperativo para estimular una mejora del clima del aula, unas relaciones interpersonales más positivas dentro del grupo (Battistich, Solomon & Delucchi, 1993; Ballantine, & Larres, 2007) y una mayor cohesión grupal (Hwong, Caswell, Johnson & Johnson, 1993) que la que se produce en situaciones de aprendizaje con metas individuales (Gillies, 2006).

En virtud de lo expuesto hasta el momento, este trabajo tiene dos objetivos. En primer lugar diseñar, desarrollar y evaluar una propuesto didáctica de Juegos Cooperativos en Educación Física en la etapa de Educación Infantil (5 años). Y en segundo lugar comprobar en qué medida contribuye la propuesta de Juegos Cooperativos en Educación Infantil al desarrollo cognitivo, social, afectivo y motor del alumnado de cinco años.

Método

Diseño

Se utilizó un diseño cuasi-experimental con medidas post-test en el grupo experimental y en el de control. Debido al uso de grupos ya establecidos en clases, no fue posible realizar una asignación totalmente al azar de los participantes según las dimensiones de la variable independiente (Propuesta de Juegos cooperativos en Educación Física o psicomotricidad infantil). Así, se realizó una asignación al azar de dos de los grupos como grupo experimental (n=19) y el grupo de control (n =18). En este sentido, se utilizó un diseño de grupo de control no equivalente (Campbell & Stanley, 1963), lo que implica que a priori los grupos pueden ser desiguales debido a la previa configuración de las clases. 

Instrumentos

Se han utilizado tres herramientas para llevar a cabo la evaluación:

1. Hoja de observación psicomotriz (Cuesta-Crespo, Prieto Ayuso & Gil-Madrona, en prensa): Encuesta destinada a las tutoras de las aulas de 5 años (A y B), quienes han tenido que evaluar a sus alumnos tras ser observados durante un periodo de 5 días a través de 52 ítems agrupados en diferentes ámbitos que se corresponden con la psicomotricidad:

a) Físico-motores: Divididos a su vez en lateralidad, coordinación dinámica, equilibrio, ejecución motriz, control tónico-postural y el control respiratorio.

b) Perceptivo-motores: Con el esquema y la imagen corporal, la disociación motriz, la coordinación viso-motriz y la orientación y estructuración espacial.

c) Afectivo-relacionales: Divididos en control emocional y las relaciones sociales.

La valoración ha sido del 1 al 5, siendo 1 “Nunca o nada” y 5 “Siempre, mucho”.

Tabla 2. Instrumento de observación psicomotor

Tabla 3. Hoja de observación psicomotor

2. Perfil psicomotor (De la Cruz & Maizara, 2003): Consta de 40 ítems de perfil psicomotor. Cada elemento tiene una puntuación de 0 (imposibilidad de realizar la tarea), 1 (ejecución deficiente) o 2 (ejecución correcta), de acuerdo con la calidad de realización estimada. Dicha prueba ha sido cumplimentada por el investigador con la ayuda del maestro de Educación Física.

Tabla 4. Perfil psicomotor

3. Escala de habilidades sociales (Lacunza, Castro & Contini, 2009): Es un cuestionario que consta de 16 ítems relacionados con los comportamientos habituales de los niños. Las opciones de respuestas han sido: Nunca (0), Algunas veces (1), Frecuentemente (2). Los padres y madres completaron las encuestan después de la intervención de los juegos cooperativos.

Tabla 5. Escala de habilidades sociales

Procedimiento

Se informó al centro y a los padres y madres y se lograron los permisos y consentimientos necesarios (Faden, Beauchamp, y King, 1986). Seguidamente, se procedió con el diseño, la intervención y nuevamente la recogida de datos. La investigación cumplió con todos los requerimientos éticos, respetando el anonimato y la voluntariedad de los padres de los participantes. El estudio se llevó a cabo en tres fases. Primera, el diseño del programa de intervención. A continuación, el programa basado en juegos cooperativos se aplicó al grupo experimental, mientras que el de control desarrolló sus clases de Educación Física siguiendo el modelo tradicional y habitual. Finalizada la intervención, se realizó la medida pos-test en los dos grupos. Los datos se han analizado con el programa informático Microsoft Excell 2010, hallando la media aritmética de cada una de las variables analizadas.

Propuesta didáctica

El esquema general de la propuesta didáctica puede verse en la Figura 2. El programa de intervención gira en torno a través de una temática común, siendo esta “Juntos para dar la vuelta al mundo”. Todo se vertebra a raíz de los ambientes de aprendizaje, tal y como justifica Blández (2000) en su propuesta de Unidades Didácticas. Por este motivo, la metodología utilizada ha sido globalizada, es decir, las actividades que se han propuesto en la fase de actividad motriz no se presentan aisladas, sino que son una continuación del contenido visto en el aula, con la finalidad de desarrollar un conjunto de capacidades en las distintas dimensiones de conocimiento, valores y actitudes del alumnado a través de diversas herramientas para su desarrollo integral (Gil, 2013). Es por ello que a través de las actividades propuestas (trabajo por proyectos, centros de interés, rincones, etc.) se ha querido trabajar de forma global y no mediante parcelación del conocimiento (motor, perceptivo, afectivo, relacional, social y cognitivo). Un ejemplo de estas actividades es el cuento motor, siendo este un cuento narrado y jugado, con características y objetivos propios, que se utiliza como recurso didáctico para el desarrollo de las habilidades motrices básicas y de determinados contenidos conceptuales y actitudinales (Gil, 2013).

Centrándonos en las sesiones, han estado divididas en cinco fases, tal y como señala Vaca (1996). En este sentido, Pastor (2013), realiza una revisión en la que destaca a varios autores que dividen la sesión de Educación Física en Educación Infantil en más de tres fases, y otros autores que señalan tres fases en cada sesión.

Algún ejemplo de juegos cooperativos utilizados durante la propuesta aquí desarrollando son los siguientes:

• Momento inicial

o Hora de partir

o Pasajeros al tren

o Somos animales

o El espejo

o Marionetas

o Cuento motor

o Nos movemos y saludamos

o Busco mi pareja

o De excursión

• Momento de juego activo

o Los tiburones de California

o Circuito por parejas

o Los coquitos

o Viaje en globo

o Llevamos un paquete

o La cadena

o Mensaje roto

o Mercancía peligrosa

o Paseo por el lago encantado

o Los bolos

o Los lobos y las gallinas

o ¡Socorro, tiburón!

o El dragón

o Palomitas

o Aros cooperativos

o ¡Esto es la guerra!

o A casita que llueve

• Momento de relajación

o Carnaval de Brasil

o Somos gatitos

o Hacemos la compra

o Dibujos en la espalda

o Masaje con pelotas

o Bailemos un Valls

o Volamos

o Regreso a casa

En el anexo 1 se puede observar un ejemplo de clase realizada a través de esta propuesta didáctica.

Resultados

Hoja de observación psicomotor

Grupo experimental

Como se aprecia en la tabla 6, la mejora de los ámbitos en los que hemos desglosado la Educación Física o psicomotricidad en esta etapa educativa, el grupo experimental alcanza muy buenos resultados, destacando los alumnos en los módulos de ejecución motriz, control tónico postural, esquema e imagen corporal y en las relaciones sociales, cuyos resultados han sido máximos de 5. Sin embargo, decaen en algunos aspectos relacionados con la lateralidad (ítems 2, 4 y 6) obteniendo un promedio de 2,2 y se puede apreciar una bajada en el módulo “Disociación motriz”, en el ítem 34 con un promedio de 3,6 (El niño es capaz de cortar el papel).

Tabla 6. Resultados de la hoja de observación psicomotor

Los niños alcanzan excelentes resultados físicos motores y afectivos relacionales, en los módulos de ejecución motriz, control tónico- postural, respiratorio, esquema e imagen corporal, control emocional y relaciones sociales, con valoraciones positivas de 5.

Las niñas destacan sobre todo en los aspectos afectivos relacionales y físicos motores, en los mismos ámbitos que los niños, pero en este caso incluyendo el equilibrio, con un mismo resultado de 5.

En cuanto a los menos valorados coinciden con los resultados generales del aula, con los ítems (2, 4, 6, 10 y 34).

A continuación se describen los resultados obtenidos en cada ámbito de los diferentes bloques psicomotrices:

• Físico motor

o Lateralidad

De acuerdo a este dominio, el ítem 1 es el mejor valorado tanto a nivel general como por sexos, alcanzando un promedio de 4,7. El ítem 3 también adquiere importancia, obteniendo de media un 4,5 en general y un 4,9 en niñas, por otro lado a nivel general también destaca el ítem 5 con un mismo promedio de 4,5. Estos ítems hacen referencia al dominio de la mano derecha.

En cuando a los indicadores menos valorados, resaltamos los ítems 2 y 4 a nivel general y sólo en niñas con un promedio de 2, (golpear y chutar con la izquierda), en cambio los niños presentan una baja intensidad en los ítems 4 y 6 con un promedio de 2,4 (lanzar con la mano izquierda).

o Coordinación dinámica

Desde el punto de vista de la coordinación dinámica, a nivel general de la clase se puede apreciar que los ítems mejores valorados son los relacionados con el salto (ítem10), inicio de marcha hacia atrás (ítem 12) y el desplazamiento a ritmo moderado por el espacio (ítem 13), alcanzando un promedio de 5. Sin embargo, el ítem 11 ha obtenido resultados negativos (promedio de 3,3) tanto a nivel general como por sexos, relacionado con el desplazamiento lateral.

Los niños, además de destacar en los ítems 10, 12 y 13, también lo hacen en la acción de saltar con los pies juntos (ítem 9). En las niñas se aprecia buenos resultados en los ítems 10 y 13, pero no tanto en el ítem 9 y 12.

o Equilibrio

En este dominio los resultados son similares, ya que tanto a nivel general como por sexos han alcanzado los mismos resultados. Se puede apreciar que los mejores valorados han sido los ítems 14 y 18, mostrando que el niño es capaz de andar sobre una línea recta y mantener una postura en equilibrio. Aquellos que han presentados resultados algo por debajo pero que tampoco se puede considerar como negativos han sido los ítems 15 y 16 (promedio de 4,7), ya que se trata de mantener el equilibrio sobre una línea curva y sobre un balancín.

o La ejecución motriz, el control tónico-postural y el control respiratorio.

Se puede considerar que en cuanto al dominio de ejecución motriz, control tónico-postural y el control respiratorio del bloque “Físico motor” no existen resultados negativos, ya que han alcanzado un promedio de 5 aproximadamente. Estos resultados se han dado tanto a nivel general de la clase como por sexos.

• Perceptivo motor

o El esquema y la imagen corporal

El conocimiento de la funcionalidad del esquema corporal lo tienen totalmente adquirido, apreciándose valores positivos en los ítems que lo componen con un promedio de 5.

o Disociación motriz

Atendiendo a la disociación motriz que presentan los alumnos del aula, se puede apreciar que son capaces de caminar alternando brazos y piernas correctamente, alcanzando un promedio de 5. Sin embargo, en cuanto a la utilización de las partes del cuerpo de forma aislada, los alumnos presentan mayores dificultades (ítem 34), valorado con un promedio de 3,7 a nivel general del aula y por sexos.

o Coordinación Visio- motriz

Los resultados parecen ser muy parejos, pero presentan algunas diferencias. A nivel general del aula, se puede apreciar que el ítem 40 es el más valorado (es capaz de botar una pelota) y el ítem 36 el menos valorado (es capaz de cortar el papel). Los niños destacan además en los ítems 35 y 37 relacionado con las habilidades motrices finas y el moldeado de papel, pero presenta un ligero valor negativo en los ítem 36 y 39 (lanza la pelota hacia la dirección adecuada). Las niñas, se diferencian en cuanto al menos valorado, resaltando el ítem 35, (controla situaciones en la coordinación de habilidades motrices finas).

o Orientación y estructuración espacial

En cuanto a esta habilidad los resultados han sido de nuevo muy iguales, obteniendo un promedio de 4,8 en ambos ítems (41 y 42) a nivel general y en niños, en cambio en las niñas se puede apreciar una ligera subida en el ítem 42 (promedio de 4,9) y un pequeña bajada en el ítem 41 (4,7).

• Afectivo relacionales

o Control emocional

Los indicadores presentan valoraciones positivas obteniendo de un promedio de 5 aproximadamente, excluyendo el ítem 45 por parte de las niñas y por lo tanto también en general, que se aproxima más al 4,5 de promedio, indicando que muestran dificultades en controlar las manifestaciones desproporcionadas de las emociones.

o Relaciones sociales

En cuanto a este apartado, se ha podido apreciar resultados muy favorecedores, ya que han obtenido todos los indicadores que lo componen una valoración positiva de 5.

Grupo control

El grupo control destaca en los módulos “esquema e imagen corporal” sobre los ítems 28, 29 y 30 con una valoración máxima de 5 puntos, reflejando de este modo su capacidad de reconocer las diferentes partes del cuerpo y sus funciones, por otro lado se aprecia que “la lateralidad” también se ve afectada positivamente en los ítems 3 y 7 con un valor medio de 4,8; siendo éstos correspondidos con el dominio de la mano derecha. Por otro lado, los indicadores valorados de forma negativa hacen referencia a los ítems 6 (2,8p), 2 y 4 (3p) que se corresponden con el dominio de la mano izquierda y la pierna. Además se puede resaltar los ítems 16 y 24, los cuales hacen referencia a los módulos de “el equilibrio” y “el control tónico postural”, ya que presentan una ligera intensidad negativa alcanzando un valor de 3,2.

En cuanto a los niños y niñas del aula, destacan no sólo en los ítems 28, 29 y 30 positivamente, sino que, en el caso de los niños podemos apreciar una intensidad positiva en el indicador 13 de coordinación dinámica, resaltando de este modo su capacidad de correr libremente por el espacio sin ninguna dificultad, por otro lado, el ítem 42 supone una relación con el ítem 13 ya que se ve valorado positivamente haciendo hincapié en la capacidad del niño en realizar la actividad en el espacio destinado a ello, alcanzando ambos una puntuación de 4,7.

Tanto niños como niñas por lo general suelen presentar peores resultados en los módulos de lateralidad (ítems 2, 4 y 6). Los niños además presentan valores negativos en los módulos que se corresponden con el equilibrio (ítem16), control tónico postural (ítems 24) y control respiratorio (27) del ámbito “Físico motor”, siendo valorados con un 3,2.

Las niñas además presentan una valoración positiva de 5 sobre los ítems 3 (dominio de la mano derecha) 51 (respeta las indicaciones del maestro) y 52 (muestra una actitud positiva cuando juega en grupo). En cuanto a los indicadores menos valorados en necesario destacar además los ítems 1 (coge los objetos con las dos manos) y 16 (mantiene el equilibrio sobre el balancín).

• Físico motor

o Lateralidad.

En relación a éste ámbito psicomotor, los alumnos en general tanto en niños como en niñas, presentan resultados positivos oscilando entre el 4,8 de puntaje en los ítems 3, 5 y 7, relacionados con la capacidad de coger, lanzar y golpear con la mano derecha. De este modo, queda valorado negativamente los ítems 6, 2 y 4, relacionados con el dominio de la mano izquierda y siendo el más perjudicado el indicador número 6 relacionado con el lanzamiento de objetos con un promedio de 2,8. Los niños en general, resaltan con una ligera diferencia en el ítem 1 presentando una mayor capacidad de coger los objetos con las dos manos.

o Coordinación dinámica.

El indicador con mayor intensidad positiva tanto en general como en niños y niñas se correlaciona con el ítem 13 con una valoración máxima en niños de 5; de 4,7 en general y de 4,5 en niñas, apreciándose la facilidad que el niño presenta para distribuirse libremente por el espacio corriendo. El resto de los ítems tienen unos resultados muy parejos oscilando entre el 3,8 y 4 de puntaje, presentando una ligera negatividad en el género femenino con el ítem 8 presentando un promedio de 3,6; que hace referencia a la capacidad de rodar sobre una superficie.

o Equilibrio.

En general los indicadores mejores valores han sido el número 14 y 18 con una puntuación de 4 aproximadamente, que hacen referencia a la capacidad del niño para mantenerse en equilibrio sobre una línea recta y un banco sueco. Presentando los mismos resultados positivos en niños y niñas con el indicador 18; aunque sí que podemos observar en la gráfica del apartado Anexo 10.5; que los niños presentan unos resultados muy iguales en los ítems 14, 15 y 17. El indicador más perjudicado a nivel general y en sexos ha sido el ítem 16 con una promedio de 3,3; éste indicador refleja que el niño debe mantener el equilibrio sobre un balancín.

o La ejecución motriz.

Atendiendo a la ejecución motriz, encontramos en común los resultados generales del grupo de alumnos con los adquiridos sólo en niños. Con un valor positivo nos encontramos con el ítem 21 con un promedio de 4,7. Éste nos indica que el niño es capaz de realizar sencillos circuitos de obstáculos de manera correcta. En niñas también resalta entre uno de los mejores valorados ya que le supera como mejor valorado el ítem 19, dándonos a conocer la autonomía de las niñas de utilizar correctamente los materiales durante las clases de Educación Física. En cuanto a los menos valorados resalta el ítem 20 (4 p), el niño es capaz de saltar objetos.

o Control tónico-postural.

En cuanto al control tónico-postural, se aprecian unos resultados muy parejos tanto a nivel general de la clase como por sexos. Ésta negatividad repercute sobre el ítem 24 con un promedio de 3,2 (general); 3,3 (niños) y 3,5 (niñas), el indicador es de especial importancia, ya que hace referencia a uno de los errores más habituales de la población, se corresponde con el hábito de agacharse con la espalda recta. En cuanto a aquellos que presentan una intensidad positiva coincide los resultados de la clase en general (4,7p) con los obtenidos sólo en niñas (4,5p), se trata del ítem 22, resaltando de este modo la capacidad que tienen los alumnos para desplazarse siguiendo el ritmo marcado, por otro lado, los niños resaltan en el ítem 23 con un puntaje de 4,9 (corre y es capaz de detenerse ante la señal).

o El control respiratorio.

De acuerdo al control respiratorio, se puede apreciar que son muy dispares, ya que en términos generales de la clase, se obtiene una valoración positiva con un 3,9 de promedio en los indicadores 25 y 26, que nos indica que el niño es capaza de mantener el aire y de inspirar correctamente durante un periodo de tiempo. En cambio, en cuanto al acto de espirar se demuestra lo contrario con un 3,6 de promedio. Los niños resaltan en las mismas capacidades anteriormente mencionadas, con un promedio de 4; pero muestran dificultades ante el acto de espiración (3,3 de puntaje). Por otro lado, las niñas al contrario de los niños, resaltan en la capacidad de expulsar el aire con un promedio de 4, mientras que presentan un valor negativo en la inspiración (3,7).

• Perceptivo motores

o El esquema y la imagen corporal.

En éste módulo, los resultados han coincidido tanto en términos generales como por sexos, obteniendo con un valor de 5 en los ítems 28, 29 y 30; siendo el niño capaz de reconocer sus partes del cuerpo, así como sus funciones y distinguir su propia imagen corporal. En cambio, con un puntaje de 4,7, una décima por encima en niños y una décima por debajo en niñas, se corresponde con el ítem 31; Imita movimientos realizados por el profesor o compañeros.

o La disociación motriz.

Desde el punto de vista de la disociación motriz, los ítems mejores valorados han sido el 34, coincidiendo su resultado a nivel general de la clase y en los niños con un promedio de 4,3; en cambio en las niñas el promedio es algo superior, alcanzando el 4,5. Éste ítem hace referencia la capacidad de utilizar las partes del cuerpo de forma aislada.

o La coordinación Visio-motriz.

En cuanto a la coordinación Visio-motriz, los resultados han resultado ser algo más desiguales. A nivel general, el ítem 36, ha sido el más positivo con un promedio de 4,6 y los ítems 35 y 40, con un promedio de 4,5. Por lo que se refleja claramente cómo los niños dominan el corte de papel y la coordinación motriz fina, además de ser capaz de botar la pelota. Mientras que el menos valorado a nivel general, es el ítem 38 (alcanza objetos en el aire con las dos manos) con un puntaje de 3,9. Los niños del aula destacan en botar la pelota (4,7) y en cortar y moldear el papel (4,6), es decir, en los ítems 40, 36 y 37. En cambio presenta valores negativos en el mismo ítem que a nivel general, en el número 38 con un promedio de 4. Las niñas alcanzan mejores resultados en los ítems 35 y 36, ambos con un promedio de 4,6. Reflejan su capacidad de coordinar en las diferentes situaciones que se requiere las habilidades motrices finas y en cortar el papel. Por otro lado, además de presentar resultados negativos en el ítem 38, también se puede apreciar con un mismo resultado de 3,9 en el ítem 37, en la capacidad de moldear el papel.

o La orientación y estructuración espacial.

De acuerdo a éste módulo, se pueden apreciar claros resultados, alcanzando los valores positivos el ítem 42 con un 4,8 de promedio (el niño sabe situarse con respeto a un determinado objeto); y viéndose afectado negativamente el ítem 41 cuyos promedios han sido: 4,4 a nivel general; 4,2 niños y 4,6 niñas (el niño realiza la actividad en el espacio destinado a ello).

• Afectivo relacionales

o Control emocional.

En relación a este dominio de las emociones, apreciamos que se dan con mayor intensidad a nivel general y en niños el ítem 48 con un promedio de 4,7; de este modo se observa la preocupación que el niño muestra hacia los compañeros que precisan ayuda para realizar las tareas. Se trata de una de las rutinas que se podían observar cada día dentro del aula durante la elaboración de las fichas. Sin embargo, la expresión de las emociones y sentimientos se ven valoradas con menor intensidad, (ítem 44), con un 4 de promedio. Las niñas resaltan más en aspectos como en el control de las manifestaciones desproporcionadas de las emociones y en saber expresarse correctamente en las diferentes situaciones. Se puede apreciar los ítems 43 y 35 con un promedio de 4,5. A pesar de ello, las niñas también decaen en la expresión de sus emociones y sentimientos en general (ítem 44) con un 4,4 de promedio, además de mostrarse más inseguras que los niños en actividades que son capaz de realizar (ítem 46).

o Relaciones sociales.

Desde el punto de vista de las relaciones sociales, muestran un buen compañerismo entre ellos, no solo preocupándose por su tarea sino, en compartir el material del aula (ítem 50). Se puede apreciar con un valor de 4,7. De forma negativa, podemos apreciar en los ítems 49 y 52, una ligera bajada de intensidad que se coloca entre los menos valorados con un puntaje de 4,4. Estos ítems hacen referencia al cumplimiento de las normas del aula y la actitud que muestran durante el juego. Los resultados de los niños del aula coinciden con los ítems tanto con el mejor valorado, como en el que menos, siendo éste último con una peor puntuación de 4,1. Sin embargo, las niñas muestran respetar las indicaciones del maestro y tener una actitud positiva durante el juego en grupo (ítems 51 y 52), con un puntaje de 4,9. Aunque al igual que los niños, siguen sin respetar las normas de clase para relacionarse con los demás (4,6 p).

En definitiva, el grupo experimental presenta mejores resultados con respecto al grupo control, destacando en el ámbito perceptivo motor (niños = 4,8 y niñas = 4,7) y afectivo relacional alcanzando una media de 5. Mientras que el grupo control no llega a alcanzar el 4,5.

Perfil psicomotor (De la Cruz & Maizara, 2003)

Grupo experimental

Como se aprecia en la tabla 7, se han obtenido resultados muy positivos, resaltando en el dominio de la locomoción, en coordinación de brazos y piernas y conocimiento del esquema corporal en sí mismo. Los niños, por lo general, son capaces de realizar las tareas cotidianas del aula sin ninguna dificultad, ya que han destacado en los ítems 1, 24, 28 y 34 con un promedio total de 2. Sin embargo, muestran peores destrezas en aspectos relacionados con la confianza en sí mismo, más concretamente en ejercicios de equilibrio y coordinación de piernas, y en saltos de 40 cm de altura (ítems, 17, 15 y 16) alcanzando solamente un 0,8 (15 y 16) y 0,6 (17).

Tabla 7. Resultados del perfil psicomotor

Los niños en general, destacan en ejercicios de locomoción (ítems 1, 5 y 7), de posición (ítem 10), de coordinación de brazos y manos (ítems 24 y 28) y en el esquema corporal en sí mismo (ítem 34); adquiriendo resultados máximos de 2 en estos apartados. Por otro lado, se aprecian valores negativos en equilibrio (0,8 de promedio) y salto de 40 cm (0,6).

Las niñas, destacan en ejercicios relacionados con el conocimiento de su esquema corporal (ítems 33, 34 y 35) además de adquirir resultados positivos en otros aspectos como en coordinación de brazos y manos y en locomoción (promedio 2). Al igual que los niños muestran dificultades en ejercicios de equilibrio (0,75 promedio) y salto de 40 cm de altura (0,25) pero con resultados más negativos.

• Locomoción. En lo referente a la locomoción los niños muestran niveles altos en los ítems 1, 5 y 7, tanto en términos generales como por sexos, estos ítems hacen referencia a caminar hacia atrás, en línea recta y en subir escaleras, alcanzando un puntaje de 2. Sin embargo, presentan valores bajos en el ítem 4, coincidiendo de nuevo, pero con diferentes resultados negativos, siendo el menos valorado por las niñas con un nivel medio de 1,2 (caminar de puntillas).

• Posiciones. En cuanto al dominio posicional de una actividad, los indicadores mejores valorados han sido los ítems 10, de forma general y por sexos; indica que el niño es capaz de sentarse con las piernas cruzadas. Tanto a nivel general como los niños del aula, han alcanzado un promedio de 2, mientras que las niñas obtienen un 1,75 coincidiendo además con el ítem9; se mantiene en rodillas. Sin embargo, aquel que ha obtenido el peor resultado, ha sido el ítem 11, (1,3) el cual indica que el niño muestra dificultades en mantenerse sobre el pie derecho.

• Equilibrio. Atendiendo al equilibrio, en general tanto niñas como niños, los ítems mejores valorados han sido el 13 con un promedio de 1,3 y las niñas además presentan un mismo resultado de 1,25 con el ítem 14, por lo que muestran un buen nivel en mantenerse e ir alternando pasos sobre una tabla. En cuanto a los que presentan un intensidad más baja son los relacionados con el ítem 15 que presenta un promedio de 0,8 (anda sobre una tabla, adelante y atrás).

• Coordinación de piernas. En relación a este dominio, los resultados del ítem 19 sobresalen entre el resto, siendo el más valorado en ambos sexos, las niños además resaltan en el ítem 18 coincidiendo el puntaje de 1,6. En aquellos saltos superiores a 25 cm, los alumnos han mostrado peores resultados, siendo el indicador menos valorado en general y por sexos.

• Coordinación de brazos. De acuerdo a la coordinación de brazos, los alumnos en general y de acuerdo a los resultados obtenidos en ambos sexos, la acción de coger la pelota con las dos manos ha sido la mejor valorada, alcanzando el puntaje de 2. Mientras que, en cuanto a los menos valorados nos encontramos con dos ítems (23 y 26), en general, han sido valorados con un 1,4. El ítem 26 ha sido el peor valorado por parte de los niños (1,5), mostrando dificultad en botar la pelota más de 4 veces, mientras que en las niñas, se puede apreciar entre sus peores destrezas en cuanto al lanzamiento de pelota a un metro (1,25).

• Coordinación de manos. En este dominio, la acción que sobresale del resto es la capacidad de cortar el papel con tijeras (ítem 28) alcanzando un promedio de 2. Este resultado es obtenido en ambos sexos y por lo tanto de forma general. Sin embargo, aunque también coincide el ítem menos valorado (31), con un puntaje de 1,4 y 1,6 en niñas, estas además presentan un nivel medio en la habilidad de atornillar una rosca (ítem 31).

• Esquema corporal en sí mismo. En lo referente con el esquema corporal en sí mismo, los alumnos del aula, presentan claros resultados, siendo aquellos como valorados positivamente los ítems (33, 34 y 35), con una puntuación máxima de 2, reflejando sus capacidades de conocer y mostrar manos y piernas. En cambio, con una intensidad negativa se aprecia el ítem 37, en la cual los alumnos deben de ser capaces de tocar la rodilla derecha con la mano izquierda.

• Esquema corporal en otros. Los resultados en general, tanto en niños como en niñas son muy parejos, obteniendo casi los mismos resultados. Los más valorados han sido los ítems 39 y 40 con un promedio de 2; mientras que el peor valorado ha sido el ítem 38, con un promedio de 1,4 aproximadamente, pero presentando un ligero ascenso en niñas con un 1,75.

Grupo control

• Locomoción. En locomoción los niños del aula de 5 años A destacan en el ítem 7 (1,9), mostrando que caminan sin dificultad y suben escaleras alternando pies, en cambio presentan resultados negativos en el ítem 6, corre alternando movimientos, alcanzando una media 1,63.

• Posiciones. En cuanto a las posiciones, adquieren mejores valoraciones en los ítems 8 y 9 alcanzando una media de 1,6 (se mantiene en cuclillas y en rodillas), mientras que presentan resultados negativos en los ítem 10 y 11 (1,2); se sienta con las piernas cruzadas.

• Equilibrio. En este apartado se pueden observar resultados muy equilibrados con aproximaciones al 1, por lo que han adquirido en general valores medios, presentando una ligera subida en el ítem 13 (1,6), son capaces de mantenerse en la tabla, sobre todo las niñas, con un promedio de 1,4.

• Coordinación de piernas. Resaltan a nivel general y sobre todo las niñas con una media de 1,4 en saltar 10 veces con ritmo, sin embargo, se puede observar valoraciones negativas en los tres primeros ítems (17, 18 y 19) relacionado con el salto desde diferentes alturas.

• Coordinación de brazos. Presentan valores positivos en el ítem 24, coge la pelota con las dos manos, alcanzando la máxima puntuación de 2. En cuanto al peor valorado, destacamos el ítem 26 (1,3), que hace referencia a que bota la pelota más de cuatro veces.

• Coordinación de manos. Los ítems 28 y 29 son los más valorados alcanzado el puntaje de 2 (corta el papel con tijeras y siguiendo una línea recta). El ítem 31 es el peor valorado (1,2), puede atornillar una rosca.

• Esquema corporal en sí mismo. Destacan por saber mostrar la mano derecha e izquierda con una media de 2 en general. Sin embargo, muestran dificultades en tocar la rodilla derecha con la mano izquierda, ítem 37 (1), resaltando negativamente las niñas respecto a niños.

• Esquema corporal en otros. El ítem 40 es el más valorado (2), en dibujo señala pie izquierdo, a nivel general. Sin embargo, señalar codo en dibujo les parece más complicado presentado la valoración más baja en el ítem 38 (1,6).

En definitiva, el grupo experimental sigue destacando por encima del grupo control, adquiriendo resultados positivos en todos los ámbitos psicomotores, pero sobre todo se puede observar una ligera diferencia en cuanto a posición (1,7 aproximadamente) y en el esquema corporal en sí mismo (1,8), en cambio, el grupo A alcanza el 1,4 en posición y el 1,7 en esquema corporal en sí mismo.

Escala de habilidades sociales (Lacuza, Castro & Contini, 2009)

Grupo experimental

En la tabla 8 se puede apreciar que las relaciones con los adultos presentan una mayor intensidad positiva sobre las relaciones con otros niños, siendo el ítem 16 el mejor valorado con un puntaje general de 2, en cambio los ítems 3,4 y 6 que se corresponden con las relaciones hacia otros niños, se muestran los menos valorados cuyos resultados se encuentran entre el 1,2 y 1,5 de promedio.

Tabla 8. Resultados de la escala de habilidades sociales

En cuanto al género, los niños presentan resultados más favorecedores en cuanto al dominio de acción motriz y relación con otros niños y adultos conocidos. Los ítems 16 y 13 destacan por encima del resto con un puntaje de 1,8 y 2. Aquellos comportamientos menos habituales hacen referencia al inicio de una acción (1,2) o conversación con otros niños (1,5), que se corresponden con los ítems 3 y 10.

Las niñas resaltan en las relaciones afectivas y emocionales con adultos y otros niños, alcanzando el puntaje de 2 en los ítems 2, 14 y 16, se puede observar una ligera bajada en los ítems 1 y 15 con una valoración de 1,8. En cambio presentan resultados negativos en los ítems 3, 4 y 6 al igual que los niños.

Un aspecto a tener en cuenta es la persona que ha respondido la encuesta del alumno (padre o madre). He de destacar que la mayoría han sido cumplimentadas por las madres consiguiendo respuestas de diferente grado, en cambio las cumplimentadas por padres han sido menos objetivos basándose la mayoría en la opción de respuesta “Algunas veces”.

Grupo control

Las habilidades sociales de la clase de 5 años A, presenta una valoración positiva sobre los ítems 1 y 16, siendo el ítem 1 el más valorado por parte de los niñas, indicándonos que las niñas sonríen más a otras personas cuando es oportuno; los niños en cambio prefieren mantener una conversación sencilla con un adulto (ítem 16), ambos alcanzado el promedio de 2. Sin embargo, en lo que respecta de intensidad más baja, son los ítems 5, 4 y 6 a nivel general de la clase, con un promedio de 1,2 (5) y 1,3 (4 y 6), estos hacen referencia a conductas como: mostrar conductas de cortesía, hacer “pequeños favores”, y unirse al juego con otros niños. Los niños obtienen peores puntuaciones en los ítems 6, 4 y 11, con un promedio de 1,3; por lo que no es habitual en ellos, acercarse a otros niños que no conoce y saludar cordialmente cuando abandona un juego. En las niñas es menos frecuente utilizar frases de cortesía (ítem 5) con un promedio de 1,18; presentarse espontáneamente a otros niños y adultos (ítem 3) y hacer pequeños favores (ítem 4), ambos con un promedio de 1,36.

En definitiva, podemos observar que los alumnos del grupo experimental han adquirido mejores resultados en comparación con el grupo control, destacando en los ítems 13, 14 y 16, relacionados con la participación en las actividades propuestas y las relaciones con adultos mostrando cercanía y amabilidad. Sin embargo, el grupo A, sólo destaca en el ítem 16.

Discusión

Teniendo en cuenta las recomendaciones de los diferentes autores mencionados en la introducción, se ha podido comprobar que el progreso y los resultados obtenidos con el programa de juegos cooperativos implementado con esta muestra ha sido el correcto, ya que se han alcanzado los objetivos propuestos.

La interacción social era un punto fuerte en esta intervención, formaba parte de uno de los objetivos a alcanzar y se ha podido comprobar cómo nuestro alumnado ha llegado a él. De acuerdo con Velázquez (2012), para cooperar es necesaria la existencia de una interacción social positiva, actuando así en la zona de desarrollo próximo de Vigotsky, fomentando un aprendizaje significativo. La cooperación es una fuente de transmisión de valores inigualable. Se ha podido comprobar en las clases de Educación Física como los alumnos y alumnas apoyadas con este tipo de metodología, han llegado a adquirir estos valores de respeto, compañerismo, empatía, etc., por lo que estos factores son relevantes en la escuela como afirma Velázquez (2004).

Del mismo modo que Orlick (1981) en este estudio se ha llevado a cabo el programa de juegos cooperativos planteado, ya que el grupo control en lugar de estar sometidos a juegos tradicionales, el maestro de Educación Física del aula basaba sus clases en juegos de captura y circuitos para trabajar las habilidades motrices. Es por ello que los resultados han presentado valoraciones positivas en cuanto al desarrollo psicomotor en el grupo control, pero sin poder apreciar mejorías en cuanto a las habilidades sociales en las que los niños no utilizaban frases de cortesía, ni hacían favores, además de mostrar dificultad en iniciar una conversación con otros niños o en intervenir en un juego ya iniciado por otros. Sin embargo, tras observar a los niños del grupo experimental en las clases de Educación Física antes de la intervención, se puede apreciar que apenas trabajaban la cooperación en clase, siendo la mayoría de los juegos individuales. Esto hizo que la propuesta didáctica consiguiera finalmente resultados positivos. Los niños pasaron de actuar de forma individual en el juego, de sufrir arrebatos ante el sentimiento de derrota, y de ser competitivos entre ellos, a preocuparse por sus compañeros, ayudarles durante el juego y a dialogar entre el grupo o equipo de juego para conseguir el objetivo de la actividad. El grupo experimental destaca por tener un buen desarrollo psicomotor en cuanto a la coordinación y esquema corporal aunque con algunas dificultades en cuanto a los ejercicios de equilibrio. Esto mismo lo demostraba Orlick en uno de sus estudios posteriores, en colaboración con Mender, Kerr y Orlick (1982), ya que trató de evaluar la influencia de los juegos cooperativos tanto en las cualidades motrices como en la conducta prosocial de cooperación de un grupo de 19 niños de 7 años. El grupo experimental mostró ser mejor que el grupo control en cuanto a coordinación dinámica general e incrementó las interacciones cooperativas dentro del grupo de iguales.

Además de los juegos cooperativos, Pujolás (2001) explica que el aprendizaje cooperativo también propicia un clima de respeto, asegurando condiciones de motivación y autoestima y así poder aprender. Esta motivación es la que en las clases de Educación Física se ha podido observar, y por la cual las niñas que solían mantener un rol pasivo, optaron por ser partícipes y protagonistas de la actividad.

Conclusión

En función de los objetivos propuestos para este estudio se concluye que los juegos cooperativos han influido positivamente en el grupo experimental, ya que han perfeccionado las relaciones afectivas y emocionales con el resto de compañeros y adultos. En cuanto a nivel psicomotor han mejorado en los dominios de ejecución motriz, control tónico postural, esquema e imagen corporal en sí mismo, coordinación de brazos y piernas y en las relaciones sociales. Y en segundo lugar, la propuesta aquí diseñada y desarrollada resulta efectiva para mejorar los aspectos ya mencionados a través del aprendizaje y los juegos cooperativos.

Finalmente, se hace necesario mencionar que esta investigación puede suponer la apertura de nuevas líneas de investigación en otros TFG, TFM o tesis doctorales en diferentes universidades como la abierta por algunos profesores como el profesor Pedro Gil Madrona, coautor del trabajo, en el Departamento de Didáctica de la Expresión Musical, Plástica y Corporal de la UCLM- sobre la que asentar futuros estudios como el que aquí se presenta.

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ANEXO 1: EJEMPLO DE CLASE

INTRODUCCIÓN

Durante la siguiente clase los niños y niñas emprenderán un viaje cargado de imaginación y descubrimientos a partir de las actividades que se han programado. Cada actividad les va a guiar hacia una situación cuya finalidad está enfocada hacia la adquisición de hábitos de cooperación y disfrute mediante el trabajo en equipo. A su vez, cada grupo conseguirá una pieza de puzle con una palabra integrada.

ACTIVIDADES

• Momento inicial:

1. Hora de partir

¨ Objetivos:

- Mejorar el desplazamiento en un espacio limitado a través del desarrollo motor.

- Trabajar la velocidad de reacción y la atención

¨ Edad: 5 años

¨ Tiempo: 5 min.

¨ Organización del grupo: Toda la clase

¨ Material: Conos, aros y balones

¨ Desarrollo: La actividad consiste en que los niños irán desplazándose por todo el espacio al ritmo que va marcando el maestro y siguiendo sus indicaciones (tocar el suelo y saltar, alternando brazo, dar zancadas…) cuando éste pare, tendrán que ir en busca del material relacionado con uno de los objetos que todo aventurero necesita para sus viajes:

- Conos = Prismáticos

- Aros= Brújula

- Cuerdas= Pasaporte

- Balones= mochila

Esta actividad servirá para agrupar a los alumnos dependiendo del material que hayan cogido durante la actividad. Los grupos formados serán los definitivos para realizar los siguientes juegos cooperativos.

2. Pasajeros al tren:

¨  Objetivos:

- Fomentar la capacidad de organización y colaboración del grupo para conseguir llegar a la meta

- Trabajar y mejorar la cooperación

¨  Edad: 5 años

¨  Tiempo: 5 min.

¨  Organización del grupo: Tres grupos de 6 personas

¨  Material: Aros

¨  Desarrollo: Los grupos se colocarán en filas. Todos los componentes de la fila estarán colocados dentro de un aro, excepto el último de ellos que tendrá en su mano otro aro, el cual pasará al jugador que se encuentre delante de él en la hilera, lo mismo hará el jugador con el compañero que tiene delante. Deberán así avanzar siempre pasando el aro sobrante hacia delante y cuando éste llegue al comienzo de la hilera, el primero lo colocará en el piso; así todos estarán en condiciones de dar un paso hacia delante. Tendrán que lograr cruzar un espacio determinado.

¨  Normas: el jugador no podrá avanzar hasta que tenga libre el siguiente aro, que deberá estar bien colocado en el suelo para poder avanzar.

• Momento de juego activo

3. Piratas en el atlántico

¨  Objetivos:

- Desarrollar la velocidad de reacción y elaboración de estrategias para la consecución de un fin.

- Mejorar la seguridad en sí mismo y la confianza en sus compañeros a través del lanzamiento del objeto a diferentes distancias.

¨  Edad: 5 años

¨ Tiempo: 10 min.

¨  Organización del grupo: Dos grupos de 8-10 personas

¨  Material: Pelota pequeña y aros

¨  Desarrollo: La clase queda agrupada en dos grupos. El maestro se encargará de esconder una pelota (el tesoro), a su señal, los dos grupos saldrán en busca del “tesoro perdido”, el primero que lo encuentre tendrá que lanzar la pelota rápidamente a uno de sus compañeros. Los miembros del mismo equipo tendrán que ir lanzando la pelota entre unos y otros con el fin de conseguir salvar el tesoro llevándola hasta el barco (el punto de salida), antes de que uno de sus contrincantes se haga con ella e intente también hacerse con el tesoro.

¨  Normas: La pelota debe pasar por cada uno de los miembros del equipo y ser lanzada con la mano.

4. Los tiburones de California

¨  Objetivos:

- Mejorar las relaciones afectivas con el grupo

- Fomentar la convivencia y la cooperación

- Desarrollar la capacidad de desplazamiento, coordinando las acciones con las del compañero

¨  Edad: 5 años

¨  Tiempo: 7 min.

¨  Organización del grupo: Grupos de tres personas

¨  Material: Aros

¨  Desarrollo: Se reparten aros por la pista, un aro menos que el número de grupos que haya. El suelo de la pista será agua marina, y los aros, pequeños islotes de tierra. Organizados en grupos de 4 personas, los alumnos correrán por el espacio moviendo los brazos como si fueran nadadores. Al grito de ¡Tiburón!, cada grupo correrá a colocarse dentro de un aro para quedar a salvo. El grupo que se quede sin aro, es comido por el tiburón.

¨  Variantes: el mismo grupo que se quede sin aro, será el que reanude el juego gritando de nuevo ¡Tiburón!

5. Circuito por parejas

¨  Objetivo:

- Desarrollar la velocidad, agilidad y seguridad en sí mismo mostrando actitudes positivas con los compañeros.

¨  Edad: 5 años

¨  Tiempo: 8min.

¨  Organización del grupo: Dos grupos de 8-10 personas

¨  Material: Balón, bancos sueco, cuerdas y aros

¨  Desarrollo: Los alumnos tendrán que recorrer un circuito por parejas, coger la pieza de puzle que habrá al finalizar el circuito y volver rápidamente al punto de salida. Hasta que no hayan vuelo la primera pareja, no podrán salir los siguientes. El circuito a recorrer será el siguiente.

- Pasar en zig-zag

- Cruzar el banco sueco con los pies juntos

- Saltar los aros con los pies juntos

- Pasarse el balón con bote

• Momento de relajación

6. Carnaval de Brasil

¨  Objetivos:

- Valorar el trabajo individual y en equipo basado en la responsabilidad y en la cooperación para lograr un objetivo común.

- Adquirir confianza en sus posibilidades de plantear y resolver conflictos.

- Tener respeto por el pensamiento ajeno y seguridad en la defensa del propio.

¨  Edad: 5 años

¨  Tiempo: 4 min.

¨  Organización del grupo: Toda la clase sentada en círculo. Si el número de alumnos es muy elevado, se podrá hacer dos círculos.

¨  Material: El propio cuerpo y el de los demás

¨  Desarrollo: Uno de los niños empieza el juego realizando una mueca con la cara. Hace como si se quitase una “mascara” y la lanza a un compañero, para que éste imite el gesto. Este niño inventa un nuevo gesto y se lo pasa al compañero.

• Asamblea final

Al finalizar la clase, nos sentaremos en círculo para comentar las actividades: cómo les ha parecido, si les ha gustado, resolver conflictos etc. Además los alumnos tendrán que presentar el puzles para saber si han sabido resolver el mensaje final correctamente:

“Yo hago lo tú no puedes, y tú haces lo que yo no puedo. Juntos podemos hacer grandes cosas”.