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Comunidad y Salud
versión impresa ISSN 1690-3293
Comunidad y Salud vol.12 no.2 supl.Supl Maracay dic. 2014
Transdisciplinariedad y transectorialidad en el abordaje de los problemas sociales desde el enfoque de Ecosalud.
Transdisciplinarity and transectoriality in the approach of social problems from the Ecohealth approach.
Iris Terán1
1 Unidad de Investigación y Estudios en Salud Pública. Facultad de Ciencias de la Salud-Sede Aragua. Universidad de Carabobo. Correspondencia: ieteran@gmail.com
ABSTRACT
A theoretical-conceptual and hermeneutics revision of Ecohealth praxis was made in order to specify the transdiciplinarity and transectoriality contributions as approximation strategies to the complex social facts. Concluding that we achieved the characterization and contextualization of every local fact through the transdiciplinary analysis. At the time the search for a new method to tackle this different realities , that give answers to specific needs found in this new contextualized transdiciplinar knowledge, which arises from the dialogue between the academic knowledge and the daily knowledge of the life's world that they possess: community, the public officials and decision makers. These two knowledge transcend, content and supera the previous boundered when they are socialized and integrated in a multidimensional way; and therefore, they cannot be translated again into isolated and uncoordinated traditional sectoriales actions, but they require urgently a new horizontal model of public management, into networks, transectorial, which can let collectively design local plans from integrated actions, integral and coordinated, oriented to the prevention and control of VTD, así como the solving of many and complex social problems at a local level.
KEY WORDS: Ecohealth, transdisciplinary analysis, transectorial management.
RESUMEN
Con el propósito de precisar los aportes de la transdisciplinariedad y la transectorialidad como estrategias de aproximación a las complejas realidades sociales se realizó una revisión teórica conceptual y hermenéutica de la praxis en Ecosalud, concluyendo que a través del análisis transdisciplinario, logramos caracterizar y contextualizar cada realidad local. Al mismo tiempo que se transita en la búsqueda de un nuevo método para abordar estas diversas realidades, que dé respuestas a las necesidades específicas encontradas en este nuevo conocimiento transdisciplinar contextualizado, que emerge del dialogo entre el conocimiento académico y el conocimiento cotidiano del mundo de la vida que poseen: la comunidad, los funcionarios públicos y los tomadores de decisiones. Estos dos conocimientos al ser socializados e integrados de una manera multidimensional, trasciende, contiene y supera el conocimento anterior parcelado y por lo tanto, no puede ser traducido de nuevo en tradicionales acciones sectoriales aisladas e incoordinadas, sino que exigen la emergencia de un nuevo modelo de gestión pública horizontal, en redes, transectorial, que permita diseñar colectivamente planes locales de acciones integradas, integrales y coordinadas dirigidas a la prevención y control de las ETVs, así como a la resolución de las múltiples y complejas problemáticas sociales a nivel local.
PALABRAS CLAVE: Ecosalud, análisis transdisciplinario, gestión transectorial.
Recibido: Octubre, 2014 Aprobado: Diciembre, 2014
INTRODUCCIÓN
Las sociedades contemporáneas enfrentan problemas de creciente complejidad, definidos por un sin número de relaciones y variables que no siempre pueden ser interpretadas integralmente.1
El crecimiento demográfico y la migración, los cambios ambientales y la transformación de los paisajes, así como la globalización del comercio y las economías, han transformado los tipos de desafíos sanitarios que enfrentan las poblaciones de todo el mundo, en este sentido, Bazzani y Wiese2 argumentan:
Las naciones más ricas, de hecho, las personas más ricas de todas las naciones, enfrentan los aumentos constantes de las enfermedades propias de los estilos de vida prósperos y sedentarios: las enfermedades cardiovasculares, la diabetes, el cáncer y la obesidad. A pesar de los considerables avances del desarrollo social y económico en el mundo entero y los notables progresos del saneamiento y del conocimiento y la tecnología médica, muchas enfermedades infecciosas aún constituyen una carga inaceptable para las personas que viven en las regiones en desarrollo. Otra amenaza que se cierne sobre las personas de todo el mundo es el surgimiento de enfermedades infecciosas nuevas, que parecen ir en aumento.
Esta situación exige alcanzar una comprensión más holística e integral de la realidad, que no podría alcanzarse a partir de interpretaciones aisladas de puntos de vista sectoriales o perspectivas disciplinarias reducidas, sino que constituyen ámbitos de investigación y acción complejos y multidimensionales. Se hace necesario, entonces, promover enfoques conceptuales y metodológicos adecuados para dar cuenta de su complejidad.
Los enfoques ecosistémicos para prevenir las enfermedades infecciosas consideran que los factores de riesgo son los factores ecológicos, sociales, culturales, políticos y económicos subyacentes de la dinámica de transmisión. Al igual que otros problemas sanitarios, la ecología y la transmisión de la mayoría de estas enfermedades infecciosas se pueden vincular a la interacción entre varios factores; por ejemplo, los cambios demográficos, la pobreza, la urbanización, la deforestación, los cambios en los modelos de producción agrícola y en la relación entre las personas y los animales, la gestión de los recursos naturales, las diferencias de género y las pautas culturales. Reconociendo que la salud y el bienestar son resultado de las interacciones complejas y dinámicas entre los factores de determinación, las personas, las condiciones sociales, culturales y económicas y los ecosistemas. Teniendo en cuenta además que las condiciones de los ecosistemas también se ven afectadas por un proceso dinámico de interacciones, a menudo debido a las actividades sociales y económicas de las personas.
Es necesario integrar diferentes perspectivas científicas para describir plenamente el comportamiento del sistema. Pero las perspectivas académicas por si solas no resultan suficientes. El conocimiento y las perspectivas de las personas inmersas en la situación y que viven en el ecosistema también son relevantes, como lo son las perspectivas de aquellos que sustentan el poder de la toma de decisiones con respecto a una situación dada. Al involucrar a estas diferentes personas en un proceso de investigación-acción, los resultados de la investigación pueden conducir a cambios en las decisiones, las políticas y prácticas que llevan a mejoras duraderas. En suma, la investigación de ecosalud exige que los académicos trabajen no sólo con expertos de otras especialidades, sino también con los actores.
En el campo académico y científico las ciencias sociales y humanas atraviesan por un momento caracterizado por fuertes debates que reclaman nuevas y mejores estrategias de producción de conocimiento, implicando la búsqueda de otros enfoques de pensamiento social como la complejidad y la transdisciplinariedad.3
El Vínculo Complejidad-Transdisciplinariedad: se refiere en el campo del análisis social, a dos aspectos fundamentales:
1. A las realidades investigadas: que son complejas, dinámicas y multidimensionales.
2. Al esfuerzo intelectual para comprenderlas: que exigen la elaboración de modelos que tomen en cuenta el contexto y las interrelaciones entre sus elementos constituyentes.
Este vínculo ha traído como consecuencia una transformación del pensamiento social, que ha evolucionado desde una perspectiva de la simplicidad a una perspectiva de la complejidad, planteándose una reflexión epistemológica en relación a tres órdenes de relaciones:
1. Sujeto/Objeto.
2. Del Todo/y las partes
3. Noción del tiempo y la historia
Durante los últimos treinta años, se esta dando un reconocimiento creciente acerca de la insuficiencia de los clásicos corpus disciplinarios para dar cuenta de la complejidad del mundo real. Se han producido movimientos integrativos en dos sentidos:
Integración de disciplinas: Más allá de las fronteras límites de departamentos, objetos, teorías y métodos disciplinarios creando la necesidad de entablar diálogos y asociaciones interdisciplinarias
Integración de actores en el proceso del conocimiento: Más allá de las fronteras/límites del ámbito académico.
La necesidad de diálogos y asociaciones con los propios involucrados en los problemas estudiados.
Aparición de nuevas modalidades participativas de producción de conocimientos.
En los planos científico, social y político: estas crisis y reconfiguraciones han generado una nueva conciencia acerca de la importancia de la integración y articulación de actores en los problemas sociales que gira en torno a dos palabras claves: la integración y la participación.
Desde la perspectiva transdisciplinaria, en el abordaje de los problemas sociales, se plantea el establecimiento de un diálogo de saberes entre investigadores, funcionarios y comunidades, para producir un conocimiento pertinente, que logre impactar la toma de decisiones a nivel de las políticas. (Figura 1)
En este sentido debemos diferenciarla de las perspectivas tradicionales de la disciplinariedad o monodisciplinariedad como la denomina Martínez Miguelez,4 quien describe que la investigación, desde esta óptica, enfatiza la comprehensión o profundidad a expensas de la extensión, quedándose dentro del ámbito de una sola disciplina, que además puede llevarse a cabo por uno o varios investigadores que comparten plenamente un determinado paradigma científico: epistemología, métodos, técnicas y procedimientos. Es la más usual y corriente. Este enfoque lleva a aislar demasiado los elementos o las partes y su comportamiento, descuidando los nexos y relaciones que tienen con el todo y con otros "todos". Llegando a su máxima expresión a través de la hiperespecialización.
Este enfoque o perspectiva monodisciplinar se considera como el más incapaz de enfrentar los grandes desafíos que demanda la complejidad de las realidades del mundo actual. En virtud de su lógica reduccionista que ignora la complejidad de las realidades en sus contextos, que el todo se reduce a la suma de sus partes componentes.
El enfoque multidisciplinario por su parte, plantea a diferentes funcionarios o investigadores colaborando en un proyecto común. En este sentido refiere Martínez-Miguelez.5
Los participantes pertenecen a diversas disciplinas y cada uno es básicamente independiente en su trabajo, sintiendo poca o ninguna necesidad de conocer el trabajo de los demás. Ordinariamente, existe un director que ha planificado el proyecto, que ha buscado el equipo y le ha asignado la tarea a cada miembro, que supervisa la marcha, pero sin demasiada injerencia en la lógica de lo que hace cada uno, y que trata de unir el producto final, pero respetando las piezas de cada investigador en su naturaleza y forma disciplinaria. De esta manera, la integración puede consistir en preceder los resultados con una introducción, yuxtaponerlos u ordenarlos de acuerdo a criterios y seguirlos con una serie de conclusiones casi en forma de apéndice. Generalmente, hay también integración de términos y, quizá, de conceptos, para no confundir al lector, pero las verdaderas "explicaciones" se mantienen dentro del ámbito de cada disciplina y la autoría de cada parte es característicamente independiente.
Este enfoque multidisciplinar, a pesar de que busca cierta integración del saber, lo hace parceladamente y si bien, existe un compilador que concatena los resultados que aporta cada disciplina, no establece un verdadero diálogo de saberes entre las disciplinas, sino que cada una aporta su punto de vista para la resolución de una problemática. No se logra que la experiencia reflexiva individualizada de cada investigador o funcionario involucrado, intente trascender los linderos de sus conocimientos o prácticas tradicionalmente instituidas, sino que por el contrario trata de argumentar la validez de sus planteamientos teóricos, sin reflexionar a fondo el limitado impacto de sus resultados e intervenciones en la realidad estudiada.
En la investigación interdisciplinaria también los participantes pertenecen a diferentes disciplinas, pero la integración comienza ya en el mismo proceso, en la formulación del plan de acción y en la especificación de la contribución de cada miembro: cada uno trata de tener en cuenta los procedimientos y trabajo de los otros en vista a una meta común que define la investigación. Por ello, la coordinación, la comunicación, el diálogo y el intercambio son esenciales, para traducir los términos propios, aclarar los lenguajes ambiguos, seguir, aunque sea parcialmente, procedimientos metodológicos similares, y, en general, tratar de compartir algunos de los presupuestos, puntos de vista y lenguajes de los otros. De una manera particular, además de la integración terminológica y conceptual, hay una auténtica integración de resultados 6 ;los aportes y contribuciones de cada uno son revisados, redefinidos y reestructurados teniendo en cuenta a los otros hasta lograr un todo significativo, una integración sistémica, que podría expresarse con un modelo ya existente o de invención propia. En este tipo de investigación la autoría compartida es la norma.
La investigación transdisciplinaria va más allá de ellas, y les añade el hecho de que está constituida por una completa integración teorética y práctica. En ella, los participantes transcienden las propias disciplinas (o las ven sólo como complementarias) logrando crear un nuevo mapa cognitivo común sobre el problema en cuestión, que se concreta en la construcción de un nuevo lenguaje común producto del diálogo de las diferentes disciplinas; es decir, llegan a compartir un marco epistémico amplio y una cierta meta-metodología que les sirven para integrar conceptualmente las diferentes orientaciones de sus análisis: postulados o principios básicos, perspectivas o enfoques, procesos metodológicos, instrumentos conceptuales, etc. Este tipo de investigación, epistemológicamente, corresponde con los planteamientos del pensamiento complejo.
Desde el enfoque ecosistémico para la salud humana (Ecosalud) la investigación transdisciplinaria y la intervención transectorial, se plantean como estrategias fundamentales para concretar las acciones de análisis de la realidad social. Se pretende comprender la realidad, a partir de la concepción de sus relaciones sistémicas a varias escalas y acentúan una gama de interacciones entre diversos actores,que van de lo local a lo global, revelando, a partir de su puesta en marcha transdisciplinaria y participativa, la riqueza de reunir perspectivas múltiples, así como el poder de la colaboración y asociación. De esta manera hace énfasis en valorar y rescatar el trabajo en redes como forma de ampliar el conocimiento y aumentar la capacidad de provocar cambios.
En este sentido Charron7 refiere:
La evolución de ecosalud como campo ha estado marcada por la colaboración y el esfuerzo colectivo. Reunir a diferentes personas y sus contribuciones en pro de una meta compartida es una estrategia ampliamente reconocida para aprovechar la capacidad necesaria para abordar desafíos complejos de la sociedad.
Enmarcar la investigación en una perspectiva sistémica (compleja) exige un enfoque en las interrelaciones entre personas y su entorno; involucramiento con una diversidad de visiones en cuanto a comprender y facilitar el cambio; escrutinio de las fronteras que se establecen alrededor de los sistemas y subsistemas; comprensión del cambio como proceso dinámico; y una sensibilización con respecto a las interacciones y vínculos a través de las escalas (sociales, geográficas y temporales). La investigación y acción innovadora resultante atraviesa las fronteras disciplinarias e integra diferentes formas de conocimiento, involucra a actores múltiples con diferentes intereses, necesidades y contribuciones potenciales, y aborda el cambio como un emprendimiento colaborativo, adaptativo y orientado al aprendizaje.
El principio de la Transdisciplinariedad depende de la integración del conocimiento, con nuevo conocimiento que surge a través de la síntesis de saberes de diferentes participantes (saberes disciplinarios, de experiencia, tácitos). Donde, como y en qué medida se involucran los actores influyen en estos procesos. Según el Centro Internacional de Recherches et Études Transdisciplinaires (CIRET)3 "La transdisciplinariedad no es una nueva disciplina, una herramienta teórica, o una super-disciplina. Es la ciencia y el arte de descubrir puentes entre diferentes objetos y áreas de conocimiento." Esta toma en cuenta el flujo de información circulando entre varias ramas de conocimiento. La principal tarea es la elaboración de un nuevo lenguaje, de una nueva lógica, y de nuevos conceptos que permitan un diálogo genuino entre diferentes dominios. Mientras que el principio de participación de actores múltiples aborda los procesos de creación de relaciones y la negociación de roles y responsabilidades explícitos para la acción. (Transectorialidad).
El enfoque ecosistémico para la salud amplía el espectro de la investigación más allá de la evaluación de la exposición y estudios epidemiológicos. Los métodos transdisciplinarios y participativos permiten a los equipos de investigadores, comunidades, funcionarios públicos y tomadores de decisiones hacer una aproximación colectiva a las realidades multidimensionales y desde allí concertar el diseño de estrategias transectoriales integrales e integradas de intervención que logren impactar efectivamente en las diferentes realidades desde una perspectiva sistémica y bioecosocial. De esta manera, busca dar respuesta a la crítica que desde el pensamiento complejo se le hace a la forma cartesiana de obtener el conocimiento moderno, al proponer un nuevo enfoque para lograr un conocimiento más integrado de la compleja realidad social. En este sentido Morin,8 expresa:
Necesitamos un conocimiento cuya explicación no sea mutilación y cuya acción no sea manipulación. Hoy en día, en que lo más oscuro de la evolución humana actúa so capa de ciencia, en que lo más irracional se agazapa tras la cobertura de la razón, lo importante es plantear el problema de un método nuevo.
Esta reflexión del autor nos invita a trascender más allá del pensamiento disciplinar reduccionista cartesiano hegemónico y a buscar nuevos métodos que nos permitan comprender multidimensionalmente las complejas y multidiversas realidades sociales; es decir, a través del análisis transdisciplinario, logramos caracterizar y contextualizar cada realidad local. Al mismo tiempo que se transita en la búsqueda de un nuevo método para abordar estas diversas realidades, que de respuestas a las necesidades específicas encontradas en este nuevo conocimiento transdisciplinar contextualizado, que emerge del dialogo entre el conocimiento académico y el conocimiento cotidiano del mundo de la vida que poseen: la comunidad, los funcionarios públicos y los tomadores de decisiones. Estos dos conocimientos al ser socializado e integrado de una manera multidimensional, trasciende, contiene y supera el conocimento anterior parcelado y por lo tanto, no puede ser traducido de nuevo en tradicionales acciones sectoriales aisladas e incoordinadas, sino que exigen la emergencia de un nuevo modelo de gestión pública horizontal, en redes, transectorial, que permita diseñar colectivamente planes locales de acciones integradas, integrales y coordinadas dirigidas a la prevención y control de las ETVs, así como a la resolución de las múltiples y complejas problemáticas sociales a nivel local, en un primer momento, pero cuyos resultados y experiencias exitosas, pueden servir a futuro de modelos de escalamiento horizontales y verticales a nivel regional, nacional e internacional.
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
1) Carrizo I., Espina M, Klein J. Transdisciplinariedad y complejidad en el análisis social. Gestión de las Transformaciones Sociales (MOST). UNESCO.2003. http://www.unesco.org/most [ Links ]
2) Bazzani R. y Wiese M. La pobreza, los ecosistemas y las enfermedades transmitidas por vectores. En: Charron D. (Editora). La investigación de Ecosalud en la práctica, aplicaciones innovadoras de un enfoque ecosistémico para la Salud. Plaza y Valdés S.L. Madrid, España 2014. [ Links ]
3) Carrizo L. Pensamiento complejo y transdisciplinariedad. s/f. Disponible: http://www.rsu.uninter.edu.mx/doc/marco-conceptual/persamientocomplejoytransdisciplinaridad.pdf. CIRET-UNESCO, 2000. International transdisciplinary conference. Zurich, Febr 27- Marc. 1, 2000. [ Links ]
4) Martínez Miguélez M. Ciencia y arte en la metodología cualitativa. México: Trillas. 2004. [ Links ]
5) Martínez Miguélez M. Conceptualización de la transdisciplinariedad, Polis, 2007(16). En línea. Consultado el 07 noviembre 2013. Disponible: http://polis.revues.org/4623; DOI: 10.4000/polis. 4623 [ Links ]
6) Meelt L.R. Interdisciplinary Studies: a matter definition. En: Martínez Miguelez M. Conceptualización de las transdisciplinariedad. Revista Polis, 2007 (16). En línea. Disponible en: http://polisreviews.org/4623; doi: 10.4000/polis.4623 [ Links ]
7) Charron D. (Editora). La investigación de ecosalud en la práctica. Aplicaciones innovadoras de un enfoque ecosistémico para la salud. Plaza y Valdés, S.L. Madrid, España. 2014. [ Links ]
8) Morin E. El Método III: El Conocimiento del Conocimiento. Madrid: Cátedra, 1988. [ Links ]