Ingrid Nass de Ledo

Editora

Sin lugar a dudas una de las grandes revoluciones sociales que ha traído Internet son las redes que conectan a la gente en todo el planeta. La forma de relacionarse con los demás ha pasado de lo personal a la computadora. Las redes sociales actúan como puntos de encuentro donde es posible acceder a información, compartir impresiones, consultar archivos y recursos disponibles a tiempo real, como es el caso de Facebook, Hi5, Twitter, My Space, etc. Pero aún más útil que tan solo el intercambio de fotos, videos o mensajes, es la creación de otra clase de redes sociales, aquellas que tienen como fin el apoyo y la difusión de diversos temas. Las redes relacionadas con la salud son un experimento que ha resultado un éxito y de gran utilidad para todos. Se trata de páginas en las que los pacientes pueden encontrar información sobre su enfermedad, pero aún más valioso que eso, pueden conocer a otros pacientes con las mismas afecciones, saber de sus experiencias, la evolución de los síntomas y dar y recibir apoyo, intercambiar opiniones y vivencias, reconstituir la confianza social y establecer relaciones de intercambio y reciprocidad. El efecto de las redes sociales es exponencial y las posibilidades no tienen límites. Es sorprendente el número de usuarios que crece cada día y es parte de este nuevo y dinámico mundo. La existencia de los blogs conocidos como una publicación online con historias de una periodicidad muy alta que son presentadas en orden cronológico inverso, es decir, lo último que se ha publicado es lo primero que aparece en la pantalla, ha revolucionado la forma de utilizar Internet; también la creación de comunidades de pacientes, profesionales de la medicina, incluyendo médicos oncólogos, ha creado una blogosfera sanitaria muy amplia con un gran número de seguidores que presta una visión crítica sobre temas de salud. La aparición de la telemedicina en nuestro mundo científico, ha logrado que ahora podamos emitir diagnósticos y tratamientos a distancia utilizando los recursos tecnológicos que junto a las plataformas de redes sociales enfocadas en el tema, logran una mejor educación médica remota, y apoyo en el diagnóstico y tratamiento a través del envío de archivos digitales de utilidad. La telemedicina junto a las redes sociales ahorran tiempo y dinero en la atención sanitaria, sin embargo, hay que recordar que pese a ser útiles, las redes sociales han de ser vistas como un medio y no como un fin a la hora de mejorar la calidad asistencial. En la Sociedad Venezolana de Oncología creamos nuestro perfil en Facebook en enero de este año, con la idea de seguir haciendo nuestra plataforma tecnológica más acorde con la realidad actual y más interactiva con nuestros miembros; la acogida ha sido grande y hoy tenemos alrededor de 263 seguidores y continuamos creciendo. La red de redes ha cambiado la forma de comunicarnos y nos enfrenta a un mundo inconmensurable en información, que debemos conocer y adaptarnos con responsabilidad; las redes sociales en salud han demostrado ser una herramienta útil en la divulgación del conocimiento, y una forma expedita que en muy pocas palabras nos permite decir mucho.