Introducción
El deporte es fuente de acuerdos desde la Antigua Grecia. El ejercicio de una disciplina deportiva acarrea la capacidad intrínseca de unir actores de la sociedad en sentido amplio; ya sea esto a nivel público y privado, la unión de los actores del sistema político se explica por el simple hecho de producir un resultado o influir en el mismo por un propósito ¿Qué pasaría si no tuviese lo último? He allí donde recae el problema.
En el diseño de una política pública, se persigue una finalidad que satisfaga las necesidades colectivas, pero una política deportiva expone los deportes como un sector estratégico en la rama gubernamental, específicamente para la obtención de logros de la nación (influencia) y actividades sociales que generen bienestar en la ciudadanía; sin embargo, se opaca su margen de acción si no se tiene una planeación especializada ni estándar del objeto de la política pública, lo mismo acontece con las distintas federaciones u entes deportivos reconocidos cuando no tienen planificación, formación y experiencia, dígase el caso venezolano como ejemplo (Aguilar y Gómez, 2017).
Cuevas Galicia (2020) expone como errores de fondo la colaboración de los sectores público-privado-deportivo en la obtención de logros y satisfacción de demandas sociales en el mundo digitalizado. Se cuenta con la existencia de eventos nacionales como el Venezuela Game Show (MovilNET_e, 2021) e internacionales como la Copa Colombia Móvil (FEDECOLDE, 2021), pero de poco sirve si se omite la planificación estratégica para la consecución de objetivos, siendo ello de suma importancia junto al intercambio de las Academias nacionales que respalden la teoría para la implantación de la política deseada. En este sentido, Calatayud (2019) ofrece indicadores que garanticen una efectiva política deportiva, lo cual, junto a la teoría del poder blando de Joseph Nye (2004), consolidará la influencia de los deportes electrónicos en Venezuela, los cuales seguirán una ruta de acción al comprender su funcionamiento y formular una estrategia.
Método
Las unidades de análisis yacen en las cuentas de la plataforma social y aplicación Instagram. Según Figuereo Bénitez et al. (2021), en esta se encuentran los temas clave para investigadores académicos en materia de marketing, propaganda y comunicación política. En este sentido, la materia deportiva venezolana anexa los tres elementos desde la teoría del poder blando. Las cuentas de Instagram de América Latina son reconocidas por el Comité Olímpico de la localidad específica o la Federación Internacional de Deportes Electrónicos (IESF en sus siglas en inglés), cuentan con publicaciones desde el 2020-2022, mantienen periodicidad en su cuenta de Instagram y participación en eventos nacionales e internacionales. Los países seleccionados de forma no probabilística fueron Argentina, Brasil, Chile, Colombia, Costa Rica, Ecuador, Honduras, Uruguay, Venezuela, República Dominicana y México, todos de América Latina.
Se utiliza el análisis estadístico descriptivo para otorgar características al fenómeno y definir las federaciones u comités según la subrepresentación de la población; se recolectan los datos a través de una lista de cotejo, cuyos ejes centrales son los indicadores de políticas deportivas (Calatayud, 2019), teoría del poder blando de Joseph Nye (2004) y la participación ciudadana como núcleo de una política pública. El instrumento se valida con cuatro (4) expertos de la Ciencia Política con una confiabilidad de 0.893 según el coeficiente de fiabilidad Alfa de Cronbach para su aplicación. Siendo el nivel de investigación descriptivo, se busca indicar los elementos más resaltantes de las dimensiones modelo de política deportiva, poder blando y deportes electrónicos mediante ochenta y un (81) ítems, distribuidos en sus respectivas subdimensiones e indicadores.
Resultados
Los resultados se recolectaron durante el 10 de octubre de 2023 - 7 de noviembre de 2023. El proceso de recolección se hizo en el lapso de seis (6) semanas para cumplir con el análisis de los indicadores de las organizaciones u federaciones deportivas; sin la presencia de valores perdidos, los resultados más significativos se toman en cuenta para su descripción:
Modelo de política deportiva
Parsons (2007) refiere a que la política pública sigue etapas para su formulación, evaluación e implementación. La política deportiva se considera una subdivisión de la matriz central: Política pública. En este sentido, el modelo de política deportiva que muestra Calatayud (2019) yace en el reconocimiento de una autoridad competente, análisis de contexto, estrategia multinivel, evaluación, control y seguimiento.
En la Figura 1 se observó la posición relativa de las federaciones u organizaciones en competencias internacionales, un elemento característico de su estratégica, con respecto a otros Estados. Entre los sujetos de la muestra, 72,7% mostraron las competiciones en su cuenta de Instagram, en su defecto, 27,3% no lo mostraron en ninguna de las secciones de su perfil de Instagram. La visibilidad de la posición en competencias fue producto de la estrategia de los deportes electrónicos ante los actores públicos-actores privados, tanto a nivel nacional como internacional; se visualizó en la cuenta de la Federación Dominicana de Deportes Electrónicos en la competición organizada por la Federación Internacional de Esports para el videojuego de combate Tekken 7.
La Figura 2 mostró las federaciones u organizaciones que señalan inversiones, tanto públicas como privadas, en los deportes electrónicos. El 90,9%, la mayoría de la muestra, no mencionó inversiones de la materia en su cuenta de Instagram, solamente el 9,1% (una federación) señaló inversiones. La desinversión de los deportes electrónicos fue un problema recurrente en los países estudiados, lo dicho insinuó la inexistencia en las cuentas de Instagram de centros de entrenamiento especializados, transportes, residencia y vinculación con servicios de telecomunicaciones debido a lo mismo. República Dominicana denotó eventos, competencias, ligas deportivas y fichajes de equipos que sugieren las inversiones hacia los deportes electrónicos.
La Figura 3 mostró las federaciones u organizaciones que señalan programas de envío de atletas nacionales al exterior para su capacitación profesional en los deportes electrónicos. El 72,7% no evidenció programas en su cuenta de Instagram, mientras que 27,3% si señaló al menos un (1) programa de envío de atletas nacionales. La formación y protocolo de atletas nacionales, según Calatayud (2019), es fuente de cooperación e intercambio cultural, metodológico y profesional para el progreso de cualquier Estado. Dicha negativa fue signo de la débil influencia de los actores nacionales con respecto al plano internacional, dígase la Asociación de Deportes Electrónicos y Videojuegos de Argentina en 2021 con la Liga PES.
En la Figura 4 se ofreció las federaciones u organizaciones de deportes electrónicos que forman actores deportivos nacionales, dígase atletas, coordinadores o directores en la materia. El 72,7% no formaron actores deportivos que pertenezcan al territorio, únicamente 27,3% ofreció tales oportunidades. Se sugirió una iniciativa similar a la promocionada en la Asociación de Deportes Electrónicos y Videojuegos de Argentina en 2021. La presencia de personal deportivo sin la capacitación necesaria para la planeación, ejecución y control de la política deportiva de los deportes electrónicos, lo cual afecta la dinamización de toda política pública orientada al ámbito deportivo.
En la Figura 5 se contabilizaron las federaciones u organizaciones de deportes electrónicos que interactuaron con usuarios que comentaron en su perfil de Instagram, dígase usuarios a los ciudadanos locales mediante un ‘me gusta’ o ‘responder’. El 81,8% no interactuó con ningún usuario de Instagram, un mínimo del 18,2% ofreció comentarios breves o me gusta, lo último como el caso de los deportes electrónicos brasileños en el sistema nacional de deporte. Se infirió el bajo rendimiento de la estrategia inmersa en la política deportiva producto del poco control, seguimiento y evaluación de la ya dicha.
Teoría del Poder Blando
Nye (2004) argumenta el mismo como la habilidad de atraer o persuadir mediante las instituciones de un país, ya sea en cultura, políticas y valores. Los elementos sine qua non de esta descansan en lugares que sean atractivos a los actores (cultura), en la promoción de valores políticos y en su política exterior. En el campo de la política deportiva, las mismas se entienden bajo la promoción de atletas especializados, como lo argumentan Paipe et al. (2017), y la intervención de redes políticas, dígase las federaciones u organizaciones deportivas.
La Figura 6 mostró las visitas gubernamentales vinculadas a las federaciones u organizaciones de los deportes electrónicos. A pesar de que el 72,7% de las cuentas de Instagram estudiadas tuvo visitas gubernamentales, el 5% de las federaciones u organizaciones careció de dichas visitas. Las visitas gubernamentales denotan los valores políticos e interés turístico como expresiones de persuasión blanda de los deportes electrónicos hacia las instituciones públicas para su consolidación en los deportes especializados, tal fue el caso de la Federación Venezolana de Deportes Electrónicos por miembros del Comité Olímpico Internacional, el organismo por el cual es reconocido desde 2021 (COV TV, 2021).
En la Figura 7 se evidenció cuántas federaciones u organizaciones comparten instituciones públicas en su perfil, ya sea en calidad de aliados o comités adscritos al organismo público deportivo. Aun cuando existieron dos (2) organismos de deportes electrónicos, 18,2%, que compartieron instituciones públicas en su perfil de Instagram; el 81,8% no compartió instituciones públicas. Las federaciones u organizaciones no se vincularon con las instituciones públicas para no incurrir en la politización de los deportes electrónicos, tal como radica en los límites de la teoría del poder blando; no obstante, se ha de recordar que las compañías que velan por los juegos pueden ser mismas federaciones que se vinculan con los comités olímpicos nacionales de los países, dígase el caso de Venezuela, y en estas radica la persuasión como estrategia intrínseca de los intereses gubernamentales.
En la Figura 8 se mostraron los acuerdos de las federaciones u organizaciones de los deportes electrónicos con instituciones privadas. El 72,7% no mostró en su perfil los acuerdos que tengan con instituciones privadas; en contraste, 27,3%, un total de tres (3) organismos de los deportes electrónicos estudiados, mostraron acuerdos en la parte privada, siendo uno el caso hondureño. La tasa inferior de acuerdos señaló una incipiente coordinación de las organizaciones deportivas con el sector privado, a excepción de alianzas estratégicas específicas en la materia.
Deportes Electrónicos
Se consideran deportes electrónicos a toda práctica física y mental de videojuegos en competiciones deportivas donde predomina una interfaz, los cuales requieren un escenario competitivo grande, una comunidad sostenida de jugadores o liga competitiva y una compañía que vele por el balance del juego (Barrera Gómez y Álvarez Restrepo, 2019) (Betancourt-Fajardo et al., 2020).
En la Figura 9 se evidenciaron las federaciones u organizaciones que ofrecen recomendaciones para la salud mental en sus publicaciones de Instagram. 18,2% de las federaciones u organizaciones compartieron al menos una (1) recomendación en sus cuentas para los buenos hábitos de los deportes electrónicos, 81,8% no lo consideró relevante. La carencia de formación de los atletas en la salud mental es un agravante para la planificación de las prácticas deportivas de la comunidad de atletas de la organización, lo cual sugirió la desvinculación de sectores de la salud en ciertas federaciones u organismos por su prejuicio como “competición informal”.
En la Figura 10 se mostraron las federaciones u organizaciones que ofrecen recomendaciones para la salud física en sus publicaciones de Instagram. Aun cuando 36,4% de las federaciones u organizaciones compartieron como mínimo (1) recomendación en sus cuentas, 63,6% tampoco lo consideró relevante. Se desestimó la tesis de Barrera Gómez y Álvarez Restrepo (2019) sobre la importancia de la salud física como subdimensión del deporte a excepción de casos como el de Argentina, lo cual mostró la predominancia del concepto de los deportes electrónicos en el ámbito del entretenimiento y la recreación.
En la Figura 11 se demostró que las federaciones u organizaciones promocionan un equipo oficial de deportes electrónicos. El 81,8% de las unidades de análisis si constaron de un equipo reconocido de deportes electrónicos, aunque 18,2% de la muestra no promocionó ni reconoció un equipo especializado. Se afirmó con esto los conceptos que ofrecen Chanson (2017) y Chiva-Bartoll et al. (2019) sobre la validez de los deportes electrónicos como disciplina deportiva que necesita personas altamente capacitadas, más allá del interés en los videojuegos deportivos, para su funcionamiento como equipo, tal como acontece con la organización chilena de deportes electrónicos.
La Figura 12 evidenció los jugadores habituales en los perfiles de Instagram de las federaciones u organizaciones de deportes electrónicos. 63,6% de los jugadores fueron habituales en los casos de estudio como el mexicano, pero 36,4% no lo fueron. Lo mismo fue un indicativo de la existencia de atletas personalizados como elemento de poder blando de las organizaciones deportivas según la teoría, además de cumplir con los requisitos para ser reconocido como deporte electrónico por la autoridad competente.
La Figura 13 mostró la participación ciudadana en las decisiones referentes a los deportes electrónicos nacionales. En las cuentas de Instagram, 81,8% no mostraron publicaciones sobre la influencia de la ciudadanía en las decisiones sobre deportes electrónicos nacionales y 18,2 (2 federaciones) se aproximó a dicho resultado mediante afiliaciones al comité, encuestas o consultas similares al caso chileno. Sugiere el gráfico que las decisiones solamente pertenecen a una visión elitista y los ciudadanos no tienen una relación directa con los deportes electrónicos nacionales, aparte del interés que se manifiesta en la cuenta de la plataforma social.
Discusión
Los resultados obtenidos en el estudio apoyan la hipótesis en torno a la influencia de los deportes electrónicos determinada por la existencia de la política deportiva. Los datos muestran que existe diferencia significativa entre los postulados de Calatayud (2019) y Nye (2004) en la práctica deportiva venezolana. El efecto sustancial de la política de los organismos de deportes electrónicos no influye en la ciudadanía ni genera participación u impacto social a las necesidades subordinadas a los actores, lo cual se desvincula de los teóricos del diseño de la política pública.
Estos hallazgos respaldan que la autoridad competente de los deportes electrónicos venezolanos debe comprender su contexto y escuchar a la ciudadanía para ejecutar una estrategia, tal como lo plantea la hipótesis de Vargas-Olarte (2018), para promocionar tanto la coordinación de actores como la imagen de cada localidad, fuera de su naturaleza olímpica o de competencia, para el fomento de una gobernanza. Dicha afirmación obedece a lo que Ordoñez-Saavedra et al. (2022) puntualiza en soporte financiero, gobernanza deportiva, práctica deportiva, rendimiento deportivo, facilidades de entrenamiento, formación y preparación de los entrenadores, la competición y el rol de la ciencia en el deporte conjunto al modelo de Calatayud (2019).

Fuente: elaborado por los autores (2024).
Figura 14 Modelo de política pública orientada a los deportes electrónicos venezolanos
La influencia de los deportes electrónicos hacia los venezolanos no se gesta mediante atletas reconocidos ni la intervención de la Federación Venezolana. En consonancia, la negativa que predomina en la esfera pública, esfera privada y visitas gubernamentales es producto de la ineficacia de los actores para posicionarse en la agenda pública, según la hipótesis de Torres Saavedra (2012). Da Cunha Pasqualin et al. (2021) puntualiza la importancia de la comunicación; más allá de la estrategia, es la ejecución de la misma la que asegura la persuasión; no obstante, la capacidad de producir un resultado en la agenda por parte de las federaciones deportivas está sujeto a las amenazas del control informativo, el maquiavelismo de regímenes dictatoriales y las desigualdades metropolitanas (Torres, 2015).
Los deportes electrónicos como disciplina de alto logro flaquean en su profesionalización al desestimar la salud mental y salud física respectivamente en la mayoría de los casos. Toda disciplina deportiva debe equilibrar en su práctica el equilibro mente-cuerpo para generar los mejores resultados en sus atletas especializados (Barrera Gómez y Álvarez Restrepo, 2019). Aunado a ello, la baja participación ciudadana en la federación venezolana desconoce los términos de gobernabilidad y gobernanza que deben estar presentes en la gestión de la política para generar resultados óptimos y estrechar lazos entre la ciudadanía-administración pública local.
Se recomiendan nuevas líneas de investigación que profundicen el papel de la gobernabilidad y gobernanza para la generación de una política pública orientada los deportes electrónicos en las organizaciones deportivas in situ y la conceptualización de lo público de los deportes electrónicos. Esto permitiría detallar los hallazgos de cada dimensión en sus sedes presenciales movido por los dos principios de la nueva gestión pública. En definitiva, el estudio aporta evidencia de la creciente necesidad de una política deportiva para el sector emergente de los deportes electrónicos venezolanos.


























