LOS PREMIOS INTERCIENCIA

El reconocimiento a la labor y trayectoria destacadas de los investigadores adquiere un valor especial cuando es decidido y otorgado por la propia comunidad científica. Más es así en nuestra región, donde la mayoría de los premios importantes a científicos y tecnólogos son concedidos por entidades oficiales. Es debido a su origen en la propia comunidad de investigadores de las Américas que los Premios Interciencia, ya en su tercer año consecutivo, han adquirido una relevancia particular e indiscutible.

La Asociación Interciencia, que desde 1974 agrupa a las Asociaciones para el Avance de la Ciencia de las Américas, instituyó en el año 2004 dos premios a ser concedidos anualmente a investigadores destacados en varios campos de la ciencia y la tecnología. Esta iniciativa fue posible gracias a generosos aportes del Gobierno de Canadá y de la empresa canadiense Hydro-Quebec, en colaboración con la Association Francophone pour le Savoir (ACFAS), miembro correspondiente canadiense de la Asociación Interciencia.

El Gobierno de Canadá estableció un fondo, administrado por ACFAS, para financiar el otorgamiento de un premio anual a ser concedido a individuos que hayan hecho contribuciones sobresalientes para el avance de las ciencias y las ingenierías en países de América Latina y el Caribe, correspondiendo en años alternos a los campos de las Ciencias de la Vida y a Ecología y Biodiversidad.

Por su parte, Hydro-Quebec financia directamente la concesión de un premio anual destinado a reconocer contribuciones sobresalientes para el avance del conocimiento en los campos de la Energía y el Ambiente en países del Cono Sur, el cual es concedido en años alternos en cada una de esas dos especialidades.

En su primera edición el Premio Interciencia en Ciencias de la Vida recayó en la investigadora mexicana Mayra de la Torre, por sus meritorias contribuciones al progreso de la ingeniería de bioprocesos y la biotecnología. El Premio Interciencia en Energía esa misma oportunidad le fue otorgado al físico argentino José Manuel Fink, por sus importantes aportes en el campo de la energía nuclear. Ambos Premios fueron otorgados en el marco Reunión Conjunta de la Sociedad Brasilera (SBPC) y la Asociación Argentina (AAPC) para el Progreso de la Ciencia, celebrada en Buenos Aires en noviembre del 2004.

Un año después, durante la celebración del X Congreso Nacional de Ciencia y Tecnología organizado por la Asociación Panameña para el Avance de la Ciencia (APANAC) en agosto del 2005, el Premio Interciencia en Ecología/Biodiversidad fue recibido por el distinguido investigador costarricense Rodrigo Gómez-Lobo, por sus esfuerzos en aras de la conservación de la biodiversidad, mientras que el investigador argentino Miguel Laborde recibió el Premio Interciencia en Energía, en reconocimiento a sus aportes en el uso del hidrógeno como combustible.

En cada oportunidad, el Comité Ejecutivo de la Asociación designa un jurado internacional y éste a su vez solicita la asesoría de connotados hombres de ciencia de la región. Los premios son decididos con base en la calidad científica del trabajo de los candidatos, su repercusión en la especialidad respectiva y su impacto en la región. Los premios son otorgados en el marco de la Reunión Anual de la Asociación, la cual se celebra alternadamente en uno de los países miembros.

Una de las características más importantes para la validación de iniciativas tales como los reconocimientos otorgados a través de los Premios Interciencia, cual es su mantenimiento en el tiempo, parece tomar cuerpo.          Nuevamente se anuncian para el presente año los Premios en Ciencias de la Vida y en Ambiente. Las postulaciones para los mismos están siendo solicitadas a las Asociaciones Miembros de la Asociación Interciencia en los diversos países, las que pueden postular hasta tres candidatos.

Miguel Laufer, Interciencia

 

THE INTERCIENCIA AWARDS

The recognition to the work and the career of researchers acquires a special value when it is decided and conferred by the scientific community. It is even more so in our region, where the majority of important awards are given to scientists and technologists by official institutions. It is due to its origin in the community of researchers of the Americas that the Interciencia Awards, already in their third consecutive year, have acquired a particular and indisputable relevance.The Interciencia Association, which gathers since 1974 the Associations for the Advancement of Science of the Americas, established in 2004 two awards to be bestowed annually upon outstanding researchers in various fields of science and technology. This initiative was possible thanks to generous contributions from the Government of Canada and the Canadian enterprise Hydro-Quebec, in collaboration with the Association Francophone pour le Savoir (ACFAS), corresponding Canadian member of the Interciencia Association.

The government of Canada established a fund, to be administered by ACFAS, to finance the concession of an annual prize to be bestowed upon researchers who have made outstanding contributions to the advancement of science and engineering in Latin American and Caribbean countries, corresponding to the fields of Life Sciences and of Ecology and Biodiversity.

Hydro-Quebec, on the other hand, finances directly the granting of an annual prize aimed to recognize outstanding contributions to the advancement of knowledge in the fields of Energy and Environment in South Cone countries, which is granted in alternate years in each of these two specialties.

In its first edition the Interciencia Award in Life Sciences was given to the Mexican researcher Mayra de la Torre for her meritorious contributions to the progress of the engineering of bioprocesses and to biotechnology. The Interciencia Award in Energy was given on that same opportunity to the Argentinean physicist José Manuel Fink, for his important contribution in the field of nuclear energy. Both awards were granted within the framework of the Joint Meeting of the Brazilian Society (SBPC) and the Argentinean Association (AAPC) for the Progress of Science, held at Buenos Aires in November 2004.

A year later, during the X National Congress of Science and Technology organized by the Panamanian Association for the Advancement of Science (APANAC) in August 2005, the Interciencia Award in Ecology/Biodiversity was received by the distinguished Costa Rican researcher Rodrigo Gómez-Lobo, for his efforts in benefit of biodiversity conservation, while the Argentinean researcher Miguel Laborde received the Interciencia Award in Energy in recognition of his contributions in the use of hydrogen as fuel.

At each opportunity, the Executive Council of Interciencia Association appoint an international jury and they, in turn, seek the advice of recognized men of science from the region. The awards are decided on the basis of the scientific quality of the candidates’ work, its repercussion in the corresponding specialty and its impact in the region. The awards are bestowed during the Annual Meeting of the Association, which takes place in alternation at one of the member countries.

One of the most important characteristics for the validation of initiatives such as the recognitions given through the Interciencia Awards, which is its persistence in time, appears to become embodied. Again, the Awards in Life Sciences and in Environment are announced for this year. Nominations are being requested from member associations in the various countries, who can submit up to three candidates.

Miguel Laufer, Interciencia

 

OS PRÊMIOS INTERCIÊNCIA

O reconhecimento ao trabalho e trajetória destacadas dos investigadores adquire um valor especial quando é decidido e outorgado pela própria comunidade científica. Mais é assim na nossa região, onde a maioria dos prêmios importantes a científicos e tecnólogos são concedidos por entidades oficiais. É devido a sua origem na própria comunidade de investigadores das Américas que os Prêmios Interciência, já no seu terceiro ano consecutivo, têm adquirido uma relevância particular e indiscutível.

A Associação Interciência, que desde 1974 agrupa as Associações para o Avanço da Ciência das Américas, instituiu no ano 2004 dois prêmios a ser concedidos anualmente a investigadores destacados em vários campos da ciência e a tecnologia. Esta iniciativa foi possível graças a generosos aportes do Governo do Canadá e da empresa canadense Hydro-Quebec, em colaboração com a Association Francophone pour le Savoir (ACFAS), membro correspondente canadense da Associação Interciência.

O Governo de Canadá estabeleceu um fundo, administrado por ACFAS, para financiar o outorgamento de um premio anual a ser concedido a indivíduos que tenham feito contribuições sobresalientes para o avanço da ciência e as engenharias em países da América Latina e do Caribe, correspondendo em anos alternos aos campos das Ciências da Vida e a Ecologia e Biodiversidade.

Por sua parte, Hydro-Quebec financia diretamente a concessão de um premio anual destinado a reconhecer contribuições sobresalientes para o avanço do conhecimento nos campos da Energia e o Ambiente em países do Cono Sul, o qual é concedido em anos alternos em cada uma dessas duas especialidades.

Em sua primeira edição o Prêmio Interciência em Ciências da Vida recaiu na investigadora mexicana "Mayra de la Torre", por suas meritórias contribuições ao progresso da engenharia de bio processos e a biotecnologia. O Prêmio Interciência em Energia essa mesma oportunidade lhe foi outorgado ao físico argentino José Manuel Fink, por seus importantes aportes no campo da energia nuclear. Ambos Prêmios foram outorgados no marco Reunião Conjunta da Sociedade Brasileira (SBPC) e a Associação Argentina (AAPC) para o Progresso da Ciência, celebrada em Buenos Aires em novembro de 2004.

Um ano depois, durante a celebração do X Congresso Nacional de Ciência e Tecnologia organizado pela Associação Panamenha para o Avanço da Ciência (APANAC) em agosto de 2005, o Prêmio Interciência em Ecologia/Biodiversidade foi recebido pelo distinguido investigador costarriquense Rodrigo Gómez-Lobo, por seus esforços em aras da conservação da biodiversidade, enquanto que o investigador argentino Miguel Laborde recebeu o Prêmio Interciência em Energia, em reconhecimento a seus aportes no uso do hidrogeno como combustível.

Em cada oportunidade, o Comitê Executivo da Associação designa um jurado internacional e este por sua vez solicita a assessoria de conotados homens de ciência da região. Os prêmios são decididos com base na qualidade científica do trabalho dos candidatos, sua repercussão na especialidade respectiva e seu impacto na região. Os prêmios são outorgados no marco da Reunião Anual da Associação, a qual se celebra alternadamente em um dos países membros.

Uma das características mais importantes para a validação de iniciativas tais como os reconhecimentos outorgados através dos Prêmios Interciência, qual é sua manutenção no tempo, parece tomar corpo.          Novamente se anunciam para o presente ano os Prêmios em Ciências da Vida e em Ambiente. As postulações para os mesmos estão sendo solicitadas as Associações Membros da Associação Interciência nos diversos países, as que podem postular até três candidatos.

Miguel Laufer, Interciencia