INTRODUCCIÓN
Reducir el tiempo de cicatrización de las heridas crónicas, con alternativas factibles, materiales accesibles y económicos, constituye una estrategia para disminuir la morbimortalidad de estas lesiones, asociadas a patologías consideradas un problema de salud pública. Una herida es una lesión tisular provocada por la solución de continuidad de los tejidos, causada por traumatismos, agentes físicos o químicos, invasión de microrganismos o muerte celular por trastornos en el funcionamiento normal de los tejidos. Según su temporalidad, puede clasificarse en agudas y crónica. En el caso de las heridas crónicas, estas requieren para su cicatrización de períodos muy prolongados de tiempo, que no logran alcanzar las 6 semanas, y cicatriza por segunda intención, a través de un proceso complejo que elimina y reemplaza el tejido dañado.1,2 Considerando la evolución natural de las heridas, en la actualidad se cuenta con una variedad de elementos de biotecnología avanzada para brindar cuidados ideales y acordes con las necesidades de cada individuo, teniendo en cuenta las características de las lesiones. La selección del método adecuado para el cuidado de las heridas constituye un reto para los profesionales de la salud, debido a muchos factores, entre ellos resaltan, la disponibilidad de los recursos hospitalarios, el costo de los insumos, el conocimiento y utilidad de los mismos.6,8,9
El Alumbre de Potasio, podría considerarse un nuevo elemento de biotecnología, de gran utilidad en el manejo de las heridas. Cuyas referencias en el manejo de heridas se basan en conocimientos empíricos no documentados. Desde el punto de vista químico, es una sal doble de aluminio y potasio hidratada (con 12 moléculas de agua) cuya fórmula es KAl(SO4)2.12H2O; se trata de una sal cristalina muy soluble en agua. Esta sal se presenta en forma de cristal y corresponde a la categoría de alumbres, y es el más común de ellos. Las disoluciones acuosas presentan valores acidulantes del ph. Este tipo de sal suele contener impurezas de metales y algunos cloruros, siendo los más frecuentes el hierro, sodio, calcio, manganeso, cloruros, amonio, rubidio y cesio 10. El Aluminio al ser uno de los principales elementos que conforman el Alumbre de Potasio, se emplea desde hace mucho tiempo como coadyuvante del proceso de cicatrización de las heridas externas. Debido a sus propiedades astringentes, el Aluminio favorece la precipitación de las proteínas, explicándose así su acción facilitadora de la cicatrización. Asimismo, se le atribuye cierta actividad antimicrobiana por su poder astringente. El Aluminio como metal no atraviesa la membrana celular y no ejerce ninguna acción farmacológica sistémica ni efecto tóxico.11
La necesidad creciente de nuevas estrategias que reduzcan el tiempo de cicatrización de heridas complicadas se convierte en un pilar fundamental de la investigación experimental, en búsqueda de alternativas factibles, con materiales accesibles y económicos. En cuanto al uso del Alumbre de Potasio, en los procesos de curación de heridas crónicas, pese al manejo empírico de este elemento, como cicatrizante y antitranspirante en culturas asiáticas y americanas, no existe evidencia bibliográfica de publicación en revistas indexadas nacionales e internacionales y buscadores académicos en salud. Debido a esto se planteó determinar el efecto cicatrizante del Alumbre de Potasio al 2% en heridas crónicas.
MATERIAL Y MÉTODO
Se realizó un estudio descriptivo, prospectivo, de corte longitudinal, experimental tipo ensayo clínico pragmático, doble ciego, con el objetivo de determinar el efecto cicatrizante del Alumbre de Potasio (KAl(SO4)2.12H2O) al 2% en heridas crónicas, Hospital Universitario “Antonio Patricio de Alcalá”, estado Sucre, durante el período enero 2021 - enero 2023. La población estuvo constituida por la totalidad de 48 pacientes con presencia de heridas crónicas (> 6 semanas de evolución) ingresados en el servicio de Cirugía General, representando una población finita, por lo que se tomó su totalidad como muestra, para un porcentaje de ocurrencia del 100%, y nivel de confianza del 99%, quienes en su totalidad cumplían con criterios de inclusión; la muestra se estratificó en dos grupos: el grupo control20 con tratamiento placebo y el otro grupo experimental 28
tratado con Alumbre de Potasio al 2%, ambos grupos desconocían a que grupo pertenecen para evitar el sesgo de selección, y así mantener los criterios de doble ciego.
Técnicas y Procedimientos
La recolección de la información se desarrolló, mediante la revisión exhaustiva de las lesiones y el registro fotográfico, de igual forma con las entrevistas clínicas y el examen físico se identificaron características de la muestra, las heridas crónicas, su evolución en tiempo por fases de cicatrización (granulación y Epitelización) y reacciones adversas (locales o sistémicas) a la administración de la solución de Alumbre de Potasio. Las variables se registraron en una base de datos digital (anexo 1) y los resultados obtenidos, se expresaron en tablas y gráficos, con expresiones absolutas, porcentuales y media aritmética (x̄) y moda (Mo) donde fue requerido; la relación de variables se sustentó con la aplicación de la fórmula de coeficiente de correlación de chi- cuadrado (X2) de Pearson.
Todas las heridas recibieron tratamiento previo de preparación del lecho, por desbridamiento quirúrgico. El grupo experimental fue sometido a tratamiento tópico con solución de Alumbre de Potasio al 2%, obtenido de la dilución de 20g de KAl(SO4)2.12H2O, en 1000 ml de agua potable, a través del proceso de ebullición (10 min), con la esterilización de la misma, y posterior almacenamiento en frascos estériles de 500mL, para el uso individual de cada paciente. La solución preparada se utilizó para realizar la cura de la herida y la impregnación (100 mL) de apósitos (interactivos) de gasas monofilamentosas, que se dispusieron en la herida antes de vendar y se retiraron en la siguiente cura, cada 24 horas. Por otro lado, el grupo control se sometió a tratamiento tópico con Solución 0,9% y Agua oxigenada al 3%, como placebo, con apósitos húmedos, cada 24 horas.
De igual forma, el estudio fomentó la aplicación de normas bioética, cumpliendo con los principios básicos de respeto, justicia, beneficencia, y no maleficencia, con el manejo de todos los resultados, en el anonimato y bajo la aprobación de un consentimiento informado.
RESULTADOS
Los factores sistémicos que afectaban la cicatrización, fueron la edad ≥ 65 años (77% / x̄: 67años / X2=0,0001), la HTA (56,2% / X2=0,0001), el sedentarismo (95,8% / X2=0,0000) y el edema local (35,4% / X2=0,5747); y como factores protectores, el género masculino (72,9% / X2=0,0023), el estado nutricional normal (83,3% / X2=0,0000) y la cobertura antibiótica y analgésica (100%) (Tabla 1); Predominaron las heridas sucias (79,1% X2=0,0023), de miembros inferiores (Figura1) (45,8% / X2=0,0220), tipo fascitis necrotizante (41,6% / X2=0,0102) (Tabla 2); El grupo experimental, según la localización, experimentó una reducción global del tiempo de cicatrización (28% granulación y 24% epitelización), siendo la de región abdominal con mayor reducción de tiempo (Figura 2) (Granulación: 17 días / DE:9,06 / X2=0,0204) (Epitelización: 26 días /DE:18,38 / X2=0,0148) (Tabla 3); Según el tipo, también se observó una reducción global del tiempo de cicatrización (27% granulación y 26 % epitelización); las gangrenas de Fournier presentaron mayor declive en tiempo (Granulación: 17,6 días / Mo:14 días / DE:3,04 / X2=0,0023).) (Epitelización: 27,9 días / Mo: 26 dias / DE:1,70 / X2=0,0226) (Tabla 4).
Tabla 1 Factores sistémicos que afectan la cicatrización en heridas crónicas, Hospital Universitario “Antonio Patricio de Alcalá”, estado Sucre, Enero 2021 - Enero 2023
| Factores Sistémicos | Grupo Control (n:20) | Grupo Experimental (n:28) | Total (48) | |||||||
|---|---|---|---|---|---|---|---|---|---|---|
| Nº | % | x̄ | Nº | % | x̄ | Nº | % | x̄ | X2 | |
| Edad (años) | ||||||||||
| ≥ 65 | 17 | 35,4 | 67 | 20 | 41,6 | 68 | 37 | 77,0 | 68 | 0,0001* |
| Genero | ||||||||||
| Masculino | 13 | 27,0 | 22 | 45,8 | 35 | 72,9 | 0,0023* | |||
| Estado nutricional | ||||||||||
| Normal (IMC18-24) | 16 | 33,3 | 24 | 50,0 | 40 | 83,3 | 0,0000* | |||
| Exceso (IMC > 24) | 2 | 4,1 | 1 | 2,0 | 3 | 6,2 | 0,3643 | |||
| Defecto (IMC<18) | 2 | 4,1 | 3 | 6,2 | 5 | 10,4 | 0,9353 | |||
| Comorbilidad | ||||||||||
| Hipertensión A | 12 | 25,0 | 15 | 31,2 | 27 | 56,2 | 0,0001* | |||
| Diabetes mellitus | 1 | 2,0 | 2 | 4,1 | 3 | 6,2 | 0,7624 | |||
| IVP | 8 | 16,6 | 11 | 22,9 | 19 | 39,5 | 0,9602 | |||
| Sin comorbilidad | 4 | 8,3 | 4 | 8,3 | 8 | 16,6 | 0,6005 | |||
| Tratamiento farmacológico | ||||||||||
| Antibióticos | 20 | 41,6 | 28 | 58,3 | 48 | 100 | ||||
| Antihipertensivos | 12 | 25,0 | 15 | 31,2 | 27 | 56,2 | 0,6580 | |||
| Antiagregantes P. | 7 | 14,5 | 8 | 16,6 | 15 | 31,2 | 0,6357 | |||
| AINES | 20 | 41,6 | 28 | 58,3 | 48 | 100 | ||||
| Sedentarismo | 20 | 41,6 | 26 | 54,1 | 46 | 95,8 | 0,0000* | |||
| Edema | 8 | 16,6 | 9 | 18,7 | 17 | 35,4 | 0,5747 | |||

Figura 1 Evolución de herida sucia, de miembros inferiores, tipo fascitis necrotizante con alumbre de potasio
Tabla 2 Clasificación de las heridas crónicas según el riesgo de infección, localización y tipo, Hospital Universitario “Antonio Patricio de Alcalá”, estado Sucre, Enero 2021 - Enero 2023
| Clasificación de las heridas crónicas | Grupo Control (n:20) | Grupo Experimental(n:28) | Total (48) | |||||
|---|---|---|---|---|---|---|---|---|
| Nº | % | Nº | % | Nº | % | X2 | ||
| Riesgo de infección | Herida limpia | 2 | 4,16 | 5 | 10,4 | 7 | 14,5 | 0,4470 |
| Herida contaminada | 1 | 2,0 | 2 | 4,16 | 3 | 6,2 | 0,7624 | |
| Herida sucia | 17 | 35,4 | 21 | 43,7 | 38 | 79,1 | 0,0023* | |
| Localización | Abdomen | 1 | 2,0 | 1 | 2,0 | 2 | 4,16 | 0,8071 |
| Miembros inferiores | 9 | 18,7 | 13 | 27,0 | 22 | 45,8 | 0,0220* | |
| Lumbo-sacra | 5 | 10,4 | 6 | 12,5 | 11 | 22,9 | 0,7716 | |
| Genitales | 5 | 10,4 | 8 | 16,6 | 13 | 27,0 | 0,7837 | |
| Tipo | Pie Diabético | 2 | 4,1 | 2 | 4,1 | 4 | 8,2 | 0,7924 |
| Gangrena de Fournier | 5 | 10,4 | 8 | 16,6 | 13 | 27,0 | 0,4691 | |
| Ulcera por Presión | 5 | 10,4 | 6 | 12,5 | 11 | 22,9 | 0,8981 | |
| Fascitis Necrotizante | 9 | 18,7 | 11 | 22,9 | 20 | 41,6 | 0,0102* | |
Leyenda: número de casos. X2: chi-cuadrado de Pearson <0,05 (*) confianza 95%.

Figura 2 Herida contaminada en región abdominal, etapas de cicatrización con el uso de alumbre de potasio
Tabla 3 Tiempo de evolución de las fases de cicatrización (granulación y epitelización), posterior a la aplicación del Alumbre de Potasio al 2%, según localización de heridas crónicas. Hospital Universitario “Antonio Patricio de Alcalá”, estado Sucre, Enero 2021 - Enero 2023
| Localización de heridas crónicas | Grupo Control (n:20) | Grupo Experimental (n:28) | ≠ | X2 | ||||
|---|---|---|---|---|---|---|---|---|
| Granulación (días) | x̄ | Mo | DE | x̄ | Mo | DE | ||
| Abdomen | 28 | 12,02 | 17 | 9,06 | 11 | 0,0204* | ||
| Miembros inferiores | 27,4 | 36 | 18,7 | 18,3 | 13 | 6,11 | 9,1 | 0,0000* |
| Lumbo-sacra | 15,8 | 19 | 3,11 | 14,6 | 12 | 2,50 | 1,2 | 0,1010 |
| Genitales | 24,6 | 30 | 4,79 | 18,8 | 17 | 1,95 | 5,8 | 0,0073* |
| Epitelización (días) | ||||||||
| Abdomen | 40 | 28,28 | 26 | 18,38 | 14 | 0,0148* | ||
| Miembros inferiores | 63,6 | 68 | 5,63 | 51,3 | 47 | 4,50 | 12,3 | 0,0056* |
| Lumbo-sacra | 32,8 | 29 | 4,96 | 27 | 25 | 2,09 | 5,8 | 0,4414 |
| Genitales | 49,2 | 55 | 6,37 | 36,1 | 34 | 2,35 | 13.2 | 0,0016* |
Leyenda: x̄: media aritmética. Mo: moda. DE: desviación estándar. ≠: diferencia X2: chi-cuadrado de Pearson <0,05 (*) confianza 95%.
Tabla 4 Tiempo de evolución de las fases de cicatrización (granulación y epitelización), posterior a la aplicación del Alumbre de Potasio al 2%, según tipos de heridas crónicas. Hospital Universitario “Antonio Patricio de Alcalá”, estado Sucre, Enero 2021 - Enero 2023
| Tipo de heridas crónicas | Grupo Control (n:20) | Grupo Experimental (n:28) | ≠ | X2 | ||||
|---|---|---|---|---|---|---|---|---|
| Granulación (días) | x̄ | Mo | DE | x̄ | Mo | DE | ||
| Pie Diabético | 27 | 0,57 | 19 | 0,57 | 8 | 0,0953 | ||
| Gangrena de Fournier | 28,4 | 30 | 4,79 | 18,8 | 17 | 1,95 | 9,6 | 0,0073* |
| Ulcera por Presión | 15,8 | 19 | 3,11 | 14,6 | 12 | 2,50 | 1,2 | 0,1010 |
| Fascitis Necrotizante | 25,1 | 28 | 4,96 | 17,6 | 14 | 3,04 | 7,5 | 0,0023* |
| Epitelización (días) | ||||||||
| Pie Diabético | 64 | 0,70 | 47 | 0,57 | 17 | 0,0225* | ||
| Gangrena de Fournier | 49,2 | 55 | 6,37 | 36,1 | 34 | 2,35 | 13,1 | 0,0016* |
| Ulcera por Presión | 32,8 | 29 | 4,96 | 27 | 25 | 2,09 | 5,8 | 0,4414 |
| Fascitis Necrotizante | 40,4 | 39 | 4,18 | 27,9 | 26 | 1,70 | 12,5 | 0,0226* |
Leyenda: x̄: media aritmética. Mo: moda. DE: desviación estándar. ≠: diferencia X2: chi-cuadrado de Pearson <0,05 (*) confianza 95%.
DISCUSIÓN
En teoría, el Alumbre de Potasio al ser una sustancia astringente, con su aplicación tópica puede retraer los tejidos, y producir una acción cicatrizante, antiinflamatoria y antihemorrágica. El aluminio posee una acción bactericida. Esta misma particularidad favorece la precipitación de proteínas que forma una capa protectora sobre el área infectada lo que ayuda a reparar el tejido; está directamente involucrado como catalizador en la biosíntesis de colágeno, que ocurre durante la reparación tisular. De ahí que, además de actuar como protector, lo haga como cicatrizante. Por otro lado, el potasio, es un agente oxidante, que altera la pared celular de los organismos patógenos, oxidando la materia orgánica al contacto, proporcionando una potente actividad antimicrobiana; además promueve la síntesis del tejido de granulación y del colágeno 37. Los beneficios reportados con el uso del Alumbre de Potasio al 2%, fue un menor costo económico, no se reportaron reacciones adversas, con una curación significativamente mayor a la presentada por el grupo control.











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