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Letras

versão impressa ISSN 0459-1283

Letras v.49 n.75 Caracas  2007

 

Consideraciones sobre el arquetipo en la novela: El combate de Ednodio Quintero1

Dulce Santamaría

(UPEL-IPC)

Resumen

El presente artículo tiene como objetivo fundamental, establecer como se construye la realidad ficcional en la novela: El Combate del escritor Ednodio Quintero, ya que en ella el escritor pone en evidencia una serie de hechos que forman parte de la cultura universal: el origen del hombre que reproduce el del universo, la presencia del héroe, la preeminencia de la relación hombre-mujer… Todos estos elementos se nutren y tienen sus raíces en lo simbólico y para ello se toman como ejes fundamentales  en este análisis las teorías del Psicoanálisis esbozadas por el eminente médico vienes: Sigmund Freud y su brillante alumno: Karl Gustav Jung. De allí que, la novela El Combate hace eclosión en diferentes ámbitos, donde se emplea la palabra como fuente que convoca poderes mito/mágicos y el sueño que actúa como recurso, por excelencia del escritor, para rescatar lo desconocido y oculto del ser humano.

Palabras Clave: Realidad-ficcional, Simbología, Psicoanálisis, Palabra (mito/magia) y Sueño.

Remarks on the archetype in Ednodio Quintero’s novel el combate

Abstract

The main aim of this article is to show how a fictional reality is constructed in Ednodio Quintero’s El Combate. In this novel, the writer evidences a series of events which are part of a universal culture: the man’s origin that reproduces that of the universe, the presence of the hero, the prominence of the man-woman relationship... All these elements are nourished and rooted in the symbolic. Therefore, the theories of Psychoanalysis, of the eminent Viennese physician Sigmund Freud and his pupil Karl Gustv Jung, will support the analysis. El Combate, breaks into different fields, where the word is employed as a source gathering mythical and magic powers and dreams, the writer’s specialty, act as a resource for the rescue of unknown and hidden in the human being.

Key words: fictional reality, symbology, psychoanalysis, Word (myth/magic), Dream.

Considerations de l’archetype dans le roman « el combate » (le combat) d’Ednadio Quintero

Résumé

L’objectif fondamental de cet article est d’établir comment se construit la réalité fictionnelle dans le roman « El Combate » (Le Combat) de l’écrivain Ednodio Quintero, étant donné qu’il y met en évidence une série d’événements faisant partie de la culture universelle : l’origine de l’homme qui reproduit celle de l’univers, la présence du héros, la prééminence de la relation homme – femme… Tous ces éléments se nourrissent et proviennent du symbolique et, pour ce faire, les axes fondamentaux de cette analyse sont les théories du Psychanalyse ébauchées par l’éminent médecin viennois Sigmund Freud et son brillant élève Karl Gustav Jung. C’est pourquoi le roman « El Combate » (Le Combat) fait éclore dans plusieurs champs où on emploie le mot source appelant des pouvoirs mito – magiques et le rêve agissant comme recours, bien maîtrisé par l’écrivain, pour sauver l’inconnu et l’occulte de l’âtre humain.

Mots clés : réalité fonctionnelle, psychanalyse, mot (mito-magie) et rêve.

Considerazioni sull’archetipo nel romanzo: “El combate”, di Ednodio Quintero

Riassunto

Il presente articolo ha lo scopo fondamentale di stabilire  il modo in cui si costruisce la realtà della finzione nel romanzo: “El Combate”, dello scrittore venezuelano Ednodio Quintero. In questo romanzo lo scrittore evidenzia alcuni fatti che sono elementi della cultura universale: l’origine dell’uomo che riproduce quello dell’universo, la presenza del eroe, la prevalenza del collegamento uomo-donna. Tutti questi elementi si nutrono e hanno le sue radici nel simbolico. Perciò, gli assi fondamentali di quest’analisi sono le teorie della psicanalisi sostenute dall’eminente medico viennese Sigmund Freud e dal brillante alunno: Karl Gustav Jung. Per questo il romanzo “El Combate” compare in diversi ambiti, dove la parola è usata come una fonte che invoca poteri mitici e magici e dove il sonno attua come risorsa, per salvare quello che è sconosciuto e nascosto dall’essere umano.

Parole chiavi: Realtà, finzione, simbologia, psicanalisi, parola (mito/magia), sonno.

Considerações sobre o arquétipo no romance El combate, de Ednodio Quintero

Resumo

O presente artigo tem como objectivo fundamental estabelecer como se constrói a realidade ficcional no romance El Combate, do escritor Ednodio Quintero, já que nessa obra o escritor põe em evidência uma série de factos que formam parte da cultura universal: a origem do homem, que reproduz a do universo; a presença do herói; a proeminência da relação homem-mulher… Todos estes elementos se nutrem e têm as suas raízes no simbólico e, nesse sentido, tomam-se como eixos fundamentais nesta análise as teorias da psicanálise esboçadas pelo eminente médico vienense Sigmund Freud e pelo seu brilhante aluno Karl Gustav Jung. No romance El Combate, ocorrem eclosões em diferentes âmbitos, emprega-se a palavra como fonte que convoca poderes mito/mágicos e o sonho age como recurso, por excelência do escritor, para resgatar o lado desconhecido e oculto do ser humano.

Palavras-chave: realidade–ficção, simbologia, psicanálise, palavra (mito/magia) e sonho.

Der archetypus im roman : überlegungen zu el combate, von Ednodio Quintero

Zusammenfassung

Im vorliegenden Artikel soll dargestellt werden, wie die fiktionale Wirklichkeit im Roman El Combate, von Ednodio Quintero, konstruiert wird. In diesem Roman beschäftigt sich der Schriftsteller mit einer Reihe von Tatsachen, die Bestandteil der universalen Kultur sind, und zwar mit dem Ursprung des Menschen, der den des Universums nachahmt; der Anwesenheit des Helden; der Vorrangstellung der Mann-Frau-Beziehung … Alle diese Elemente haben ihre Wurzeln im Symbolischen. Die Theorie der Psychoanalyse, wie sie von Sigmund Freud und seinem Schüler, Karl Gustav Jung, entwickelt wurde, bildet den theoretischen Rahmen dieser Studie. Seinen Höhepunkt erreicht der Roman El Combate in verschiedenen Bereichen, in denen das Wort als Quelle mytisch-magischer Mächte verwendet wird und der Traum ein Mittel zur Wiedergewinnung des Unbekannten und des Verborgenen im Menschen darstellt.

Schlüsselwörter: fiktionale Wirklichkeit, Symbologie, Psychoanalyse, mytisch-magisches Wort, Traum.

Recepción: 16-01-2006 Evaluación: 23-11-2006 Recepción de la versión definitiva: 05-12-2006

“Abandonamos todo lo que se

puede abandonar para enlazarlo

más fuertemente con aquello a lo

que nadie puede acercarse”

Robert Musil.

El presente ensayo tiene el objetivo primordial de trabajar algunas perspectivas y consideraciones del arquetipo vistas desde la teoría del Psicoanálisis  en el texto narrativo: El Combate de Ednodio Quintero. Sin embargo, antes de entrar propiamente en materia se ubicará al escritor y su obra. Ednodio Quintero nace en Las Mesitas, Edo. Trujillo en 1947. Se le cataloga como cuentista nato, preocupado por la calidad formal del relato, el lenguaje preciso y la subjetividad del personaje. De allí que su fuerte sea la narración y el ensayo. Es ingeniero forestal, pero en la actualidad se dedica a la docencia en la Universidad de los Andes. Entre sus títulos de relatos se cuentan: La Muerte Viaja a Caballo (1974), Volveré con mis Perros (1975),El Agresor Cotidiano (1978),La Línea de la Vida (1988),Cabeza de Cabra y Otros Relatos (1993).Su obra novelística abre con: La Danza del Jaguar (Premio Conac de Narrativa, 1992), La Bailarina de Kachgar (1991), Soldados (1992),El Rey de las Ratas (1994), El Cielo de Ixtab (1995), El Combate (1995), El Corazón Ajeno (1999) y Lección de Física (2000).

En 1994 obtuvo el premio de narrativa Miguel Otero Silva. También publicó una antología de cuentos titulada: Narradores Andinos Contemporáneos (1980).

Después de evidenciar algunos aspectos de su vida y obra, se puede aludir a su Arte Narrativa o Poética de la Escritura. Ella se basa en que para Ednodio Quintero, la Literatura es una manera de estar en el mundo. "La escritura, aún cuando no es algo que practique a diario, es una manera de respirar, una manera de estar". (Quintero, Ednodio. p. 14).        También comenta que el acto de escribir es un proceso que va de lo lento hacia lo fluido, que el elemento primordial que dirige al escritor es su conciencia, que el escritor debe oxigenar constantemente su expresión y que por ende debe sentir preocupación por los aspectos geográficos e históricos que determinan las vivencias de la humanidad; así que en líneas generales, percibe la narrativa como un aporte al goce espiritual y quizás dirigido a la idea de paz.

Esta ubicación del autor del Combate, en un marco referencial de su vida y su percepción de la práctica del hecho literario, conduce obviamente hacia el marco histórico que sirve de trasfondo a su obra, la cual se inscribe en gran parte del pasado siglo XX y los inicios del siglo XXI. Ese marco histórico está signado por la presencia del Capitalismo y las diversas relaciones político - culturales que convierten la actividad literaria en parte de la economía que mueve a los diversos sectores sociales que configuran al estado capitalista. Venezuela no está exenta de manejarse en ese ámbito, ya que al existir bonanza petrolera todo gira en torno a ella. Sin embargo, Ednodio Quintero escribe su producción literaria entre los años setenta y ochenta, donde la generación de escritores viene a ser lo que Cordoliani, Silda (1991) llama la Generación Light porque en su temática la política queda de lado y entran en ella, otros aspectos tales como: la droga, la homosexualidad, se retoma lo místico, lo espacial, lo sensual, se trabaja con los sueños, lo mítico, lo simbólico ... En el caso de Quintero, éste no está inmerso en ningún taller o grupo literario que le ofrezca fórmulas de cómo y qué expresar ya sea en sus cuentos , novelas y ensayos. Más bien, su escritura revela una actividad continua y sustentadora, que registra - como en un instrumento musical - todos los acordes y tonos del lenguaje (Liscano, Juan. p. 280). Sus libros poseen una textura en gradación de lo existencial y de lo sensible, que hace que su estilo se nutra de diversas materias del espíritu: lo psicológico, lo mítico, lo simbólico, lo sensual, lo espacial, lo temporal, lo histórico, lo telúrico... El texto de Quintero titulado: El Combate agrupa y mezcla varios de estos elementos: Lo Psicológico, Lo Mítico , Simbólico, Lo Espacio – Temporal y Lo Telúrico.

Tomando en consideración estos elementos de base, se partirá de la perspectiva psicológica, ya que se analizará al personaje central de esta novela debido a que en él se intuyen distintos niveles de estructuras arquetípicas. Por tanto, se abordaran a los principales exponentes de esta disciplina: el médico neurólogo: Sigmund Freud y el médico psiquiatra: Karl Gustav Jung y  se tomarán algunos préstamos de las ideas del profesor Italo Tedesco con relación a la psicología del personaje. Todo esto con la finalidad de dejar en claro, la teoría que se aplicará a la obra del escritor. Centrados, pues en la materia, la concepción de Freud (1948) sobre el Psicoanálisis, que para él, significa aquella técnica que a través de sus múltiples sistematizaciones teoréticas estudia el funcionamiento del inconsciente humano. Este último se descubre por medio de los sueños, los cuales se manifiestan en figuraciones simbólicas en el inconsciente humano, pudiendo aflorar en el consciente y a las que Freud llama remanentes de la psique y Jung (1977) les da el nombre de arquetipos. Ahora bien,  el arquetipo para este estudioso y seguidor de Freud viene a entenderse como representaciones de un motivo. En otras palabras son instintos que se manifiestan en fantasías por medio de símbolos. Su origen se desconoce y se producen en cualquier tiempo y espacio. En la manifestación artístico - literaria: El Combate se empleará este aspecto del psicoanálisis con tres finalidades:Como préstamo a fin de dar cuenta del valor que cobra la dimensión del personaje en el contexto en el que se desenvuelve,Como modelo de situaciones:simbólicas, espacio-temporales, y telúricas, Como recurso con el que juega el escritor para afrontar la historia relatada.

Habría que insertar como una cuarta finalidad, el planteamiento de  Tedesco, I (2000), al trasluz de la teoría de Freud, en la que la  palabra es la que determina la presencia de los arquetipos, ya que al ser   lo  primero que existe,  antes del nacimiento del hombre, ha quedado gravada como una marca o sello que lo hace participar de  un proceso comunicativo. Por tanto, también, se contemplará en el texto de Ednodio  Quintero: el poder que tiene la palabra para convocar eventos  arquetípicos. Avocandose al análisis de la obra El Combate, ésta se divide en dos libros titulados: Soledades y Uniones, cada uno consta de siete capítulos, en los que un personaje sin nombre pareciera evolucionar e inclusive depender de un universo que se manifiesta en una espiral, donde convergen seres inusitados: desde demonios hasta la figura de exuberantes mujeres. La espiral está formada por pequeños círculos que se desarrollan en el sueño del personaje principal, en ellas él va mutando, pero cada cambio refleja una imaólica arquetipo. Iniciando con el primer libro se encuentra uno con: Sobreviviendo, El Silencio, El Combate, La Caída, Orfeo, En la Taberna y Caza. El texto más importante de esta primera parte es el que nuclea el sueño del personaje masculino (principal)  (Ver gráfico 1).

Gráfico Nº 1

Cada estructura del  gráfico opera en función de una imagen arquetipal, como se verá a través de los ejemplos. En el episodio de Sobreviviendo el hombre se retrotrae al círculo inciático de la vida en las culturas primitivas. La imagen simbólica arquetipal se relaciona con el origen que genera nacimiento, del individuo como parte de un contexto. En el caso del episodio analizado este origen determina que todavía la existencia humana se mantiene un nivel de creación que avanza hacia un ciclo de cambios:

Me he arrastrado como (un reptil) sonámbulo

acumulando puestas de sol, arena en los ojos

retazos de miradas... Siempre  de espaldas a

mi mismo. (p.5).

...  He dibujado hermosos círculos de tiza en el

centro de la noche. No he vuelto la mirada, absorto como

estoy en la contemplación (de una imagen que en

apariencia me contiene).(p. 5).

... La memoria (desde muy atrás) arrastra ímágenes

que, de alguna manera, se le parecen ... (p.5).

(Trazo círculos) que al contenerme, se convierten en

claves secretas negadoras de mi existencia. (p.6).

Sin detenerme voy girando: dando vueltas en

torno al eje de mi cuerpo; y en el vórtice del

movimiento (adopto posiciones propias de un

oscuro feto) - cordón umbilical atado no al vientre

sagrado de una perra, sino al corazón lleno de

luces de la Vía Láctea. (p.6). 

 Me digo que aún hay tiempo para pensar que alguien

(...) recién llegado del otro lado de la noche,(susurra

mis oídos las sílabas enrevesadas de mi nombre).(p.6).

El episodio referido a El Silencio refleja otra imagen simbólica arquetipal relacionada con el embrión que en el vientre materno se desarrolla en un medio acuoso. Por ende, el personaje de este texto que está desarrollándose en una matriz universal recuerda y  aviva en su sueño la mencionada vivencia:

Ahí reposaba, (aovillado, envuelto en mí

propio calor),bogando hacia el territorio de los sueños. (p. 7)

(Recuerdos no tenía). Sólo imágenes

fragmentarias se proyectaban de vez en cuando contra

la pared blanca de mi memoria. (p. 7).

De alguna manera aquellas figuras (me hacían

pensar en una infancia de pez en profundo arrecife). (p. 7).

(Cierto que aquí) (...) no hacían falta las

palabras. Podría incluso afirmar que también los

pensamientos estorbaban. Y que la acción, como

reflejo de la voluntad, era en aquel ámbito un evento

desconocido.(p. 9).

Era mi voz, (quizás un poco empañada)

- como un espejo guardado en un desván. Era (...) la

misma que susurraba en tus oídos frases de amor. (p 10).

En el texto El Combate la imagen simbólica arquetipal tiene que ver con la figura del héroe. El personaje logra su desarrollo siendo guerrero, sin embargo sabe que ser guerrero no siempre permite la plenitud:

Durante años (había imaginado cada detalle

del encuentro). Y me había entrenado

minuciosamente, con esmero y dedicación dignos de un

arquero zen. (p. 13).

(Me levanté. Asunto terminado). Ya era

tiempo de regresar ... No quise guardar para mis sueños

futuros la imagen del rostro de aquel desconocido

que, por la razón que fuese, me había causado tanto

dolor. (p. 18).

En la Caída la imagen simbólica arquetipal se relaciona con el fin, con la búsqueda del Centrum (centro de si mismo) para las culturas primitivas, para las contemporáneas el (yo):

(Ruedo) vuelto un ovillo (p. 21).

La caída se prolonga (como si aquel talud condujera al

centro de la tierra). (p. 21).

En el texto Orfeo la imagen simbólica arquetípica se relaciona con el mito griego de Orfeo esposo de Eurídice, la que al morir desciende al Hades y Orfeo va tras ella porque quiere recuperarla. En el Hades cautiva a los dioses infernales con su música y deciden devolverle a Eurídice, pero la condición era que no volviese a ver la figura de su esposa hasta que dejaran el mundo infernal, él no resiste y voltea y vuelve a perder a Eurídice quedando solo y desolado. Ahora bien, el personaje principal se siente como Orfeo o en todo caso lo representa en su proceso evolutivo. Sin embargo, lo que vive el personaje protagonista con los demonios del centro de la tierra le permite adoptar una posición que lo induce hacia su carácter humano y aún cuando siente nostalgia decide por lo humano:

(Es posible que a causa de mi aspecto), el

cancerbero que custodiaba la entrada me hubiera

confundido con el espectro de algún condenado que

regresaba a su redil. (p.29).

Cruce el umbral y en seguida comencé a tocar

mi cencerro.(Yo sabía que mi música enloquecía

a las mujeres y amansaba a las bestias más indómitas

(...).Tenía yo suficientes motivos para pensar que

fascinaría también a los demonios). (p. 29).

Pero los demonios son seres dobles, dotados

de una inteligencia superior, (y se burlaron de mi

presunción creando con sus artimañas un mundo que

reproducía los motivos de mi sueño). (p. 29).

(Al son de mi cencerro bailaban todos los

demonios). (p. 30).

(Recaí en mi antiguo vicio de pensar). (p. 31).

Ni siquiera tengo que huir, nadie movió un

dedo para retenerme. (El cencerro se lo coloqué al

cancerbero cuando me fui (...) ).Pero no quise

voltearme (...), quien     sabe si era yo mismo el que

lloraba.  Recorrí pasadizos,pero no me detenía sólo

miraba al pasar. Atardecía cuando salí a la intemperie.

(p. 33/34).

En la Taberna y en Caza el protagonista como hombre vive su humanidad recién adquirida, pero sigue siendo parte de la imagen simbólica arquetipal del universo como principio y fin, ya que sustentando esta visión en Hall, E (2000), se proyecta en un sueño y espacio infinito donde se despoja de su inmanente terredad y del telurismo de los primeros esbozos de su evolución de ser instintivo a ser supuestamente racional que está cargado de diversas sensaciones y sentimientos (Ver gráfico 2 y gráfico 3)

Gráfico Nº 2

Gráfico Nº 3

Se puede decir, de Soledades que es un libro que tiene una configuración circular a diferencia de Uniones, en él las palabras cobran diversos significados porque son las que configuran el nacimiento del personaje principal (protagonista). Son las que invocan la reactualización de hechos que en el sueño del protagonista se transforman en imágenes arquetipales. Entre ellas: el simbolismo del centro, el origen del individuo y el fin del mismo, el cambio del individuo de un estado a otro, el individuo - héroe... En fin, el escritor: Ednodio Quintero se vale tanto de la palabra como del arquetipo porque en la teoría psicoanalítica son elementos básicos que en literatura actúan centralizando la historia al definir, caracterizar, representar y dar cuenta de un mundo ideal en la creación (Ver gráfico 4).

Gráfico Nº 4

En Uniones por el contrario, la imagen arquetipal tiene que ver con Circe que en mitología representa a la bruja o hechicera que atrae a Ulises con artilugios y actos poblados de artes mágicas Risquez,F  (2002). El texto que conecta al libro uno con el libro dos es Caza, porque en él aparece la primera mujer que es gitana y con la cual el hombre no logra conectar nada, sólo le queda grabada en su memoria la risa de la joven. Luego, aparece, Laura a quien el hombre describe como: enigmática, misteriosa, lejana, mística, tenue; lposteriormente están Carla, Irene y Ada, quienes son definidas como místicas, brujas,extrañas y hechiceras y Carlota que para el protagonista tiene un pasado oculto. Lo interesante de estas relaciones es que obedecen a sueños en los que el hombre (protagonista) siempre instuye lo desconocido de la mujer que evoca siempre lo eterno femenino o la muerte. Ejemplos:- Laura:evoca la muerte producto del rencor humano femenino hacia el hombre,- Carla, Irene y Ada:evocan la muerte producto del despecho femenino provocado por el hombre ,  Carlota:evoca la muerte producto de la falta de creer en lo humano femenino, por parte del hombre y Lulú:evoca la muerte sin rostro de lo humano femenino.

Cada una de la mujeres anteriormente descritas aparecen en los textos: Laura y las Colinas, Amanecer en la Terraza, Rosa Mística, Laura y el Arlequín, Las Furias, Sombras en el Agua, y Cartas de Relación (Ver gráfico 5).

Gráfico 5

En cuanto a los dos textos Soledades y Uniones, el hombre permanece en un solo: Combate, ya que su vida se desarrolla desde el inicio en un decurso temporal que perdura hasta el fin. Y esa vida es una constante lucha que se relaciona con los cambios y mutaciones que lo llevan a ser humano, en los cuales ni siquiera siendo preparado como guerrero está a salvo de otros y de sí mismo. Inclusive, luego de llegar  a ser totalmente humano empieza el otro problema: la compañía con el otro sujeto (femenino) que también lo mantiene en un constante estado de alerta. Quizá lo más relevante es este combate que da nombre a la novela: un combate que tiene un entorno cíclico y un centro del ser del individuo (Ver gráfico 6).

Gráfico 6

Tras haber visto esta disposición que hace de la novela de Ednodio Quintero una obra literaria interesante es necesario fijar y concretar:

La novela es una estructura cargada de simbolismo, lo cual evidencia que la historia relazada no esconvencional porque habla de demonios, guerreros, hechiceras, gitanas, mercaderes…Es decir, personajes que se representan diversas realidades y tienen diferentes explicaciones.

En el Combate el recurso con más fuerza es la palabra,  porque ésta cobra diversos matices en la medida que la  obra avanza, adquiere formas diversas: desde la simple nominación hasta la traslación de imagen a concepto.

Ednodio Quintero juega con los sueños de su personaje principal y las imágenes arquetipales que reproducen.

El Psicoanálisis como método, permitió abordar la obra y a través de él se captaron dos polos de la obra (Ver gráfico 7)

Gráfico 7

La novela El Combate es una propuesta que rescata  lo oculto y lo desconocido del ser humano.

Referencias

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2. Freud, S.  (1948).  Teoría del Psicoanális. Madrid. Edit. Gredos.        [ Links ]

3.  Hall, E. (2000).  El Tiempo en proyección espacial. Caracas. Mimeo: U.S.B.        [ Links ]

4. Jung, K. G. (1969). Breve Aproximación a la Teoría del Psicoanálisis de Sigmund Freud. Barcelona-España. Edit. Rotativa.        [ Links ]

5. Jung, K. G. (1977).  El Hombre y sus símbolos. Barcelona-España.  Gráficos Diamante.        [ Links ]

6. Liscano, J. (1995).  Panorama Actual de la Literatura Venezolana Actual. Caracas. Alfadil Ediciones.        [ Links ]

7. Quintero, E. (1999). El Combate. Caracas. M.A.E.        [ Links ]

8. Revista Actual (2002).  Narrativa Comtemporánea en Venezuela.  Enero - Abril. Nº 49. Mérida. Dirección de Cultura de la U.L.A.        [ Links ]

9. Risquez, F (2002).  Aproximación a la Feminidad. Caracas.  M.A.E.        [ Links ]

10. Tedesco, I (2000).   Mester de Lecturía en América Latina U.C.A.B. Caracas.        [ Links ]

Nota

1. Este trabajo se desarrolló dentro de las líneas de investigación del Instituto Venezolano de Investigaciones Lingüísticas y Literarias “Andrés Bello”, el cual recibe financiamiento del FONACIT (PEM 2001002027) y del FONDEIN-UPEL.