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Núcleo

versão impressa ISSN 0798-9784

Núcleo v.18 n.23 Caracas jan. 2006

 

English Next: ¿el fin del inglés
como idioma extranjero?

Mark Gregson
British Council
Chacaíto 1050,
Caracas, Venezuela
Telf. (58 212) 952 99 65 / 952 96 91
mgregson@britishcouncil.org,ve


A comienzos de este año, el British Council publicó un informe sobre la función que desempeña y las condiciones que mantiene el idioma inglés en todo el mundo (Graddol, 2006, English Next: The death of EFL?). En este informe, el especialista en lingüística aplicada, David Graddol, no sólo analiza la situación actual del inglés en el ámbito internacional, sino que también anuncia algunas predicciones interesantes sobre el futuro de este idioma en términos generales y sobre el destino que tendrá la Enseñanza del
Idioma Inglés (ELT, por sus siglas en inglés), en particular. En este análisis, brindaré un resumen con los puntos principales expuestos por Graddol e intentaré relacionarlos con la realidad de la Enseñanza del Idioma Inglés en Venezuela.
El primer hallazgo de Graddol parece obvio, pero es digno de mencionar: el Inglés como Idioma Extranjero (EFL, por sus siglas en inglés) tuvo un gran auge en la década pasada y seguirá expandiéndose rápidamente en la próxima década. Graddol calcula que la cantidad de usuarios de EFL (un término que no sólo incluye a los hablantes no nativos de inglés, sino también a todos los que estudian este idioma) se ha duplicado a mil millones durante los últimos diez años y volverá a duplicarse a dos mil millones, es
decir, casi un tercio de la población mundial, dentro de unos pocos años.
La razón principal de esta gran expansión estriba en el hecho de que el EFL se ha impuesto en los programas de estudios oficiales y se ha trasladado desde su posición anterior en el nivel secundario para adoptar un nuevo estatus como materia obligatoria en la escuela primaria. Por ejemplo, en China ahora todos los estudiantes deben aprender inglés a partir del primer grado en adelante como parte de los esfuerzos que viene haciendo el país por competir en la economía mundial. En un número cada vez mayor de países, EFL se enseña actualmente en todos los niveles del sistema educativo, desde
el preescolar hasta la universidad.
América Latina no ha sido una excepción a esta nueva tendencia. Chile, por ejemplo, introdujo recientemente el inglés en las escuelas primarias del estado y otras naciones están pensando hacer lo mismo. Aunque el gobierno de Venezuela todavía no ha seguido este mismo camino formalmente, se han puesto en práctica varias iniciativas regionales, entre las cuales se pueden mencionar algunos proyectos de escuelas primarias del municipio Chacao (estado Miranda) y en las escuelas bolivarianas del estado Mérida,
lo cual podría ser un buen indicio de desarrollos futuros.
Sin embargo, si bien esta tendencia de impartir el idioma inglés en las escuelas primarias asegura un crecimiento continuo de EFL a corto plazo, Graddol predice que esta expansión tendrá un pico y luego disminuirá aproximadamente en el año 2020. De hecho, la implantación de EFL en los primeros años de la educación en realidad siembra la semilla para una disminución en la necesidad de aprender el inglés durante las etapas posteriores
del sistema educativo. En cada vez más países europeos, la enseñanza “normal” de EFL ya no se necesita en los últimos años de la secundaria porque los alumnos ya han logrado aprender los aspectos básicos del idioma durante  el nivel primario. Por otro lado, países como Finlandia están adoptando oficialmente los enfoques que se fundamentan en el CLIL (siglas en inglés para Aprendizaje Integrado de Contenidos y Lenguas Extranjeras - AICLE), según el cual se les enseña a los alumnos asignaturas normales de la escuela,
como Ciencias o Estudios Sociales, en inglés, en lugar de en su idioma nativo.
Por consiguiente, es lógico suponer que en estos contextos se hace menos necesario enseñar el inglés en el nivel terciario; es decir, las universidades sencillamente necesitarán que los estudiantes puedan demostrar conocimientos suficientes de este idioma al ingresar a las mismas. Todos estos aspectos parecieran estar bastante alejados de las realidades que se viven en este lado del Atlántico. Sin embargo, si bien es verdad que en países como Venezuela hay muy pocos estudiantes en el sector público que terminan su escolaridad secundaria o incluso sus estudios universitarios con conocimientos importantes de inglés, una cantidad cada vez mayor de
escuelas privadas en Venezuela está moviéndose hacia el “bilingüismo”, lo cual básicamente significa que se imparte el EFL intensivo en el nivel primario y se adopta el enfoque del tipo CLIL en la secundaria. Aunque el idioma inglés no es un requisito para ingresar a la universidad en el nivel de pregrado de este país, todos los estudiantes de postgrado deben presentar un
examen de suficiencia en un idioma extranjero (el cual por lo general resulta ser el inglés) para poder graduarse. Entonces, habría que ver si estos fenómenos predicen el advenimiento en Venezuela de las tendencias supuestamente globales que ha identificado Graddol en su informe. Graddol no solamente predice el fin del rápido crecimiento de EFL a medida que se consolida en la primaria, sino que también habla sobre una disminución relativa en la demanda del inglés a medida que otros idiomas extranjeros se vuelven más populares. En particular, Graddol señala que ha habido un aumento en el chino mandarín, en especial en Asia, donde este idioma está reemplazando rápidamente al inglés como el idioma extranjero más buscado. La demanda del árabe y del español también está creciendo más rápido que la del inglés. Este auge de idiomas extranjeros no implica necesariamente una disminución absoluta en la demanda del inglés. Graddol piensa que esto se debe más bien al hecho de que existe más gente que desee aprender más idiomas: mientras que antes un profesional tenía la ambición razonable de aprender
un idioma extranjero, las generaciones futuras esperarán hablar dos o tres.
Vivimos en un mundo cada vez más globalizado, lo cual según Graddol, significa que es un mundo cada vez más multilingüe (y multicultural). Esta tendencia multilingüe es, a la vez, el reflejo de un mundo cada vez más multipolar, en el cual se están levantando nuevos centros de poder, lo que los analistas políticos denominan los BRIC (debido a que Brasil, Rusia, la India y China son los ejemplos más obvios), para desafiar la hegemonía económica y política de Estados Unidos. Dado que la popularidad y el declive de los idiomas extranjeros sigue el auge y la caída de los imperios, la cuestión no es tanto si la predominancia actual del idioma inglés como idioma internacional a la larga llegará a su fin, sino cuándo comenzará a darse este proceso. En todo caso, estamos refiriéndonos a tendencias de muy largo plazo: tal como señala Graddol, el latín siguió siendo una lingua franca en Europa mucho después de que el Imperio Romano se había desintegrado.
El desafío para la hegemonía angloparlante en los ámbitos económico y político se refleja en el mundo de ELT. Hasta este momento, la infraestructura de ELT ha estado dominada por los centros de poder angloparlantes, a saber, Estados Unidos, Reino Unido y Australia. Pero Graddol predice que los centros angloparlantes están perdiendo el control que habían tenido en su “negocio” de ELT, y señala varias tendencias que evidencian esta pérdida del poder.
En primer lugar, los aprendices de EFL ya no consideran que Estados Unidos, la Gran Bretaña o Australia sean los únicos lugares aceptables para dominar “realmente” el idioma. La India, por ejemplo, está emergiendo como un centro de ELT para los asiáticos y lo mismo podría estar ocurriendo en las islas del Caribe angloparlante para los aprendices que provienen de América Latina. La razón es obvia: es mucho más económico para un venezolano estudiar inglés en Trinidad que en Washington o Londres.
En segundo lugar, los profesores de EFL en las naciones emergentes ya no necesitan salir de sus países para especializarse en la profesión. Hace veinte años no existían cursos de postgrado que estuvieran directamente relacionados con ELT en Venezuela. Hoy en día, existe una docena o más cursos de Maestría y de especialización en este campo.
En tercer lugar, la metodología de ELT ya no emana necesariamente de las universidades en los antiguos centros de poder angloparlantes. Hoy en día, los especialistas en lingüística aplicada pueden ser de la India o Brasil, además de los británicos, australianos o estadounidenses, en parte porque lo que un buen profesor brasileño tiene que decir podría ser más relevante para su colega ve n ezolano en comparación con los dictámenes de un “experto” hablante nativo que viene de un lugar lejano. Graddol piensa que las naciones en desarrollo crearán cada vez más sus propias metodologías de ELT específicamente adaptadas a sus contextos locales. En Venezuela, si bien los prof
e s o res locales de ELT siguen la metodología comunicativa importada “de la boca para afuera”, en realidad lo que ocurre en un salón de clases promedio de una escuela del estado no tiene nada que ver con esta metodología. Esta tendencia de descartar el producto importado a favor de un modelo generado internamente se ve reforzada por el cuarto punto, a saber, la producción local de los materiales de ELT. De hecho, ya durante muchos años, en las escuelas del sector público es obligatorio utilizar libros de texto que sean escritos por autores venezolanos, y este tipo de política se ha esparcido
por las naciones emergentes.
La lista de los factores que están en contra de los anteriores poderes angloparlantes continúa. La idea de que el mejor (o el único) modelo para un estudiante de EFL sea un hablante nativo está siendo cada vez más atacada.
En un mundo donde (de acuerdo con los organismos turísticos internacionales) el 75% de los intercambios en inglés ocurre entre dos o más hablantes no nativos, la doctrina de “sonar como un hablante nativo” no tiene mucho sentido.
De igual forma, el prestigio que está relacionado con los profesores de EFL que son hablantes nativos irá desapareciendo gradualmente, según Graddol. Atrás quedarán aquellos días en que un estadounidense o británico sin capacitación que estaba de paso por la ciudad de Caracas podía exigir que le pagaran el doble en comparación con los honorarios de un venezolano quien había tenido que estudiar arduamente por cinco o más años para poder graduarse como profesor de inglés.
El clavo final que Graddol le coloca al sarcófago de la ELT angloparlante es la muerte inminente de la creencia común de que el idioma extranjero debe ser aprendido en el “contexto” de la cultura extranjera, de que Halloween o la hora del té son elementos esenciales en el programa de estudios de EFL. ELT se volverá cada vez más “instrumental” y se centrará en las destrezas lingüísticas que se necesitan para sobrevivir en la aldea global y que reflejan la forma en que el idioma inglés se ha convertido en una herramienta esencial para alcanzar y mantener el estatus de la clase media. En palabras de Graddol, EFL será reemplazado por Inglés Global.
Esta pérdida de control de la infraestructura de ELT por parte de los viejos centros angloparlantes es quizás justicia divina. En el siglo diecinueve, el Reino Unido necesitaba algunas cuantas personas locales que hablaran inglés para operar el aparato burocrático de su inmenso imperio. Más recientemente y de manera similar, Estados Unidos necesitaba algunas personas locales que hablaran inglés para que dirigieran las sucursales de sus corporaciones multinacionales, de manera que la operación de ELT estaba
dirigida a estas necesidades limitadas de los poderes angloparlantes, lo cual,
según Graddol, explica mucho el porqué la gran mayoría de los estudiantes de EFL en el pasado fallaron miserablemente al tratar de aprender el idioma: el “sistema” no requería una gran cantidad de buenos hablantes de inglés. Sin embargo, éste ya no es el caso. Tal como ha sucedido con las destrezas básicas de computación, todos los profesionales aspirantes necesitarán el inglés básico.
El término “idioma extranjero” implica posesión: el inglés nos pertenece a nosotros y no a ustedes. Sin embargo, Graddol vislumbra un mundo en el cual, como en Internet, el Inglés Global no le pertenece a nadie y a todos a la vez. En los años venideros, el futuro del inglés en el sistema educativo oficial de Venezuela podría depender bastante de si el gobierno está dispuesto o no a comprender este mensaje.


REFERENCIA BIBLIOGRÁFICA

1. Graddol, D. (2006). English next: The death of EFL? Londres: British
Council.