Sobre financiamiento y otros asuntos

…debe darse a los editores una garantía razonable de que les asignarán suficientes recursos económicos para alcanzar los fines que se persiguen.

Philip Abelson,1986.

El examen de la trayectoria de las revistas científicas venezolanas revela que, a pesar de décadas de esfuerzos individuales y colectivos, de logros y avances significativos en el campo editorial, subsisten viejos problemas que atentan contra la periodicidad, volumen, contenido y visibilidad de nuestras publicaciones periódicas. En esta nota abordaremos dos temas que consideramos vitales: carencia de fuentes seguras de financiamiento y lasitud de las instituciones académicas.

Comenzaremos reafirmando lo que hemos dicho en otras oportunidades. La edición de una revista científica en un medio como el nuestro, y en general en los países con menos desarrollo científico y tecnológico, es una tarea que demanda alta dedicación y esfuerzo sostenido de la comunidad que representa. Por consiguiente, el éxito de una revista concebida como el órgano oficial de una sociedad o asociación científica, como es el caso de la Revista de la Sociedad Venezolana de Microbiología (RSVM), depende en lo sustantivo de la voluntad, destrezas y perseverancia de todos sus miembros no solo de los responsables directos de la edición. Pero, el éxito está igualmente asociado al grado de aceptación que pueda alcanzar la revista entre los científicos y profesionales de otras latitudes.

La RSVM es, en razón a su naturaleza y objetivos, un vehículo de difusión diseñado para establecer vínculos formales entre los microbiólogos de la región, potenciar el desarrollo de la actividad científica nacional y facilitar la comunicación efectiva con la sociedad y sus organizaciones. Es también un instrumento para promover la presencia colectiva de la comunidad científica nacional en el ámbito internacional.

La historia señala que la mayoría de nuestras revistas nunca recibieron recursos económicos suficientes ni contaron con el respaldo de instituciones académicas. Algunas sobreviven con recursos gestionados por los editores y aportes ocasionales de las sociedades científicas. La Asociación de Editores de Revistas Biomédicas Venezolanas (ASEREME), con más de 30 años de actividad en procura del mejoramiento de las publicaciones nacionales, señala que un número importante de revistas del área no llena los requisitos de periodicidad y de visibilidad. A conclusiones similares se llega al examinar la Evaluación de Mérito de 137 publicaciones incluidas en el Registro de Publicaciones del Fondo Nacional de Ciencia y Tecnología (FONACIT 2008).

A partir de la creación del Consejo de Desarrollo Científico y Humanístico de la Universidad Central de Venezuela (CDCH-UCV, 1959) y sus equivalentes en otras universidades, y del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Tecnológicas (CONICIT, 1969) se ensayaron programas de apoyo a las publicaciones científicas mediante la asignación de recursos económicos puntuales. Se logra el rescate de algunas revistas y se crean de otras al abrigo de las universidades. Pero, como sucedería con la cultura en general, las publicaciones científicas también recibieron el impacto de la crisis económica que afloró en 1982. Desde entonces la inflación, la devaluación y el control de cambio dominan la escena política.

La vigencia, pertinencia y alcances de las revistas científicas nacionales seguirá siendo materia de debate en el seno de la comunidad científica y una legítima preocupación de los entes encargados de promover la investigación científica y sus aplicaciones en función del desarrollo del país. En definitiva es un tema sobre el cual debemos reflexionar. Pero, hay otros asuntos que demandan inmediata atención. Nos referimos a la inexplicable -porque no hemos recibido información oportuna- paralización de la evaluación de mérito de las revistas, la suspensión temporal del programa básico de financiamiento y sobre todo del futuro de la Plataforma SciELO Venezuela, herramienta clave en el proceso de universalización del conocimiento científico producido en nuestras universidades e institutos de investigación. Es urgente la reactivación de estos programas ya que una suspensión prolongada puede afectar irreversiblemente a los programas editoriales más débiles.

Vidal Rodríguez Lemoine

Email: vrodriguezlemoine@gmail.com