SciELO - Scientific Electronic Library Online

 
vol.24 número62El colapso del Callao: la crisis de la producción aurífera en Guayana a fines del siglo XIXLa frontera Chilena-Argentina: La Controversia por el Canal del Beagle índice de autoresíndice de materiabúsqueda de artículos
Home Pagelista alfabética de revistas  

Servicios Personalizados

Revista

Articulo

Indicadores

Links relacionados

  • No hay articulos similaresSimilares en SciELO

Compartir


Tiempo y Espacio

versión impresa ISSN 1315-9496

Tiempo y Espacio vol.24 no.62 Caracas dic. 2014

 

¿Las geografías o la geografía?

Are geographies or geography?

Scarlet Cartaya Ríos

Profesora de Ciencias Sociales, mención Geografía y Magister en Geografía, mención Geografía Física, (UPEL-IPC, 2000). Doctora en Ciencias Sociales de FACES-UCV. Forma parte del Programa de Estímulo a la Investigación e Innovación, PEI-B (2011- 2013/2013-2015). Profesor Asociado en la Cátedra de Geografía Física del Departamento de Geografía e Historia y en la Maestría en Geografía, mención Geografía Física de la UPEL-IPC. Coordinadora de la línea de Investigación “Estudios en Geografía de los Riesgos Naturales y Antrópicos, Ecogeografía y Conservación de Recursos Naturales”, del Centro de Investigaciones Estudios del Medio Físico Venezolano, del cual es miembro activo y en donde dirige varios proyectos de investigación individuales y en grupo con financiamiento interno y externo (LOCTI y PEII). Jefe de la Cátedra de Geografía Física de la UPEL-IPC. Investigadora 3 del Programa Prometeo para la ULEAM, Ecuador. E-mail: scarletcartaya@gmail.com; scarlet.cartaya@uleam.edu.ec.

Resumen: En la actualidad, el mundo es visto y estudiado desde parcelas y la disciplina geográfica no ha sido una excepción, por ello se presenta una reflexión acerca del desenvolvimiento de ésta disciplina a la luz de las oscilaciones entre diversas posiciones que han marcado su fragmentación desde el siglo XIX. La investigación es de tipo bibliográfica, para ello se acudieron a fuentes secundarias. Se asume la dialéctica como cuadro metodológico. A manera de conclusión, se acepta que las divisiones existen, más aun cuando están instauradas. Negarlas no conduce a la solución de este conflicto creado por el mismo hombre. Se propone la integración de las geografías, en la Geografía, esto implica abandonar las posturas rígidas y sesgadas, donde los estudios de asuntos puntuales y particulares, que son necesarios, no se manejen aisladamente, porque son especificidades que responden a una totalidad, contribuyendo a su explicación.

Palabras clave: disciplina geográfica, objeto de estudio, Ciencia.

Abstract: At present, the world is seen and studied from plots and geographical discipline has been no exception, so a reflection on the development of this discipline in the light of the oscillations between different positions that have marked fragmentation occurs from nineteenth century. The research literatureis kind, for itis they went to secondary sources. Dialectics as amethodological frameworkis assumed. To conclude, it is accepted that divisionsexist, especially as they a reput in place. Negatenot lead to the solution of this conflict created by the same man. Integration of the geographies, in Geography, this means abandoning the rigid and biased positions, where studies of specific issuesand individuals, which are necessary, are not handled separately is proposed, because they are responding to a specific whole, contributing to explanation.

Keywords: geographical discipline, object of study, Science.

Recibido: 31/07/2014.

Aprobado: 14/09/2014.

Las ciencias naturales han sido prolíficamente activas y han recabado una masa de material siempre creciente. Pero la filosofía ha permanecido tan ajena a ellas como ellas han permanecido ajenas a la filosofía…Pero la ciencia natural ha intervenido en y ha transformado la vida humana sobre todo, prácticamente, por medio de la industria y ha preparado las condiciones para la emancipación humana, no obstante que en un buen grado su efecto inmediato ha sido completar el proceso de deshumanización…La idea de una base para la vida y otra para la ciencia es desde el comienzo una falsedad…La ciencia con el tiempo comprenderá la ciencia del hombre de la misma manera que la ciencia del hombre comprenderá la ciencia natural: habrá una sola ciencia.

Carlos Marx. Los Manuscritos Económicos-Filosóficos de 1844 (1975).

Introducción

Cuando se revisa la literatura referente a la evolución del pensamiento geográfico, surgen frases como: “la Geografía presenta desarrollo dicotómico”; “la Geografía ciencia dual”; “Geografía Física vs. Geografía Humana”; “la Geografía es una disciplina en busca de su objeto de estudio”; “La Geografía está atravesando una época de profunda crisis epistemológica en cuanto a su concepción, objetivos y contenidos”, entre otras similares. Estas expresiones, ponen en evidencia la crisis en el campo de la Geografía, que se manifiesta por la coexistencia de concepciones diferentes e incluso contradictorias, lo cual no puede ni debe considerarse aislado del resto de la Ciencia.

Invitando a una exhaustiva reflexión acerca de la necesidad de comprender cómo ha sido el desenvolvimiento de la disciplina geográfica, a la luz de las oscilaciones entre diversas posiciones que han marcado la fragmentación de la Geografía, desde el siglo XIX, en Geografía Humana y Geografía Física, o lo que es lo mismo, la Geografía sin territorio y la Geografía sin el hombre. Ambas, se perciben como dos concepciones enfrentadas, contradictorias y opuestas, que vistas desde una perspectiva totalizadora se integren.

La segmentación condujo a que los estudios de lo social y lo natural, exigieran metodologías de trabajo diferentes, basados en que los objetos de estudios son diferentes a su vez. Argumento que se ha empleado para justificar la división clásica de la Geografía. Así se puede comprender la problemática que ha surgido con esta dicotomía, que amenaza la unicidad del conocimiento geográfico.

Se tratará de manera especial el caso de La Geografía Física, por ser la rama de la disciplina geográfica que ha despertado críticas entre científicos de manera general, inclusive entre los propios geógrafos.

Este rápido esbozo introductorio ya señala la complejidad de la situación, exige un tratamiento cuidadoso y detallado que descarte argumentos que enmascaren de cierta manera, su realidad. Conocer la Geografía en su surgimiento, formación y desarrollo, bien como su configuración actual, podrá esclarecer dudas sobre el surgimiento de las “diversas”geografías.

El Origen de las Oscilaciones en el Pensamiento Geográfico

El principal problema que ha tenido la Geografía en su conformación como disciplina científica radica en la forma como se ha conceptuado el objeto de estudio. Concepción marcada por los intereses de quienes controlan los saberes geográficos. En La Antigüedad, las necesidades comerciales y de dominación del mundo griego o del imperio romano impulsaron la descripción detallada de la tierra. Es a partir de aquí que fue catalogada como la ciencia de la descripción de la Tierra o de los lugares del mundo conocido.

Dependiendo de ciertas conveniencias, las descripciones se realizaban desde una perspectiva general o particular. La oposición entre estos enfoques marca la primera gran división de la Geografía, distinguiéndose dos tendencias clásicas: una regional o particular y otra general.

Más tarde, cuando surge la necesidad de elaborar mapas de la superficie terrestre se emplea conocimientos de las matemáticas y la astronomía en las confecciones cartográficas. La Geografía se hace rigurosa y compleja, caracterizada por prescindir del quehacer del hombre en el tiempo y en el espacio. Esta tendencia se mantuvo así por largo tiempo.

A partir del siglo XIX se evidencia un cambio en los contenidos geográficos que hasta ese momento se trabajaban como temas de la Geografía. Se abandonan las matemáticas y la astronomía, los mapas pasan a ser objeto de estudio de una ciencia aparte y se presta más atención al estudio de los problemas relacionados con la diferenciación del espacio en la superficie terrestre.

Es con Alejandro de Humboldt y Karl Ritter, (primera mitad del siglo XIX), considerados “padres de la Geografía Moderna”, que se originan los estudios especializados en la disciplina. Los documentos excepcionalmente naturalistas, forjaron las bases de la formación de la Geografía como ciencia y en consecuencia, la base para la Geografía Física (aun no denominada así), ya que consideraban a la Geografía como una Ciencia Natural, e incluso como rama de la Cosmografía.1

Estas primeras producciones de la ciencia geográfica se distinguieron por las observaciones y análisis de los componentes del medio natural, local o regional y las relaciones mutuas entre los componentes y su distribución mundial.

La tendencia de estos estudios fue ambientalista-naturalista, marcada por la influencia de la filosofía idealista y el romanticismo alemán. Para el caso, Humboldt prestó más atención a los fenómenos físicos, integrando distintas disciplinas que estudian el orden natural, conservando la perspectiva histórica en la evolución del marco natural. En cambio, Ritter establece y explica relaciones entre el medio físico y la vida del hombre, aunque ambos se caracterizaron por realizar estudios con fuerte tendencia determinista2.

Es evidente que hay una inmensa diferencia de aquel saber geográfico de hace dos siglos y ese enfoque determinista, a pesar de las críticas, considerando que buena parte de esos trabajos eran desarrollados a partir de regiones prácticamente vírgenes, donde sería imposible tener en consideración un análisis de una sociedad que no existe. Además, en aquel momento, la Geología tenía un prestigio científico muy superior al de la Geografía, lo cual hacía que los estudios de Geografía Física fueran considerados de mayor rigor científico, con relación a las otras ramas de la disciplina geográfica.

La revolución industrial y sus necesidades de dominación-explotación, impulsaron los estudios geográficos, así como la participación de las Sociedades de Geografía en estas tareas. Sin embargo, es partir de la segunda mitad del siglo XIX, cuando se sistematiza la Geografía como ciencia, por su incorporación en la enseñanza y su institucionalización en las Universidades, a través de la creación de las cátedras3.

Esto a su vez, impulsó la aparición de grupos e individuos que controlaban el poder institucional de los geógrafos en distintos países, lo cual derivó en el origen de las escuelas o líneas del pensamiento geográfico. En ellas prevalecían la imposición de paradigmas, concepciones y directrices de quienes la fundaron.

Cuando se produce esta institucionalización, el positivismo y el evolucionismo influyen en las producciones de los geógrafos. Se terminó de consolidar, así, el llamado determinismo geográfico que no es sólo la aceptación de la influencia del medio físico sobre las actividades del hombre, sino también, la búsqueda del riguroso encadenamiento causal existente entre los factores físicos y los fenómenos humanos4.

Como reacción al determinismo geográfico, surgió el posibilismo planteado por Paul Vidal de la Blache. Fruto de la gran influencia del humanismo en ese momento. Este planteó que el medio físico no determina las actividades del hombre, sino por el contrario, ofrece posibilidades al hombre que como ser libre utiliza o desaprovecha. Esta tendencia intenta comprender la realidad a partir del contacto íntimo de lo que se estudia5.

Para abordar la realidad desde esta concepción, es necesario trabajar a escala regional. La región se entendía como una síntesis que agrupa los contenidos de las denominadas Geografía Física y de la Geografía Humana de cierto lugar en específico, en donde el paisaje representa la unidad de análisis-síntesis.

Se criticó la presentación de datos heterogéneos de una región, así como la diferenciación de las regiones entre sí como entes únicos y aislados que impedía establecer leyes o principios generales. Esto se trató de solucionar asumiendo la concepción de la Geografía como ciencia síntesis de Paul Vidal de La Blache, siendo la síntesis geográfica el resultado de un estudio inductivodeductivo de una región.

Sin embargo, si bien con la región como objeto de estudio de La Geografía Regional Videliana, se pretendió evitar el peligro de la fragmentación de la Geografía, es en el carácter de sus producciones donde se sientan las verdaderas raíces de la Geografía Física. Esta escuela propició la ruptura completa entre las dos ramas, porque los aspectos físico-naturales no eran tratados dentro del enfoque, sino aparte.

La exclusión favoreció a marcadas descripciones, clasificaciones, comparaciones y correlaciones de las partes naturales integrantes del conjunto regional, produciendo al final tipologías fisionómicas. Esto condujo, inevitablemente, a la independencia de La Geografía Física, denominada, en ese entonces Geografía de la Naturaleza.

Creadas las cátedras de Geografía en las universidades y consolidadas las sociedades, se inicia el siglo XX con las más variadas polémicas entre el determinismo y posibilismo, entre La Geografía General y Regional, entre el cuantitativismo y el cualitativismo, entre la Geografía Física y la Geografía Humana. Esto fue lo que llevó al geógrafo español Horacio Capel, a afirmar que el desarrollo del pensamiento geográfico ha sido pendular entre oscilaciones positivistas y “antipositivistas”6, desde su sistematización como ciencia.

Es evidente que La Geografía ha pasado a ser regida por las oscilaciones entre posiciones opuestas. Tal vez, esto viene dado por algunos problemas epistemológicos de la disciplina que suelen amenazar su existencia o tal vez, a erradas interpretaciones. Situación que se agrava con las posturas rígidas de algunas escuelas, sociedades y centros de Geografía que en definitiva, han logrado aumentar distancias, endurecer posiciones y tendencias, contribuyendo así, a alejar la tan anhelada unicidad y sumergiendo a la disciplina en el atraso.

En medio de las marcadas tendencias, en la primera mitad del siglo XX, La Geografía Física destaca gracias al geógrafo francés Emmanuel De Martone, y es cuando de hecho, se empieza a denominar así. Se estudiaban los aspectos del cuadro natural del planeta, tratados de manera individualizada y separada de los temas asumidos por La Geografía Humana, constituyéndose prácticamente en una Ciencia de la Tierra.

En Geografía, la relación entre el hombre y la naturaleza aparece como objetivo básico, aquella Geografía Física demartoniana estuvo sensiblemente lejos de estos propósitos en la medida en que excluía casi completamente, al hombre de su cuadro de abordaje y preocupaciones.

Después de la Segunda Guerra Mundial se empezó a cuestionar las doctrinas y concepciones tradicionales establecidas. Se impone en la ciencia el neopositivismo o empirismo lógico del Círculo de Viena, su máximo representante K. Popper. Se insiste en la búsqueda de un lenguaje común, claro y riguroso, que permita dar validez general a los resultados. Se postula la neutralidad de la ciencia, excluyéndose de ella los juicios de valor, afirmando el carácter objetivo y explicativo del trabajo científico7.

En este contexto, surge una nueva Geografía como auténtica disciplina científica, posteriormente, por oposición, nace la Geografía Radical. La Nueva Geografía es una disciplina sistemática, su objeto fundamental es el análisis de problemas espaciales. Impulsada por la aparición de La Teoría de los Sistemas. Es nomotética, busca la formulación y aplicación de leyes o principios universales.

La Nueva Geografía, tiene un carácter deductivo porque busca explicar los hechos geográficos utilizando los conceptos y procesos de la ciencia en general. Su metodología y técnicas son cuantitativas. Se centra en explicar el orden de los procesos espaciales. Por el excesivo uso de técnicas cuantitativas y centrase en construir teoría, se le calificó de cuantitativista y teorética8.

La Geografía Radical, desde donde se critica la concepción cuantitativista, surge como ciencia comprometida y puesta al servicio de la transformación social. Esta concepción, con una gran influencia del marxismo, tuvo implicaciones en el marco teórico de la Geografía. Siguiendo esta visión, la Geografía es una ciencia que estudia el espacio organizado por la sociedad, por lo tanto, una Ciencia Social. Los principales temas abordados fueron: la pobreza, la marginalidad, la discriminación racial, el subdesarrollo.

Desde esta perspectiva, el espacio geográfico es producto del trabajo del hombre en sus relaciones sociales de producción. Diferencian “espacio geográfico” de “espacio”: el primero, objeto de estudio de la Geografía, deber ser concebido como un producto histórico, por tanto social, de las relaciones que se establecen entre la sociedad y el medio ambiente. El otro, “el espacio”, es todo aquello que el espacio geográfico no es. Esta concepción defiende la acción consciente del hombre, responsable de la transformación de la naturaleza y constructor del espacio geográfico; el propio hombre y sus múltiples relaciones son resultantes de la producción de ese espacio9. Este enfoque, sin embargo, pecó de extremista y sirvió de terreno fértil para impulsar los trabajos en el área física, completamente aparte, desvinculados de las relaciones sociales.

Se debe considerar la sociedad y la naturaleza como partes de un todo, de esta manera mantendría la ciencia geográfica su carácter de ciencia síntesis, así como la tarea específica de captar y proponer los conjuntos10. En este sentido, La Geografía se considera más que una Ciencia Humana como Ciencia Social, entonces ¿Dónde tiene cabida la Geografía Física? ¿Será que tendrá que migrar hacia las denominadas Ciencias Naturales? o ¿conformarse por redefinirse como rama de la Geografía, sacrificando su independencia?

La Geografía Física se debate entre tener que elegir un papel relevante como base de La Geografía, Ciencia Social o ser una Ciencia de la Tierra. En la primera, pareciera que se pone en peligro su existencia; en la segunda, sería autónoma y auxiliar de La Geografía.

Este dilema se pudo resolver con la adopción de los temas medioambientales o ecogeográficos. La Ecogeografía propuesta por los geógrafos franceses J. Tricart y J. Killian en 1979, es donde La Geografía Física es reinventada conceptual y metodológicamente, e incorporada dentro del campo de estudios de la Geografía11. Lastimosamente, no ha tenido mucha acogida, prevaleciendo el enfoque demartoniano.

La evolución de La Geografía en el siglo XX, sirve para afirmar que ésta ha sido y sigue siendo una disciplina creada por y para las escuelas. El desarrollo del pensamiento geográfico ha ido a la par de las tendencias que han marcado el desenvolvimiento de La Ciencia. La Ciencia está determinada por las fuerzas de las instituciones científicas y por las estructuras de poder que se generan en dichas instituciones.

El origen y desarrollo de las escuelas del pensamiento geográfico han sido orientados por diferentes teorías del conocimiento, por lo que sus estudios tenían que conducir a distintas concepciones geográficas. Estas, a su vez, están determinadas por la ideología dominante o por las concepciones sociopolíticas de cada país.

Tratar de comprender los fenómenos sociales y naturales, e intentar explicar sus interrelaciones e interferencias en la organización espacial, se ha constituido en desafío para la disciplina geográfica, tanto para su definición conceptual como metodológica. En consecuencia, se radicalizan posiciones, aumenta la polémica entre los seguidores de Geografía Humana y Geografía Física.

Separación que impulsó la relación de los geógrafos con las ciencias afines y con ello la aparición de las especializaciones y superespecializaciones en apariencia, abriendo su horizonte, pero en esencia, dificultando concentrarse en la unidad, cuando bien propicia el desarrollo de estudios fragmentados de su objeto.

Esta escisión ocurre cuando se asume a La Geografía como ciencia dual, tal como lo señalara Jacqueline Beaujeu-Garnier en la década de los setenta, la Geografía es una “ciencia de encrucijada” que forma un eslabón entre las ciencias naturales y las sociales. No obstante, se impulsó el desarrollo independiente y opuesto de los aspectos humanos y físicos.

Con la intensión de superar las divergencias en la disciplina surge la concepción Geohistórica12 impulsada por el Profesor Ramón Tovar, con la intensión de rescatarla de la fragmentación, con un enfoque que permite abordar la compleja realidad desde la totalidad del conocimiento.Se trata del aporte de un venezolano que de alguna manera viene a llenar un vacío “conceptual” en la Ciencia, creado por la concepción filosófica positivista que precisa funcionalidad general y particular a cada una de las ciencias13, además, logró interpretar la teoría de Carlos Marx surgida de la relación entre “salario, precio y ganancia”, donde asume una ecuación entre tiempo y espacio: “El tiempo es el espacio en que se desarrolla el hombre”14.

La Geohistoria tiene por objeto de estudio los fenómenos sociales en su dimensión temporo-espacial, unidad dialéctica que abarca lo diacrónico y lo sincrónico. Permitiendo comprender la organización y estructura del espacio.

Además, brinda la posibilidad de advertir las transformaciones operadas en la realidad, para lo cual la ciencia tradicional ya no tiene respuestas.

Las Especializaciones y Superespecializaciones en Geografía Física

La Geografía, al igual que otras Ciencias, ha venido atravesando un período de crisis en los últimos tiempos, por la coexistencia de diversas tendencias y concepciones, sin existir ninguna que sea universalmente aceptada. La atomización del contenido de la Geografía dio origen a una creciente especialización y superespecialización, lo que ha contribuido, aún más, al parcelamiento del contenido geográfico.

Cuando se revisa la clasificación y estructuración de los contenidos temáticos, métodos y técnicas en los libros textos de los más distinguidos geógrafos, de una y otra tendencia, su organización da la impresión de tratarse de un agregado de temas sin integración. Dándose a conocer como dos disciplinas distintas, en vez de dos ramas de una misma ciencia.

Esto, sin duda, fue generando independencia de las partes. Caso en el cual, la Geografía Física, pasa a tener un objeto de estudio que reúne una serie de objetos de estudio de otras ciencias. Por ello, le es necesario valerse constantemente de los datos de las denominadas ciencias exactas y naturales para constituir su cuerpo de estudio básico.

La influencia de las otras ciencias en el ramal físico, se expresa tanto conceptualmente como metodológicamente. Ejemplo, el estudio de la forma de organización de los componentes bióticos (vegetales y animales) y abióticos (clima, relieve, etc.) del planeta, estudiados independientemente unos de otros, por varias ciencias, fue necesario para la comprensión de su interrelación en la caracterización de los espacios. Esta necesidad condujo a desarrollar segmentos más volcado en la comprensión del cuadro físico del planeta, natural o alterado por la acción del hombre. Es por esta vía que es claramente comprensible la diversidad del pensamiento, en cuanto a tendencias específicas, en el estudio del espacio terrestre.

Siendo la Geografía Física una ciencia resultante del encuentro de un sin número de otras ciencias, estas a su vez influyen en su desarrollo, originando las especializaciones de su contenido. Ejemplo: con una fuerte influencia de la Geología Estructural, la Geomorfología fue la primera rama individualizada de la Geografía Física en tomar cuerpo y desarrollo autónomo, no siendo de extrañarse el hecho de que los primeros geomorfólogos habían sido anteriormente geólogos. Tal es el caso del geólogo norteamericano William Morris Davis, o padre de la Teoría del Ciclo Geográfico del Relieve, que pasó de la Geología Clásica a la Geomorfología.

El surgimiento de la Climatología, oriunda de la Meteorología, fue marcado por una vasta documentación estadística, en el análisis de los elementos del tiempo atmosférico. Las observaciones hechas por los ingenieros y agrónomos, principalmente, sobre el escurrimiento superficial y el proceso erosivo, dieron nacimiento a la Hidrografía y, a la Geomorfología Dinámica. La influencia de los biólogos, botánicos y zoólogos dio origen a la Biogeografía. Por ello, la Geografía Física es definida, por muchos, como un conjunto integrado de Ciencias de la Tierra.

Esta Geografía ha sido calificada como una ciencia temática, más que sistemática, porque cuando se revisa el contenido de las obras, la mayoría presenta una especie de añadido de Geomorfología, Climatología, Hidrografía y Biogeografía, donde no se expresa una integración, en buena parte es expresión de la escuela francesa, la cual está completamente disociada de los aspectos humanos y, cuya saga fue el descubrimiento de leyes que orientaron sus estudios de la distribución e interrelaciones de los componentes del medio natural.

Según Salas Sanjaume, M. y Batalla, R. (1996), De Martone fue consciente que el método analítico tiene el inconveniente de destruir las realidades complejas que son el objeto propio de la Geografía, pero permite entender los mecanismos subyacentes. Afirmó que el carácter científico de la Geografía lo adquiere al precio de apelar a disciplinas no geográficas, como la Geología, la Meteorología, la Botánica, la Estadística.

El peligro de dispersión sólo puede evitarse a condición de tener una conciencia muy clara del propio objeto de la Geografía. Lo importante es ver este doble carácter analítico y sintético, la necesidad de una visión de conjunto, pero también la de recurrir a análisis especializados cuando se quiera profundizar en un tema15.

En la actualidad la división está arraigada. Sin embargo, se aboga por la integración de la Geografía Física y Geografía Humana, porque siendo el objetivo de la Geografía el estudio del espacio construido por los grupos “humanos” dentro de condiciones históricas determinadas16, en donde el hombre-sociedad establece relaciones con la naturaleza, se hace necesario abordar este último aspecto correctamente.

Razón que justifica el auxilio de otras disciplinas científicas, para conocer cuáles son las características del medio en que se desenvuelve el hombre. Aunque, lo natural engloba aspectos muy variados, lo cual determina una gran variedad interna en la disciplina, estará en la forma de abordaje donde se imprima la diferencia, lo importante es tener el cuidado de no distorsionar el objeto de estudio de la Geografía.

Destaca la forma que estos temas son trabajados-enseñados en la cátedras de la Escuela de Geografía de la Universidad de Los Andes, así como los que atañen directamente a la autora del presente ensayo, la cátedra de Geografía Física del Instituto Pedagógico de Caracas de la Universidad Pedagógica Experimental Libertador (UPEL), donde ese estigma demartoniano ha sido superado desde hace unos cuantos años, con la adopción de temas medioambientales. Temas que se trabajan integrados, a partir de provincias fisiográficas y regiones naturales, explicando las relaciones existente entre los diferentes elementos físicos-naturales y la problemática ambiental generada por la acción del hombre, lográndose la síntesis geográfica.

Además, las investigaciones derivadas de los Trabajos de Ascenso de los miembros de la cátedra, así como los Trabajos de Grado de la Maestría en Geografía, mención Geografía Física (UPEL-IPC), son estudios científicos, serios y sistemáticos donde se explica y comprende la realidad partiendo del análisis para llegar a la síntesis geográfica.

Lo que se pondría en duda no sería la calidad y la producción intelectual, que desde esa parte de la academia se origina, lo que queda en tela de juicio es la calificación (etiqueta), porque denominada Geografía Física, pareciera un contrasentido dentro de la Ciencia Social. Si se desea abandonar las tendencias excluyentes y rígidas, en lo ecológico es donde está el vínculo con el hombre, quien es, en definitiva, el que organiza el espacio como producto del trabajo acumulado17.

Si bien es cierto, que existen intentos por redefinir la tendencia físiconatural, con la firme intención de logar la unicidad de la Geografía, tan poco es menos cierto, que existen posiciones severas que dan sólo relevancia a los aspectos naturales, tratados individualmente.

A su vez, los temas estudiados por separado, en varios componentes y subcomponentes del medio como: el tiempo atmosférico, los procesos modeladores del relieve, los modelados, los biomas, las cuencas hidrográficas, los ambientes sedimentarios, etc., favoreció la aparición de las superespecializaciones de la Geografía Física, separándola cada vez más del hombre. Vista así la Geografía Física resulta una especia de anacronismo, tal como lo afirma Tovar, R. (1986)18. Lo que significa que esta “rama”, nunca ha sido Geografía, porque está fuera del hombre y por lo tanto de la historia.

La Geografía ha sido dividida en un sinfín de Geografías más especializadas, hasta tal punto que en la actualidad existen superespecializaciones, que luchan por su autonomía y la autoría de los contenidos. Ejemplo: la llamada Geografía Física se divide en Geomorfología, Climatología, Biogeografía, Pedología e Hidrografía.

La Geomorfología se estudia por modelados, uno de ellos es el fluvial, donde se estudian el ciclo hidrológico, las formas de relieve asociadas a la acumulación y erosión fluvial y las cuencas hidrográficas, en estas últimas se aborda, la morfometría y el comportamiento hidrológico de las corrientes fluviales. Sin embargo, cuando se emprenden estudios hidrográficos, se tiene que asumir parte de los contenidos del modelado fluvial tratados en Geomorfología.

Aunque en apariencia, cada división comprende un cuerpo de contenidos que le son propios, dando la impresión de disciplinas autónomas dentro de la ciencia geográfica, sin embargo, en realidad estos contenidos “únicos” de estas subdivisiones en esencia son indivisibles. Asimismo, desde la llamada Geografía Humana, existe diversidad de ejemplos similares.

A manera de conclusión

Estas superdivisiones, creadas por los connotados maestros de las escuelas geográficas, sólo han contribuido al atraso de la Geografía, división que es cónsona con la fragmentación inicial y arbitraria de la Ciencia en Ciencias Naturales y las Ciencias Sociales o las Ciencias del Hombre-Sociedad, perdiéndose el carácter de síntesis de la Geografía y la búsqueda de la verdad en la práctica histórica concreta.

En este sentido, al existir la Geografía con divisiones, a una o varias de ellas se le atribuye la especificidad de estudios de lo natural y a otras, de lo social; se está contribuyendo a generar un pensamiento hacia la vulnerabilidad como subjetividad de un vago concepto supuestamente, general.

Todo conocimiento tiene como fin último la sociedad, ya que toda ciencia tiene como objetivo fundamental, el descubrimiento de lo desconocido para satisfacer las necesidades del hombre-sociedad, contribuyendo a facilitar la comprensión de la realidad.

En este sentido, aun cuando los orígenes de la Geografía se forjan en el seno de las llamadas Ciencias Naturales, la situación actual es, en muchos casos, la inversa, puesto que la Geografía se cultiva desde el ámbito de las “disciplinas sociales”, lo cual plantea conflictos a la Geografía Física, que tendrá que reinventarse y reorientarse para mantenerse dentro de la ella y no fuera.

Las especializaciones que fragmentan el conocimiento en partes fácilmente manipulables, genera un escabroso camino en busca de su unidad. Se está de acuerdo con la integración en el pensamiento geográfico, por ello se apoya el abandono de posiciones excluyentes y se aboga por la visión de conjunto y la síntesis en la explicación razonada del espacio construido por el hombre. No puede haber Geografía sin conocimiento de la Tierra, y sin el Hombre.

En la actualidad, el mundo es visto y estudiado desde parcelas. Hay que aceptar que las divisiones existen, más aun cuando están instauradas. Negarlas no conduce a la solución de este conflicto creado por el mismo hombre. Se propone la integración de las ciencias, en la Ciencia, esto implica abandonar las posturas rígidas y sesgadas, donde los estudios de asuntos puntuales y particulares, que son necesarios, no se manejen aisladamente, porque son especificidades que responden a una totalidad, contribuyendo a su explicación.

Desafortunadamente, no existe el real interés de integrar todas las Geografías. Quizás la poca aceptación se deba al temor de perder el poder que brinda la individualización del conocimiento, en consecuencia se extreman las posiciones. Razón por la cual, se afirma que la Geografía es una sola, su división contribuye a su distorsión.

Bajo esta perspectiva pendular y fragmentada del pensamiento geográfico, nos preguntamos ¿Cómo se han abordado los temas vinculados con los riesgos, los desastres y la vulnerabilidad? ¿Cómo llegar a la interpretación correcta de la realidad partiendo de varias visiones desde una misma ciencia? ¿Cómo resolver el problema de la reducción del riesgo y la vulnerabilidad, si se parte de confusiones y distorsiones conceptuales? ¿Cómo no confundir y en muchos casos calificar de natural a la amenaza, el riesgo y el desastre, cuando existen tendencias fisicalistas endurecidas? ¿Cómo deben ser tratados estos temas desde la Geografía? ¿Cómo avanzar en la comprensión de un espacio tomado por la vulnerabilidad, teniendo en cuenta que la Geografía, principalmente la física, encabeza la fragmentación que aniquila toda visión totalizadora?

Notas

1 Capel, H. y Urteaga, L., Las nuevas geografías. 1982, p. 15.

2 Idem.

3 Capel, H., 1983, p. 5.

4 Ibídem, p. 19.

5 Ibídem, p. 20.

6 “El positivismo posee tres rasgos esenciales: el monismo metodológico; la consideración de que las ciencias naturales exactas establecen el canon ideal o metodológico de todas las ciencias, inclusive las humanas o sociales; y la explicación causal. Frente a él el antipositivismo o historicismo, supone un rechazo al monismo; una afirmación del contraste entre las ciencias que aspiran a generalizaciones sobre fenómenos reproducibles y predecibles y las que buscan comprender las peculiaridades individuales y únicas de sus objetos; y la distinción entre explicación y comprensión”. (Capel, H., 1983, pp.14-15).

7 Tomasoni, M. A., Considerações sobre a abordagen da naturazana. Geografia. 2004, p. 28.

8 Capel, H. y Urteaga, L., Op.cit., pp. 26-27.

9 Mendonça, F., Geografia Física: Ciência Humana? Repensando la Geografía. 1989, pp. 42-43.

10 Tovar, R., El Enfoque Geohistórico.1986, p. 33.

11 Mendonça, F., Op.cit., p. 53.

12 “…la Geografía estrictussenso se ha convertido en Geohistoria y debe reencontrase con las visiones de conjunto que la condujeron a constituirse como una ciencia social desde la segunda mitad del siglo XIX”. “… la alternativa indiscutible, para la Geografía, estaría en la Geohistoria. Acá se reencontraría con su génesis…” Tovar, R. 1986, Op.cit., p. 36 y p .49.

13 SantaellaYegres, R. (2005).

14 Escrito en inglés por C. Marx de finales de mayo al 27 de junio de 1865. Publicado por vez primera en folleto en Londres en 1898. El presente texto corresponde a la edición de 1976 de Ediciones en Lenguas Extranjeras, Beijing, República Popular China, la cual es una versión revisada de la traducción al castellano de Wages, Price, and Profit por Ediciones en Lenguas Extranjeras, Moscú, Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas, 1954. Tomado de Obras Escogidas, Tomo II:Salario, precio y ganancia, por Carlos Marx y Federico Engels. Disponible en: www. http://www.marxistsfr.org/espanol/m-e/1860s/65-salar.htm#vii

15 Sala Sanjaume, M. y Batalla, R., Teoría y métodos en Geografía Física. 1996, p. 14.

16 Tovar, R, Ob.cit., p. 36.

17 SantaellaYegres, R. Pensamiento geohistórico de Ramón Tovar López. 2005, pp. 5-20.

18 Tovar, R., Ob.cit., p. 36.

Referencias Bibliográficas

Capel, H. (1983). Positivismo y antipositivismo en la ciencia geográfica el ejemplo de la geomorfología. Geocrítica: cuadernos críticos de Geografía Humana, 49, 3-57.        [ Links ]

Capel, H. y Urteaga, J. L. (1982). Las nuevas geografías. Colección Salvat Temas Clave. Madrid: Aula Abierta Salvat.        [ Links ]

Marx, C. y Engels, F. (1954). Obras Escogidas. Tomo II: Salario, precio y ganancia. [Documento en línea]. Disponible en: www.http://www.marxistsfr.org/espanol/m-e/1860s/65-salar.htm#vii        [ Links ]

Mendonça, F. (2001). Geografia Física: Ciência Humana? Repensando la Geografía. Sao Paulo: Geografía Contexto.        [ Links ]

Sala Sanjaume, M. y Batalla Villanueva, R. (1996). Teoría y métodos en Geografía Física. Espacios y Sociedades. Madrid: Editorial Síntesis.        [ Links ]

SantaellaYegres, R. (2005). Pensamiento geohistórico de Ramón Tovar López. Geoenseñanza, 10, 1, 5-20.        [ Links ]

Tomasoni, M.A. (2004). Considerações sobre a abordagen da naturazanaGeografia. En Reflexões e construções geográficas contemporâneas. Salvador, Brasil: Universida do Estado da Bahia, campus VI y Universidad Estadual de Feira de Santana.        [ Links ]

Tovar, R. (1986). El Enfoque Geohistórico. Estudios, Monografía y Ensayos, Nº 77. Caracas: Biblioteca de la Academia Nacional de la Historia.        [ Links ]