Acerca de Hay dos sexos.

Ensayos de feminología (1995/2008) de Antoinette Fouque

Como hace un tiempo he tenido que viajar a Madrid México, Medellín y Buenos Aires y siempre tengo a la librería Liber@rte en casa (PP del Centro Comercial Los Chaguaramos, el mismo donde queda el CEM de la UCV, piso 10; y el AEM de FACES, UCV, piso 4), no me había hecho falta ir por las otras librerías de la capital. Pero tuve que hacer una diligencia por Plaza Venezuela y recordé que siempre me había sorprendido la oferta de las librerías del Fondo de Cultura Económica, de México, una en la Av. Fco. Solano, a la altura de Chacaito, antes del restaurant, y otra en la Torre Polar de la Plaza Venezuela. A esta última entré y mi amor quedó intacto: encontré cosas que ni sabía que existían o que habían sido publicadas en español sin darme cuenta, no sólo en el FCE sino en otras editoriales mexicanas o con sucursal en México. Como Siglo XXI. Fue precisamente en esta última que encontré el libro que voy a comentarles. Se trata de la edición en español de Hay dos sexos, una antología de la feminista francesa Antoinette Fouque, una de las fundadoras del MLF, Movimiento de Mujeres de Francia; de la editorial Mujeres en Movimiento; del grupo “Psicoanálisis y Política” creado en los mismos días del MLF post mayo 1968; analizante de Jacques Lacan, amiga del gran psicoanalista Serge Leclaire, a gran distancia de Simone de Beauvoir, parlamentaria, eurodiputada, asistente a todas las reuniones y congresos internacionales convocados por las NNUU o por las diversas agencias de NNUU desde 1975 hasta 2002 (último texto del libro). Fouque nació el año 36, saquen la cuenta.

Recomendaría la adquisición de esta antología de Fouque por varias cosas, pero principalmente porque es una ayudante de memoria: contiene fechas, contenidos y críticas de cada uno de los eventos en NNUU y sus agencias desde 1975, así como del MLF y en otros grupos de mujeres en todo el planeta desde 1968. A toda esa gente que sigue recelando de que una feminista sea al mismo tiempo freudiana y lacaniana, le interesará saber que el recelo es antiquísimo y que precisamente por eso Fouque fue duramente atacada en el MLF en 1968: “mi alegato porque nuestro movimiento tomara en cuenta el psicoanálisis como único dispositivo riguroso sobre la sexualidad me hizo caer, a todas luces, en desgracia” (Fouque, 1995/2008: 51). Pero nunca abandonó el barco MLF porque “el trabajo psico-analítico me ayudaba a no ahogarme en el odio o en el terror, (me) ayudaba a no hundirme en los atolladeros feministas de izquierdas. (Con) Lacan mantuve una postura muy libremente crítica. Creo que él lo apreciaba, (creo) que sin el MLF, él no hubiera escrito Aún. Yo seguía acudiendo a sus seminarios (y) a su presentación de enfermos en el Hospital Sainte Anne” (Ibíd.: 52-53).

La tesis de Fouque, esa de que hay dos sexos y no Uno (como la legislación y el lenguaje sostienen) a partir del cual se define al otro, al sexo femenino, está desplegada a partir de la página 69 y es el tema de la ponencia presentada en octubre de 1990 en un Congreso Internacional de Filosofía. En uno de los últimos textos de la antología, leído el 8-3-1995 en Copenhaguen, se refiere a que la paridad va más allá de la igualdad. Para las feministas que se han pronunciado contra la paridad cuantitativa en las listas electorales, les recuerda que la cuota 50-50% es el punto de partida para proponer la paridad cualitativa. Esa paridad cuantitativa ya es “terrorista en una ideología incambiada” (Ibíd.: 241), la del Uno que no acepta que hay dos sexos sino el suyo. Sólo después podremos proponer la cualitativa, esto es, una en que no baste que las candidatas tengan TAMBIÉN un proyecto para las mujeres sino que “ese proyecto las considere como mujeres y no como hombres en devenir, (que) tenga en cuenta la realidad de su experiencia como mujeres (sexuadas), en cuanto al trabajo de la procreación, (de) la gestación, como lugar y tiempo específicos de la acogida al otro y como personas encargadas del mundo” (Ibíd.: 242). Que es el punto en que nos distanciamos de Fouque, pues esta nueva exaltación de la maternidad y el cuido para las elegibles en una paridad cualitativa deja afuera a todas las mujeres que decidieron no ser madres o no pudieron serlo y que se encargan del mundo tanto como las madres y como los hombres que jamás sabrán lo que es la maternidad. Se trata, como ha dicho Elizabeth Badinter, de una propuesta maternalista, regresionista y separatista.

REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS

1. Fouque, Antoinette (1995/2008). Hay dos sexos. Ensayos de feminología. Siglo XXI.        [ Links ]