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Boletín de Malariología y Salud Ambiental

versión impresa ISSN 1690-4648

Bol Mal Salud Amb v.49 n.2 Maracay dic. 2009

 

Notas Científicas

Panstrongylus rufotuberculatus (Champion, 1899) naturalmente infectados con Trypanosoma cruzi en el estado Miranda, Venezuela

Zavala-Jaspe R.1, Abate T.2, Reyes-Lugo M.3, Alarcón de Noya B.1 & Díaz-Bello Z.1

1 Sección de Inmunología. Universidad Central de Venezuela. Facultad de Medicina. Instituto de Medicina Tropical. Caracas - Venezuela.

2 Sección de Biología Molecular. Universidad Central de Venezuela. Facultad de Medicina. Instituto de Medicina Tropical. Caracas - Venezuela.

3 Sección de Entomología Médica. Universidad Central de Venezuela. Facultad de Medicina. Instituto de Medicina Tropical. Caracas - Venezuela.

*Autor de correspondencia: zoraida_diaz@yahoo.com

Dos ejemplares de Panstrongylus rufotuberculatus fueron capturados en una vivienda de El Hatillo, estado Miranda. En ambos se confirma la presencia de Trypanosoma cruzi. Se estudian algunos parámetros biológicos para estimar el comportamiento de uno de los aislados (Pr), encontrándose que tanto el cultivo en medios acelulares como la inoculación en ratones fueron exitosos. Así mismo, 73,3% de los Rhodnius de laboratorio se infectaron y 30,6% de los parásitos presentaron metaciclogénesis, mientras que in vitro se obtuvo 25,5%. La identificación molecular correspondió a T. cruzi. Este hallazgo es importante debido a la posible emergencia de esta especie silvestre que por alteración antrópica de sus hábitats naturales puede estar en proceso de dispersión, penetración y domiciliación de las viviendas, implicando la posibilidad de transmisión del parásito al ser humano y animales domésticos.

Palabras clave: Panstrongylus rufotuberculatus, Trypanosoma cruzi, vector.

Panstrongylus rufotuberculatus (Champion, 1899) naturalmente infectados con Trypanosoma cruzi en el estado Miranda, Venezuela

SUMMARY

Two specimens of Panstrongylus rufotuberculatus were captured in a house in El Hatillo, Estado Miranda. In both specimens the presence of Trypanosoma cruzi was confirmed. We studied some biological parameters for estimating the behavior of the isolates, finding in both that cell-free culture media as inoculation in mice were successful. Also, 73.3% of Rhodnius prolixus fed on infected mice became infected and 30.6% of the parasites developed to metacyclic forms whereas in vitro only 25.5% was obtained. Furthermore, the molecular identification corresponded to T. cruzi. This finding is important due to the possible emergence of wild species by anthropogenic alteration of their natural habitats, and this may become a process of dispersion, penetration and clearance of houses, implying the possibility of transmitting the parasite to humans and pets.

Key words: Panstrongylus rufotuberculatus, Trypanosoma cruzi, vector.

Recibido el 28/04/2009 Aceptado el 06/11/2009

La Enfermedad de Chagas (ECh) es una parasitosis producida por el flagelado Trypanosoma cruzi, un parásito heteroxénico el cual desarrolla su ciclo de vida entre un mamífero y un vector. Existen aproximadamente de 16 a 18 millones de personas infectadas y se estima en unos 100 millones los expuestos a la infección en América Latina (WHO, 2002, Technical Report Series No. 905). Rhodnius prolixus, Triatoma maculata y Panstrongylus geniculatus son las principales especies vectoras en Venezuela. R. prolixus constituye el transmisor mas importante de la ECh en el país (Pifano, 1960, Arch Venez Med Trop. 3: 73 - 99).

Panstrongylus rufotuberculatus es la segunda especie de mayor distribución en centro y sur América, después de P. geniculatus reportándose desde México hasta Argentina (Patterson et al., 2009, Acta Trop. 110: 187-199). En Bolivia, en Colombia y en Perú se demostró su domiciliación y se ha llamado la atención sobre su potencialidad como vector de la ECh (Dujardin et al., 1998, Ann Trop Med Parasitol. 92: 219-228; Wolff & Castillo, 2002, Mem Inst Oswaldo Cruz. 97: 297-300; Marín et al., 2007, Cad Saúde Pública. 23: 2235-2238). En Colombia, este triatomino ha sido encontrado naturalmente infectado por T. cruzi y es el segundo reduvideo mas capturado dentro de las viviendas (Wolff & Castillo, 2002, Op.cit.).

En Venezuela, P. rufotuberculatus no es muy común. Sin embargo, se ha reportado en los estados Aragua, Carabobo, Cojedes, Distrito Federal, Falcón, Guárico, Lara, Miranda, Monagas, Portuguesa, Sucre, Táchira, Trujillo, Yaracuy, Zulia, Delta Amacuro y Amazonas (Reyes-Lugo et al., 2006, Braz. J. Biol. 66: 443-446).

Dos machos adultos de P. rufotuberculatus fueron capturados posados en las paredes de los dormitorios de dos casas entre las 10 y 12 p.m., entre los meses de mayo 2001 y abril 2002 en las tierras altas del Estado Miranda, en el pueblo de El Hatillo a 25 Km al sureste de Caracas, en la misma región donde se reportó por primera vez la colonización de ambientes domésticos por P. geniculatus (Latreille, 1811) (Reyes-Lugo & Rodríguez-Acosta, 2000, Trans. R. Soc. Trop. Med. Hyg. 94: 508). Esta región se ubica en lo que era hasta hace poco la transición de un bosque nublado a una altura de 1.000 a 1.300 m (Ewel et al., 1976, Zonas de Vida de Venezuela. Min. Agric. Cría. Caracas), pero que ha sido modificado por áreas de construcción de urbanizaciones y carreteras (Reyes-Lugo et al., 2006, Op.cit.). En Venezuela P. rufotuberculatus se encontró por primera vez naturalmente infectado con T. cruzi en el estado Yaracuy (Torrealba et al., 1985, En: Factores biológicos y ecológicos en la enfermedad de Chagas, Venezuela. Eds: Carcavallo RU, Rabinovich JE, Tonn RJ. OPS-ECO/MSAS-SNCh, Buenos Aires) y en 2008 se reporta el hallazgo de huevos y la presencia de adultos infectados dentro de viviendas en el municipio Andrés Eloy Blanco del estado Lara (Traviezo- Valles et al. 2008, Bol. Mal. Salud Amb. 48: 99-101).

La identificación de los especímenes capturados se realizó utilizando la clave de la familia Triatominae (Ramírez-Pérez, 1985, Chipos de Venezuela. Min. San. Asist. Soc. Caracas, Venezuela). Estos ejemplares midieron en promedio 26 mm y pesaron 0,25 gr. Morfológicamente se evidenció el proceso escutelar redondeado, corto y truncado apicalmente y no alongado, la juga roma, los tubérculos del lóbulo anterior del pronoto rojizos, presentando en los segmentos del conexivo puntos oscuros centrales (Bérenger & Blanchet, 2007. Mem Inst Oswaldo Cruz, 102: 733-736).

En el contenido intestinal de los ejemplares examinados, se evidenciaron formas tripomastigotas compatibles con T. cruzi. El aislado proveniente de P. rufotuberculatus (Pr) se confirma biológicamente como T. cruzi por sus características tales como la capacidad de infección en modelos animales a partir de sangre y heces de triatominos, con producción de parasitemia y recuperación a través de xenodiagnóstico secundario siguiendo los parámetros de Barretto (Barretto, 1979, Epidemiologia. En: Trypanosoma cruzi e Doença de Chagas. Eds: Brener Z. & Andrade Z.,Guanabara- Koogan, Brasil). El crecimiento del aislado en medio LIT mostró un pico máximo de crecimiento a los 14 días de cultivo con 1,74 x 108 epimastigotes/mL. En el modelo murino la infección con este aislado estuvo caracterizado por un periodo prepatente de 14 días, un periodo patente de 38 días y un pico de parasitemia a los 33 días con 158.613 parásitos/mL y 0% de mortalidad al día 60 post-infección.

Otro parámetro biológico estudiado fue la infección en triatominos. Para ello, un grupo de 18 ninfas de 3er y 4to estadio de R. prolixus fue alimentado artificialmente con sangre de conejo desfribinada a la cual se le adicionaron 106 epimastigotes/ mL del aislado. Los insectos fueron pesados antes y después de alimentarlos. Después de 30 días fueron alimentados nuevamente con sangre de conejo sano desfribinada. Se realizó contaje diferencial de epimastigotes y tripomastigotes en cámara de Neubauer. Los resultados muestran que el aislado Pr colonizó eficientemente el tracto digestivo de los triatominos infectados, obteniéndose un número más alto de parásitos en el intestino en comparación con el número de flagelados ingeridos. El 73,3 % de R. prolixus en estudio fueron infectados por este aislado obteniéndose una baja mortalidad de estos insectos (3/18). Así mismo, se evidenció en los triatominos infectados el fenómeno de diferenciación con 30,6 % de metaciclogénesis, mientras que el mismo fenómeno realizado in vitro con medio TAU-3AAG (Contreras et al., 1985. Mol. Biochem. Parasitol. 16: 315-327) ocurrió en una proporción de 25,5%, lo que podría tener importantes implicaciones biológicas tanto en la virulencia como en la patogenicidad de este aislado.

Adicionalmente, la presencia de ADN de micírculo de kinetoplasto de T. cruzi en las heces de los dos ejemplares se demostró mediante la reacción en cadena de la polimerasa (PCR) (Fig. 1). Para extraer el ADN se lisaron las células mezclando 100 μL de heces de los P. rufotuberculatus con 100 μL de DNAzol (Invitrogen, U.S.A.) y se guardaron a -20°C. La extracción se realizó según instrucciones del fabricante. Las reacciones fueron dirigidas a amplificar el fragmento de 330 pb del ADN del cinetoplasto. Se tomaron 5 μL del ADN obtenido de las heces y se colocaron en la mezcla de reacción que contenía 0,2 mM de cada dNTP, 5 uM de cebadores S35 (5’-AAATAATGTACGAGGGGTGAGATGCATG) y S36 (5’-GGGTTCGATTGGGGTTGGTG), 1,25 U de Taq Polimerasa, 5 uL de tampón 10 X de la Taq polimerasa y 3,5 mM MgCl2. La amplificación se llevó a cabo de la siguiente manera: un ciclo de desnaturalización de 5 min a 95ºC; 28 ciclos a 95ºC, 1 min, 60ºC, 1 min, 72ºC, 1 min; con una extensión final a 72ºC por 5 min (Avila et al., 1993, J. Clin. Microbiol. 31: 2421-2426).

Es posible que los dos ejemplares de P. rufotuberculatus capturados en el intradomicilio, hayan sido atraídos por la luz de las viviendas porque, a pesar de la búsqueda extensiva que se practicó en la misma, no se encontraron huevos ni ninfas que evidenciaran colonización. Sin embargo, su incursión en las casas señala que esta especie silvestre podría estar en esta área en proceso de dispersión, penetración y domiciliación. Así mismo, la infección con T. cruzi en ambos ejemplares destaca la posibilidad de transmisión del parásito al ser humano y animales domésticos evidenciando la posibilidad de este triatomino como vector de la Enfermedad de Chagas. Se recomienda una cuidadosa actividad de vigilancia entomo-epidemiológica ya que en Venezuela muchos aspectos de la biología y ecología de este triatomino no se conocen.

AGRADECIMIENTOS

Agradecemos a la Sra. Ana Avilan por su colaboración en la captura de los ejemplares. Este trabajo recibió financiamiento de la Sección de Inmunología, Instituto de Medicina Tropical, de FONACIT, Proyecto Misión Ciencia G-2007001442-2, de la Sección de Entomología Medica, Instituto de Medicina Tropical, UCV y del Proyecto Control de Vectores, Fundación UCV.