INTRODUCCIÓN
En la era contemporánea de la educación, el trabajo colaborativo entre docentes ha surgido como un componente esencial para promover la excelencia pedagógica y el desarrollo integral de los estudiantes. La naturaleza interdisciplinaria y multifacética de la enseñanza y el aprendizaje requieren cada vez más de la colaboración entre educadores, quienes, al combinar sus conocimientos, habilidades y experiencias, pueden ofrecer un ambiente educativo más enriquecedor y efectivo. En este marco, Agustín et al., (2022) manifiestan que “actualmente la enseñanza a través de herramientas digitales va en aumento en las instituciones educativas, a partir de los tiempos de pandemia y el confinamiento a nivel mundial” (p. 669). De igual forma, Betancourt y Cadena (2022) alegan que “a pesar de tener una planeación definida se da un giro radical, consecuencia del COVID-19, situación para la que nadie estaba preparado, y menos aún, el sector educativo” (p. 14). Desde las perspectivas de González et al. (2022) se precisa lo siguiente:
Dado que, la humanidad necesita adaptarse a los cambios sociales emergentes, a raíz de diversos factores adversos que ha de enfrentar, como el de la pandemia, provoca en el ser humano la adopción de herramientas tecnológicas para dar continuidad a las actividades que realice. (p. 28)
En este contexto, las herramientas digitales emergen como catalizadores poderosos que transforman la manera en la cual los docentes colaboran, comunican, planifican y ejecutan sus prácticas educativas. Por ello, Cruz (2018) manifiesta que, actualmente, la sociedad emplea nuevas estrategias pedagógicas que superan las tradicionales y conducen al individuo a sumergirse en el mundo de la interactividad virtual. Delgado et al. (2022) expresan que a medida que el tiempo transcurre, cambia también la mentalidad de las personas en cuanto a lo político, económico y educativo, siendo este último un factor enfocado en la conectividad y el humanismo. Por su parte, García et al. (2014) declara que “las tecnologías digitales ofrecen nuevas oportunidades para el aprendizaje en una sociedad cada vez más conectada, en la cual aprender a trabajar con otros y colaborar se convierte en una competencia trascendental” (p. 65).
Por tanto, el advenimiento de la tecnología digital ha revolucionado profundamente la educación, abriendo un abanico de posibilidades para el intercambio de información, la colaboración en tiempo real y la creación de comunidades de aprendizaje más dinámicas y conectadas. Ahora más que nunca, los docentes tienen acceso a una amplia gama de herramientas digitales diseñadas, específicamente, para mejorar la eficiencia y la efectividad del trabajo colaborativo en entornos educativos. Según Duque y Acero (2022) “se debe llevar a cabo una educación que considere recursos para que los participantes puedan hacer uso con facilidades de hora y lugar, fomentando así el uso de la tecnología en la enseñanza-aprendizaje” (p. 1101). Para García et al. (2012) el docente debe desarrollar competencias para el uso apropiado de las redes en pro de lograr la comunicación y cooperación con sus colegas. Esto les permitirá compartir saberes y experiencias en pro de mejorar sus procesos pedagógicos dentro del entorno educativo donde se desenvuelven.
La visión anterior es cónsona con el aporte de Mora y Hooper (2016) quienes expresan que “el trabajo colaborativo en ambientes virtuales de aprendizaje adquiere gran relevancia en momentos en que la tecnología se utiliza de manera intensa”. Asimismo, para los aprendices constituye una vivencia significativa, tal como lo demuestran Soto y Torres (2016) en su trabajo, donde evidenciaron, por parte de estudiantes de licenciatura en Redes y Servicios de Cómputo, una “aceptación favorable hacia el trabajo colaborativo mediante el uso de las TIC como parte integral de su formación profesional”. Barcos y Santos (2022) expresan que cada estudiante es responsable de su propio aprendizaje. También Morales (2013) argumenta que actualmente la enseñanza no se sustenta en la transmisión de conocimientos, sino en el desarrollo de competencias docentes que contribuyan a la formación para la vida, propiciando en el estudiante vivencias relevantes en pro de un uso crítico de las tecnologías.
Cabe destacar que la importancia de las herramientas radica en su capacidad para superar las barreras de tiempo y espacio que tradicionalmente han limitado la colaboración entre docentes y estudiantes. Para Molinero y Chávez (2019), “en la actualidad, hablar de herramientas tecnológicas ya no es nada nuevo. El desarrollo de aplicaciones digitales ha adoptado un ritmo trepidante” (p. 4). Con la ayuda de plataformas de comunicación en línea, como el correo electrónico, los mensajes instantáneos y las videoconferencias, los educadores pueden conectarse y colaborar de manera instantánea, independientemente de su ubicación geográfica. Esto facilita la coordinación de actividades, la planificación de lecciones y la resolución de problemas de manera más eficiente y efectiva.
Además de mejorar la comunicación y la coordinación entre docentes, las herramientas digitales también desempeñan un papel crucial en la creación y el intercambio de recursos educativos. Plataformas de almacenamiento en la nube, como Google Drive o Dropbox, permiten a los educadores compartir fácilmente documentos, presentaciones, videos y otros materiales didácticos con colegas, enriqueciendo así el proceso de enseñanza y aprendizaje con una variedad de recursos.
De igual manera, los docentes al poseer conocimientos sobre el uso apropiado de estos recursos en sus praxis pueden enfrentarse a diversos retos y superarlos mediante una formación constante. En este particular, Rosario (2008) argumenta lo que sigue:
Hoy día se convive con el gran desafió que representa el uso de estas TIC en ambientes educativos por ello la necesidad de preparar y actualizar al personal docente de nuestro sector educativo (escuelas, colegios, tecnológicos, universidades, e institutos educacionales) para soportar el reto que implica su implementación. (p. 131)
También Piñón et al. (2022) sugieren que “los docentes tienen el desafío de responder a las exigencias de la Web” (p. 17). Por su parte, Rosario (2008) expresa que “la Web es una de las herramientas de estas tecnologías que inducen a implementar cambios importantes en el proceso de enseñanza aprendizaje, específicamente, en el desarrollo de trabajos colaborativos” (p. 131).
Otro aspecto es la capacidad de las herramientas digitales para la retroalimentación y la evaluación entre docentes. A través de plataformas de revisión y retroalimentación en línea, como Google Docs o Microsoft Word, los educadores pueden proporcionar comentarios constructivos sobre el trabajo de sus colegas, fomentando la mejora continua y el intercambio de mejores prácticas en la comunidad educativa.
Por último, cabe acotar que las herramientas digitales no solo mejoran la eficiencia y la efectividad del trabajo colaborativo entre docentes, sino también enriquecen la experiencia de la enseñanza y el aprendizaje en general, promoviendo un ambiente educativo más dinámico, participativo y centrado en el estudiante. En consecuencia, las herramientas digitales se convierten en aliados indispensables en el camino hacia una educación de calidad y equitativa para todos.
En resumen, las herramientas digitales son fundamentales para el trabajo colaborativo docente en la era moderna, ya que facilitan la comunicación, la colaboración en tiempo real, el intercambio de recursos, la planificación compartida, la retroalimentación efectiva y la personalización del aprendizaje. Al aprovechar estas herramientas de manera efectiva, los docentes pueden mejorar la calidad de la educación, promover el compromiso de los estudiantes y preparar a la próxima generación para enfrentar los desafíos del mundo digital en constante cambio.
Por consiguiente, el presente trabajo investigativo se planteó como objetivo: analizar las herramientas digitales y su importancia en el trabajo colaborativo docente, con el fin de precisar los aspectos relevantes a considerar para el alcance de una didáctica innovadora dentro del quehacer educativo.
MÉTODO
Para la metodología, en principio, se realizó una revisión exhaustiva de la literatura existente sobre el trabajo colaborativo docente y el uso de herramientas digitales en el contexto educativo. En esta fase, se identificaron estudios previos y teorías relevantes que enriquecieron el estudio. Además, se identificó el diseño de la Investigación, cuyo enfoque fue cuantitativo con un nivel descriptivo. Para llevarlo a cabo, se empleó la encuesta como técnica y el cuestionario como instrumento.
En cuanto a la muestra, se seleccionaron cinco docentes con las siguientes características: innovadores, que contaran con un teléfono inteligente o computadora, en permanente capacitación y pertenecientes a diversos niveles educativos.
Finalmente, se analizaron los datos recopilados, utilizando técnicas estadísticas con sus respectivas interpretaciones cualitativas y, se resumieron los hallazgos principales, destacando su relevancia para el campo del trabajo colaborativo docente y la integración de herramientas digitales en la educación.
RESULTADOS
Los resultados mostrados a continuación constituyen una síntesis de las opiniones emitidas por los 100 docentes, de los distintos niveles educativos, en cuanto a sus experiencias con el uso de las de herramientas digitales en su trabajo colaborativo.
Tabla 1 Frecuencia de uso de las herramientas digitales y percepción docente.
Herramienta Digital | Frecuencia de Uso (N=100) | Percepción Positiva (%) |
---|---|---|
Plataformas de Mensajería | 70 | 55 |
Google Drive | 80 | 80 |
Microsoft Teams | 60 | 60 |
Google Docs | 85 | 85 |
Plataformas de Mensajería | 70 | 55 |
Elaboración: Los autores.
Tal como se muestra en la tabla 1, el correo electrónico es la herramienta digital más utilizada entre los docentes encuestados, con el 90% reportando su uso. Además, el 85% de los encuestados tiene una percepción positiva de esta herramienta, lo que sugiere que es ampliamente aceptada y valorada en el trabajo colaborativo.
En cuanto a las plataformas de mensajería, aunque utilizadas por el 70% de los encuestados, las plataformas de mensajería tienen una percepción menor en comparación con el correo electrónico, con el 55% reportando una percepción positiva. Esto podría indicar que, aunque ampliamente utilizadas, algunas personas pueden encontrar limitaciones en su funcionalidad para la colaboración. Google Drive es otra herramienta digital popular, con el 80% de los encuestados informando su uso.
Sin embargo, a diferencia de las plataformas de mensajería, el 80% de los encuestados tienen una percepción positiva de Google Drive, lo que sugiere una alta satisfacción con esta herramienta para la colaboración y el intercambio de recursos. Por otro lado, Microsoft Teams tiene una percepción ligeramente inferior de 60% en comparación con otras herramientas como Google Drive y Google Docs, con el 60% reportando una percepción positiva. Finalmente, Google Docs, es una de las herramientas digitales más populares y mejor valoradas entre los docentes encuestados, con el 85% informando su uso y el 85% teniendo una percepción positiva. Esto sugiere que Google Docs es ampliamente considerado como una herramienta efectiva para la colaboración en la creación y edición de documentos en tiempo real.
Tabla 2 Frecuencia de uso de herramientas digitales por nivel educativo.
Herramienta Digital | Uso en Primaria (%) | Uso en Secundaria (%) | Uso en Universidad (%) |
---|---|---|---|
Correo Electrónico | 80 | 90 | 85 |
Plataformas de mensajería | 50 | 60 | 55 |
Google Drive | 60 | 80 | 75 |
Microsoft Teams | 50 | 60 | 55 |
Google Docs | 75 | 85 | 80 |
Elaboración: Los autores.
La tabla 2 indica que el correo electrónico es usado en un 80% en el nivel de primaria, 90% en el nivel de secundaria y 85% en el universitario. Por otro lado, en relación con las plataformas de mensajería, estas son usadas en un 50% en primaria, 60% en secundaria y 55% en la universidad. Con respecto a Google Drive, se emplea en un 60% en primaria, un 80% en secundaria y 75% en universidad. En relación a Microsoft Teams, se usa en primaria en un 50%, en secundaria en un 60% y en universidad en un 55%. Por último, Google Docs, es una herramienta empleada en primaria en un 75%, en secundaria en un 85% y en universidad en un 80%.
Tabla 3 Percepción de la efectividad de herramientas digitales por experiencia docente.
Herramienta Digital | Uso en Primaria (%) | Uso en Secundaria (%) | Uso en Universidad (%) |
---|---|---|---|
Correo Electrónico | 80 | 85 | 90 |
Plataformas de mensajerías | 50 | 60 | 80 |
Google Drive | 70 | 75 | 80 |
Microsoft Teams | 55 | 60 | 65 |
Google Docs | 75 | 80 | 85 |
Elaboración: Los autores.
La tabla 3 señala que el correo electrónico fue efectivo en un 80% en el nivel de primaria, 85% en el nivel de secundaria y 90% en el universitario. Por su parte, las plataformas de mensajería fueron efectivas un 50% en primaria, 60% en secundaria y 80% en la universidad. En cuanto a Google Drive, fue efectivo en un 70% en primaria, en un 75% en secundaria y en un 85% en universidad. Con relación a Microsoft Teams fue efectivo en primaria en un 55%, en secundaria en un 60% y en universidad en un 65%. Finalmente, Google Docs fue una herramienta efectiva en primaria en un 75%, en secundaria en un 80% y en universidad en un 85%.
DISCUSIÓN
Los resultados de la tabla 1 demostraron que las plataformas de mensajería y el Microsoft Teams fueron las herramientas menos empleadas y estimadas poco efectivas por parte de los docentes de todos los niveles. Las más usadas y consideradas positivas por la mayoría de los docentes de todos los niveles fueron el correo electrónico, Google Drive y Google Docs.
Considerando los resultados de la tabla 2, se demostró la frecuencia de uso de herramientas digitales en el trabajo colaborativo docente, la cual fue desglosada por nivel educativo. Se observa que el correo electrónico es ampliamente utilizado en todos los niveles educativos, con una ligera variación en la frecuencia de uso entre los diferentes niveles. Las plataformas de mensajerías y el Microsoft Teams son los menos usados en todos los niveles. Mientras que Google Drive y Google Docs también son populares en todos los niveles, aunque su uso tiende a ser ligeramente más bajo en primaria en comparación con secundaria y universidad.
En lo referente a la tabla 3, se presenta la percepción de la efectividad de las herramientas digitales en el trabajo colaborativo docente. Según sus experiencias, se observó que, en general, los docentes con más experiencia y pertenecientes a los niveles de secundaria y universitaria tienden a percibir las herramientas digitales como más efectivas en comparación con aquellos con menos experiencia y responsables del nivel de primaria. Esta tendencia se observó en todas las herramientas digitales analizadas, incluyendo el correo electrónico, las plataformas de mensajerías, Google Drive, Microsoft Teams y Google Docs.
En atención a los resultados descritos, se podría concluir que la variabilidad en el uso de herramientas digitales entre los diferentes niveles educativos podría atribuirse a varios factores, como la infraestructura tecnológica disponible en cada escuela, las políticas institucionales, las preferencias personales de los docentes y las necesidades específicas de la enseñanza y el aprendizaje de cada nivel educativo.
Lo anterior constituye un llamado de atención a los directivos de las instituciones educativas, por cuanto su interés debe enfocarse en ofrecer formación y apoyo específicos para el uso efectivo de herramientas digitales en el trabajo colaborativo docente, según los contextos de cada nivel educativo. Los programas de desarrollo profesional deberían incluir oportunidades de capacitación en el uso de herramientas digitales y de estrategias pedagógicas para abordar las diferencias en la adopción y la percepción de estas herramientas en los diferentes niveles educativos.
La experiencia docente ha desempeñado un papel crucial en la percepción de la efectividad de las herramientas digitales dentro del trabajo colaborativo, puesto que los docentes con más experiencia demostraron poseer habilidades y conocimientos más desarrollados, lo cual les permitió aprovechar al máximo el potencial de los recursos empleados, siendo más conscientes de sus beneficios en comparación con aquellos con menos experiencia.
Los resultados también subrayaron la importancia de ofrecer apoyo a los docentes menos experimentados, por cuanto esto contribuyó a fomentar una mayor adopción y apreciación de las herramientas digitales en el trabajo colaborativo. Cuando se desarrollan programas de compartir saberes entre los colegas de distintas instituciones, se proporciona un espacio para compartir experiencias, explorar nuevas estrategias y resolver los desafíos relacionados con la integración de tecnología en la práctica docente. Esto puede lograrse mediante eventos pedagógicos como: congresos, jornadas educativas, entre otros.
Vale resaltar que, si bien los datos presentados ofrecen una visión general sobre el uso y la percepción de herramientas digitales en el trabajo colaborativo docente, es importante reconocer que existen desafíos y oportunidades únicas asociadas con la integración de tecnología en la educación. Los desafíos pueden incluir la resistencia al cambio, la brecha digital y la necesidad de equilibrar el uso de herramientas digitales con enfoques pedagógicos centrados en el estudiante. Al mismo tiempo, las herramientas digitales ofrecen oportunidades sin precedentes para mejorar la colaboración, la comunicación y el acceso a recursos educativos en entornos diversos y en constante evolución.
En definitiva, gracias a los hallazgos encontrados, se puede deducir que el uso y la percepción de las herramientas digitales en el trabajo colaborativo docente, pueden estar influenciados por factores como el nivel educativo y la experiencia docente. Esto conduce a destacar la importancia de considerar las necesidades y preferencias de los docentes al seleccionar y promover el uso de herramientas digitales en el ámbito educativo, ya que esto facilitaría su desempeño innovador dentro del sector educativo.
CONCLUSIONES
Luego de analizados los resultados, se puede afirmar que las herramientas digitales juegan un rol clave en el trabajo cooperativo docente, dentro de la era digital moderna.
Las herramientas digitales tales como: el correo electrónico, las plataformas de mensajería y los espacios de trabajo colaborativo en línea permitieron una comunicación rápida y efectiva entre los miembros del equipo docente. Esto fue crucial para coordinar horarios, discutir ideas y compartir recursos.
Las herramientas de colaboración en línea, como Google Docs y Microsoft Teams permitieron que los docentes trabajaran juntos en documentos, presentaciones o proyectos en tiempo real, independientemente de su ubicación geográfica.
Mediante el recurso Google Drive, los docentes pudieron compartir fácilmente documentos, presentaciones, videos y otros recursos educativos con colegas, lo que facilitó la colaboración y el intercambio de ideas.
Las herramientas digitales pudieron simplificar el proceso de revisión y retroalimentación entre colegas. Por ejemplo, los comentarios fueron proporcionados en tiempo real en documentos compartidos, o a través de herramientas específicas de retroalimentación como el correo y Google Docs.
Algunas herramientas digitales fueron diseñadas para fomentar la participación activa de los estudiantes en el proceso educativo, permitiendo que trabajaran en proyectos colaborativos, presentaciones en línea o discusiones en foros virtuales. Esto pudo enriquecer la experiencia de aprendizaje y promover un ambiente colaborativo en el aula.
Ante este panorama, se puede aseverar que las herramientas digitales han sido esenciales para facilitar el trabajo colaborativo entre los docentes, permitiendo una comunicación eficiente, un intercambio de recursos, una planificación compartida, una retroalimentación efectiva y una participación de los estudiantes en el proceso educativo. En la presente investigación estas herramientas, no solo contribuyen a mejorar la eficiencia y la productividad del equipo docente, sino también a enriquecer la experiencia de la enseñanza y el aprendizaje en general.
Los resultados mostraron variedad en el uso de herramientas digitales entre los docentes quienes, mediante el correo electrónico, Google Drive, Google Docs y Microsoft Teams pudieron comunicarse y colaborarse entre sí. Esta diversidad reflejó la necesidad de adaptarse a las preferencias individuales de cada docente y a las demandas específicas de cada contexto y nivel educativo.
A pesar de las diferencias en el uso de las herramientas digitales, existe una percepción generalizada de su efectividad en el trabajo colaborativo docente. Esta percepción positiva destaca el valor percibido de las herramientas digitales para mejorar la comunicación, la colaboración y el intercambio de recursos entre los educadores.
Los datos muestran que la experiencia docente está asociada con una mayor percepción de la efectividad de las herramientas digitales en el trabajo colaborativo. Los docentes con más experiencia tienden a apreciar mejor el potencial de estas herramientas y están más preparados para integrarlas de manera efectiva en su práctica pedagógica.
Si bien la percepción positiva de las herramientas digitales es evidente, también es crucial reconocer la importancia de la formación y el apoyo continuo para garantizar su uso efectivo. Los programas de desarrollo profesional y la ayuda mutua entre colegas pueden desempeñar un papel fundamental en el fortalecimiento de las habilidades digitales de los docentes y en la promoción de prácticas colaborativas innovadoras en el aula.
Cabe acotar que a medida que la tecnología continúa evolucionando, es probable que surjan nuevos desafíos y oportunidades en el uso de herramientas digitales en el trabajo colaborativo docente. Por tanto, es fundamental que los educadores y las instituciones educativas permanezcan abiertos a la innovación, la experimentación y el aprendizaje continuo para aprovechar al máximo el potencial de la tecnología en la mejora de la enseñanza y el aprendizaje.
En pocas palabras, las herramientas digitales desempeñan un papel cada vez más importante en el trabajo colaborativo docente, ofreciendo oportunidades para mejorar la eficiencia, la efectividad y la calidad de la educación. Sin embargo, su implementación exitosa requiere un enfoque integral que tenga en cuenta las necesidades individuales de los docentes, la importancia de la formación continua y la disposición a adaptarse a un entorno educativo en constante cambio.
Otro aspecto importante es la capacidad de las herramientas digitales para personalizar el aprendizaje y apoyar las necesidades individuales de los estudiantes. Con el uso de plataformas de aprendizaje adaptativo y herramientas de seguimiento del progreso del estudiante, los docentes pueden recopilar datos en tiempo real sobre el rendimiento y las preferencias de aprendizaje de cada estudiante, lo que les permite ofrecer intervenciones personalizadas y ajustar su enfoque pedagógico según las necesidades individuales de cada alumno.
Como recomendación, el autor del presente estudio sugiere llevar a cabo otras investigaciones donde se analice el impacto del uso de las redes sociales a nivel de primaria y qué otras herramientas tienden a ser más empleadas en dicho nivel. Asimismo, se sugiere realizar investigaciones sobre el uso educativo que los estudiantes hacen de las herramientas estudiadas aquí u otros recursos tecnológicos en los distintos niveles educativos.