INTRODUCCIÓN
Los procesos educativos han sufrido un giro hacia la educación virtual. Dentro de este contexto, las instituciones de educación superior tienen el desafío de participar en la formación de profesionales competentes. A nivel global, la educación ha experimentado un cambio hacia un modo de vida tecnológico y la interconexión digital, impulsado en gran medida por la pandemia.
La pandemia de Covid-19 ha destruido los cimientos de nuestra sociedad y por ende del proceso educativo. Las universidades no son ajenas a este proceso y por ello necesitan adaptar sus programas académicos a las necesidades actuales. Para ello, las instituciones a nivel universitario han comenzado a introducir plataformas y herramientas educativas virtuales (Zoom, Google Meet, etc.). Ante esta situación, vemos que tanto docentes como estudiantes no están preparados para estos cambios en el proceso de aprendizaje. Sin embargo, existe incertidumbre e insatisfacción estudiantil con las estrategias de enseñanza virtual utilizadas por los docentes. Se cree que los docentes utilizan estrategias y herramientas que se ofrecen en las clases presenciales y rara vez se adaptan al aprendizaje virtual, lo que limita el rendimiento académico de los estudiantes. (Padilla, 2018) intentó identificar algunos obstáculos que impiden una adecuada integración de las TIC en el proceso de enseñanza y aprendizaje. Existen los siguientes problemas: capacitación insuficiente de los docentes en el entorno virtual, apoyo institucional insuficiente para la enseñanza, apoyo institucional limitado y resistencia de los docentes al cambio. Se puede decir que estos problemas se han vuelto transversales en las universidades, y se puede agregar que el personal docente de las universidades muchas veces está dominado por grupos mayores de 50 años, que muchas veces tienen dificultades para adaptarse a la educación virtual.
La educación virtual es un modelo surgido de la educación a distancia donde el aprendizaje es facilitado por la tecnología utilizando plataformas y herramientas tecnológicas (Cruz y Rama, 2016). Para conceptualizar las actitudes en las que confiamos (Moran y Alvarado, 2018), sostienen que una actitud es una tendencia emocional que nos permitirá afrontar diferentes puntos del proceso de aprendizaje virtual de manera favorable o desfavorable.
El presente artículo aborda el impacto de la virtualidad educativa en estudiantes universitarios, centrándose en las actitudes hacia las actividades educativas virtuales. Es crucial abordar este tema debido a la rápida transición hacia la educación virtual, especialmente agravada por la pandemia. La relevancia radica en entender cómo esta transformación afecta a los estudiantes de sociología y, por extensión, a la calidad educativa y bienestar estudiantil.
METODOLOGÍA
Esta investigación utiliza métodos cuantitativos básicos (Concytec, 2018) y pretende obtener un conocimiento completo mediante la comprensión de los aspectos fundamentales de los fenómenos, los hechos observables y las relaciones que se establecen dentro de ellos. El diseño del estudio fue no experimental, descriptivo y transversal (Hernández et al., 2014).
El grupo de estudiantes estuvo conformado por estudiantes de cuarto y quinto año de la carrera de sociología, 62 estudiantes en total. A efectos de esta encuesta, la encuesta estará abierta a todos los estudiantes de estas titulaciones. Entonces necesitamos un censo. El estudio utilizó el mismo método de encuesta utilizado para medir estas dos variables. Esta tecnología se define como el uso de herramientas y procedimientos que posibilitan la búsqueda de información (Falcón & Herrera, 2005). El instrumento utilizado para realizar el estudio fue un cuestionario que incluía preguntas cerradas que incluían la aplicación del proceso de aprendizaje en la implementación y la recolección de información objetiva que permitió probar las hipótesis y realizar el estudio utilizando variables y operacionalización. Una última explicación. La validez se conceptualiza como "el grado en que un instrumento mide realmente la variable que mide" (Hernández S. 1997. Páginas, 243). Para validar el instrumento se utilizaron criterios de validez de contenido, entendido como "la medida en que el instrumento refleja el área específica de contenido que se mide" (Hernández, 1997). En este caso, la validez de contenido está determinada por el acuerdo general entre las dimensiones e indicadores considerados en la escala. Para confirmar la hipótesis de que el rango específico de variables corresponde exactamente al contenido del instrumento, la escala utiliza el método de evaluación de expertos, la confiabilidad se calcula mediante el método de consistencia interna y se utiliza el coeficiente de Cronbach; este método se aplicó a una muestra piloto de 27 estudiantes universitarios.
RESULTADOS Y DISCUSIÓN
Se identificó las dimensiones de la variable actitudes hacia la educación virtual.
Lo primero que analizamos es la percepción de utilidad de la educación virtual las actitudes frente a la educación virtual La tabla sobre la utilidad de la educación virtual entre los estudiantes de sociología revela una variedad de actitudes frente a esta modalidad. De los 62 estudiantes encuestados: Un reducido 14.5% muestra una aceptación positiva hacia la utilidad de la educación virtual. Estos estudiantes probablemente encuentran beneficios y valor en las actividades educativas virtuales para su aprendizaje. La mayoría, representando un 40.3%, mantiene una actitud de indiferencia. Para este grupo, la educación virtual puede percibirse como neutral, sin un impacto claramente positivo ni negativo en su experiencia educativa. Un notable 35.5% de los estudiantes manifiesta un rechazo hacia la utilidad de la educación virtual. Este segmento enfrenta desafíos o dificultades y podría no ver claramente los beneficios de las actividades educativas virtuales. Un pequeño pero significativo 9.7% expresa un "mucho rechazo", indicando una fuerte resistencia o descontento hacia la utilidad de la educación virtual. En resumen, existe una diversidad de perspectivas entre los estudiantes de sociología en cuanto a la utilidad de la educación virtual. Estas variaciones resaltan la necesidad de abordar las preocupaciones específicas de los estudiantes y trabajar en estrategias que mejoren la aceptación y la eficacia de la educación virtual en el contexto de esta carrera.
Tabla 1 Utilidad.
Nivel | f | % |
---|---|---|
Aceptación | 9 | 14.5 |
Indiferencia | 25 | 40.3 |
Rechazo | 22 | 35.5 |
Mucho rechazo | 6 | 9.7 |
Total | 62 | 100.0 |
Nota: datos obtenidos en base a la encuesta procesados en spss25.
La tabla sobre la motivación de los estudiantes hacia la educación virtual proporciona información detallada sobre las actitudes de los encuestados: El 12.9% de los estudiantes muestra una aceptación positiva en términos de motivación hacia las actividades educativas virtuales. Estos estudiantes probablemente encuentran aspectos motivadores y estimulantes en la modalidad virtual de aprendizaje. Más de un tercio de los encuestados, específicamente el 35.5%, presenta una actitud de indiferencia en cuanto a la motivación. Para este grupo, la educación virtual no genera un fuerte interés ni desinterés, lo que sugiere una neutralidad en su motivación. Un considerable 43.5% manifiesta un rechazo hacia la motivación en el contexto de la educación virtual. Este segmento de estudiantes podría experimentar desafíos para sentirse motivados o comprometidos en el entorno virtual. Un pequeño pero significativo 8.1% expresa "mucho rechazo", indicando una marcada resistencia o falta de motivación hacia las actividades educativas virtuales. En conjunto, estos resultados señalan la diversidad de actitudes y niveles de motivación de los estudiantes hacia la educación virtual. Estas variaciones subrayan la importancia de comprender y abordar las diferentes necesidades y percepciones de los estudiantes para mejorar la motivación en el entorno virtual.
Tabla 2 Motivación
Nivel | f | % |
---|---|---|
Aceptación | 8 | 12.9 |
Indiferencia | 22 | 35.5 |
Rechazo | 27 | 43.5 |
Mucho rechazo | 5 | 8.1 |
Total | 62 | 100.0 |
Nota: datos obtenidos en base a la encuesta procesados en spss25
La tabla sobre el "agrado" de los estudiantes hacia las actividades educativas virtuales proporciona perspectivas sobre cómo perciben y disfrutan las clases virtuales. Aquí está la narración basada en los datos: Un 11.3% de los estudiantes manifiesta aceptación y agrado hacia las actividades educativas virtuales. Este grupo puede encontrar satisfacción y disfrute en la modalidad virtual de enseñanza. El 29.0% muestra indiferencia en cuanto al agrado, lo que sugiere una neutralidad en su experiencia. Para este segmento, las clases virtuales no generan fuertes sentimientos positivos ni negativos. Un 38.7% expresa rechazo hacia el agrado en el contexto de la educación virtual. Estos estudiantes pueden experimentar incomodidad, desagrado o falta de interés en las sesiones de aprendizaje virtuales. Un 21.0% indica "mucho rechazo", evidenciando una marcada resistencia o descontento significativo hacia las actividades educativas virtuales. En conjunto, estos resultados resaltan las diferentes percepciones y niveles de agrado de los estudiantes hacia la educación virtual. La diversidad en estas actitudes destaca la importancia de abordar las preocupaciones específicas de los estudiantes para mejorar su experiencia y satisfacción en el entorno virtual.
Tabla 3 Agrado
Nivel | f | % |
---|---|---|
Aceptación | 7 | 11.3 |
Indiferencia | 18 | 29.0 |
Rechazo | 24 | 38.7 |
Mucho rechazo | 13 | 21.0 |
Total | 62 | 100.0 |
Nota: datos obtenidos en base a la encuesta procesados en spss25
La tabla sobre "ansiedad" refleja cómo los estudiantes experimentan niveles de ansiedad en relación con las actividades educativas virtuales. Aquí está la narración basada en los datos: Un 4.8% de los estudiantes manifiesta aceptación y experimenta bajos niveles de ansiedad en el contexto de las actividades educativas virtuales. Este grupo sugiere que la modalidad virtual no genera un impacto significativo en su nivel de ansiedad. El 35.5% muestra indiferencia en cuanto a la ansiedad, lo que indica una neutralidad en sus emociones. Estos estudiantes pueden experimentar niveles de ansiedad moderados o no tener una respuesta emocional particularmente fuerte frente a las actividades virtuales. Un 56.5% expresa rechazo hacia la ansiedad en el entorno de la educación virtual. Este grupo señala niveles significativos de ansiedad al participar en actividades educativas virtuales, lo que puede deberse a diversos factores, como la adaptación a nuevas tecnologías o las dinámicas de aprendizaje en línea. Solo un 3.2% indica "mucho rechazo", lo que sugiere un nivel extremadamente alto de ansiedad y resistencia hacia las actividades educativas virtuales. Estos resultados resaltan la variabilidad en la forma en que los estudiantes experimentan la ansiedad en el contexto virtual. Identificar las razones detrás de estos niveles de ansiedad puede ayudar a desarrollar estrategias y apoyos específicos para mejorar la experiencia de aprendizaje en línea.
Tabla 4 Ansiedad
Nivel | f | % |
---|---|---|
Aceptación | 3 | 4.8 |
Indiferencia | 22 | 35.5 |
Rechazo | 35 | 56.5 |
Mucho rechazo | 2 | 3.2 |
Total | 62 | 100.0 |
Nota: datos obtenidos en base a la encuesta procesados en spss25.
La tabla sobre "confianza" refleja cómo los estudiantes perciben la confianza en relación con las actividades educativas virtuales. Aquí está la narración basada en los datos: El 16.1% de los estudiantes muestra aceptación y tiene confianza en las actividades educativas virtuales. Este grupo sugiere que confían en la efectividad y utilidad de la educación virtual, sintiéndose seguros y satisfechos con esta modalidad. Un 43.5% muestra indiferencia en cuanto a la confianza, indicando una neutralidad en sus sentimientos. Estos estudiantes pueden tener niveles moderados de confianza o no experimentar una respuesta emocional particularmente fuerte en relación con las actividades virtuales. El 29.0% expresa rechazo hacia la confianza en el entorno de la educación virtual. Este grupo señala que no confían plenamente en la efectividad de las actividades virtuales, lo que puede deberse a diversas razones, como problemas técnicos, falta de interacción directa, entre otros. Un 11.3% indica "mucho rechazo", lo que sugiere un nivel extremadamente bajo de confianza y una falta significativa de fe en las actividades educativas virtuales. Estos resultados subrayan la diversidad de percepciones en torno a la confianza en el contexto virtual. Identificar las razones detrás de estos niveles de confianza puede ayudar a implementar mejoras y estrategias específicas para aumentar la confianza de los estudiantes en la educación virtual.
Tabla 5 Confianza
Nivel | f | % |
---|---|---|
Aceptación | 10 | 16.1 |
Indiferencia | 27 | 43.5 |
Rechazo | 18 | 29.0 |
Mucho rechazo | 7 | 11.3 |
Total | 62 | 100.0 |
Nota: datos obtenidos en base a la encuesta procesados en spss25.
Al analizar las actitudes de los estudiantes hacia las actividades educativas virtuales, se observa claramente que la percepción general es predominantemente negativa. El 43.5% de los estudiantes muestra una actitud de rechazo, mientras que un significativo 41.9% expresa indiferencia. Estos resultados indican que, desde la perspectiva de los estudiantes, la virtualidad de la enseñanza no ha sido percibida como particularmente útil ni ha generado un interés significativo.
En detalle, el grupo que muestra una actitud de "rechazo" sugiere que una proporción sustancial de estudiantes no ha encontrado beneficios significativos en las actividades educativas virtuales. Además, el grupo de "indiferencia" sugiere una falta de conexión emocional o interés hacia esta modalidad de enseñanza. La combinación de estos dos grupos que representan casi el 85.4% del total, indica una falta de aceptación generalizada de la educación virtual entre los estudiantes universitarios.
Estos hallazgos revelan que la transición a la educación virtual ha experimentado un nivel de resistencia y falta de entusiasmo entre la población estudiantil. La falta de motivación, curiosidad y agrado sugiere que la virtualidad no ha logrado atraer el interés necesario para que los estudiantes se involucren activamente en las sesiones de aprendizaje.
En conclusión, los resultados de la tabla 6 reflejan una percepción mayoritariamente desfavorable hacia las actividades educativas virtuales entre los estudiantes universitarios, indicando que la virtualidad de la enseñanza ha sido percibida como un cambio negativo en su experiencia educativa.
Tabla 6 Actitudes de los estudiantes hacia las actividades educativas virtuales.
Nivel | f | % |
---|---|---|
Aceptación | 3 | 4.8 |
Indiferencia | 26 | 41.9 |
Rechazo | 27 | 43.5 |
Mucho rechazo | 6 | 9.7 |
Total | 62 | 100.0 |
Nota: datos obtenidos en base a la encuesta procesados en spss25.
La transición a la educación virtual ha tenido un impacto negativo en los estudiantes universitarios. No obstante, aquellos estudiantes que reciben educación en línea supervisada por tutores, con un respaldo pedagógico y tecnológico adecuado, tienden a experimentar un aprendizaje en línea satisfactorio con bajos niveles de estrés y mantienen una actitud positiva hacia la virtualidad educativa. En contraste, en nuestro contexto de estudio, la transición a la educación virtual no ha venido acompañada de un proceso tecnológico y de apoyo académico similar, dejando prácticamente al estudiante sin dicho respaldo. (Hernández, et al. 2018).
Coincidimos con Lovón y Cisneros (2020), quienes examinaron los efectos de la educación virtual en la salud mental de estudiantes de la Pontificia Universidad Católica del Perú durante el aislamiento por la COVID-19. Su investigación dividió a los participantes en dos grupos: aquellos con recursos tecnológicos y aquellos sin tecnologías de calidad. Los resultados indican que ambos grupos experimentaron estrés, frustración académica y deserción universitaria. Estos hallazgos se asemejan a la experiencia de los estudiantes de nuestra investigación, cuyas actitudes hacia las actividades educativas virtuales son mayoritariamente de rechazo (43%) y de indiferencia (41.9%), sugiriendo que, según la percepción de los estudiantes, la virtualidad de la enseñanza no ha sido particularmente útil.
La percepción de que la virtualidad de la enseñanza ha tenido un impacto negativo en los estudiantes universitarios se fundamenta en la carencia de un adecuado respaldo tecnológico y académico en nuestro ámbito de estudio. Esta ausencia de apoyo puede haber contribuido a las actitudes mayoritariamente negativas de los estudiantes hacia las actividades educativas virtuales. el contexto específico de falta de apoyo tecnológico y académico parece haber influido significativamente en las actitudes negativas de los estudiantes hacia la educación virtual. La comparación con otros estudios refuerza la idea de que el soporte adecuado es crucial para el éxito y la aceptación de la educación en línea.
CONCLUSIONES
La investigación revela que la virtualidad de la enseñanza entre los estudiantes de sociología se percibe mayoritariamente de manera negativa. El 43.5% muestra rechazo, mientras que el 41.9% expresa indiferencia. Esto indica una falta de aceptación generalizada de la educación virtual en este grupo específico.
La ausencia de un proceso tecnológico y de soporte académico adecuado en el ámbito de estudio parece ser un factor determinante en la generación de actitudes negativas. Esta carencia ha contribuido significativamente a la percepción desfavorable de los estudiantes hacia las actividades educativas virtuales
Se observa una coincidencia con investigaciones previas que destacan la importancia del soporte tecnológico y académico en la educación virtual. Estudios similares muestran que cuando se cuenta con tutorías, acompañamiento adecuado y recursos tecnológicos, los estudiantes tienden a tener actitudes más positivas hacia la educación en línea.
La pandemia COVID-19 ha impulsado la transición a la educación virtual, pero la falta de preparación tanto de docentes como de estudiantes ha generado desafíos significativos. La resistencia al cambio, la falta de adaptación de estrategias pedagógicas y la carencia de apoyo tecnológico han impactado negativamente en la experiencia educativa.
La investigación apunta a la necesidad de implementar intervenciones específicas que aborden la falta de soporte tecnológico y académico. Estas podrían incluir programas de formación docente, mejora en las plataformas virtuales y estrategias pedagógicas adaptadas a la modalidad virtual para mejorar la aceptación y participación de los estudiantes.
Consideramos que los resultados sugieren que la percepción negativa hacia la educación virtual entre los estudiantes de sociología está directamente relacionada con la falta de un soporte integral. Mejorar este soporte tecnológico y académico podría ser clave para cambiar las actitudes y mejorar la experiencia de aprendizaje virtual en este contexto específico.