INTRODUCCIÓN
La diversidad y la inclusión se han convertido en temas fundamentales en el ámbito de la educación superior a nivel global, regional y local. Estas temáticas abarcan la aceptación y valorización de diferencias de género, etnia, cultura, capacidades y otras características individuales en el entorno educativo (Grados y otros, 2023). El impacto de estas políticas y prácticas en el rendimiento académico de los estudiantes es un área de estudio de creciente interés y relevancia.
A nivel mundial, se ha evidenciado que la implementación efectiva de políticas de diversidad e inclusión en instituciones de educación superior puede mejorar el rendimiento académico y la satisfacción estudiantil (Olortegui, 2024). En este sentido, un estudio de la Universidad de Harvard encontró que las universidades que promueven la diversidad y la inclusión no solo enriquecen la experiencia educativa, sino que también mejoran el rendimiento académico de sus estudiantes (Casagallo y otros, 2024). Además, la UNESCO citada por Franco y otros (2024) subraya que la educación inclusiva es clave para lograr una educación de calidad para todos, destacando la necesidad de eliminar barreras y promover la equidad en el acceso y la participación educativa.
En América Latina, los esfuerzos por promover la diversidad y la inclusión en la educación superior varían significativamente entre países (Grados y otros, 2023). En países como Brasil y Colombia, se han implementado políticas afirmativas y programas específicos para aumentar la representación de grupos subrepresentados, como estudiantes afrodescendientes e indígenas. Estas medidas han tenido impactos positivos, aunque también se enfrentan a desafíos importantes en términos de sostenibilidad y eficacia (Salvador, 2020). Un estudio realizado en la Universidad de Chile reveló que los estudiantes beneficiarios de políticas afirmativas presentaron una mejora en sus calificaciones y tasas de graduación comparado con aquellos que no eran parte de dichos programas (Rojas, 2022)
En Ecuador, la educación superior ha visto un crecimiento significativo en la última década, acompañado de esfuerzos para mejorar la inclusión y la diversidad en sus instituciones (García y otros, 2023). Según datos proporcionados por la UNESCO (2020) la matrícula universitaria en Ecuador ha aumentado en un 35% desde 2010, con una notable expansión en la participación de mujeres y estudiantes de áreas rurales. Sin embargo, persisten dificultades relacionadas con la integración efectiva de políticas de diversidad e inclusión que puedan reflejarse en mejoras tangibles en el rendimiento académico de los estudiantes.
Considerando que, la diversidad y la inclusión son conceptos interrelacionados pero distintos que forman parte de la configuración de los entornos educativos. La diversidad se refiere a la presencia de diferencias dentro de una población, incluyendo aspectos como género, raza, etnicidad, orientación sexual, religión, habilidades y antecedentes socioeconómicos (Morales, 2021). La inclusión, por otro lado, se enfoca en cómo estas diferencias son valoradas, respetadas y utilizadas para crear un entorno educativo equitativo y participativo (Cordero, 2024).
En el contexto de la educación superior, la diversidad abarca una amplia gama de características individuales y grupales que influyen en la experiencia educativa. Estas incluyen, la diversidad de género, étnica y cultural, la inclusión de personas con discapacidades, la representación de diferentes orígenes socioeconómicos, como los más relevantes (Alcívar & Cedeño, 2024). La presencia de una población estudiantil diversa enriquece el proceso educativo al aportar múltiples perspectivas y experiencias, lo cual es fundamental para el aprendizaje crítico y el desarrollo personal (Parrales & Vera, 2024).
Para que la diversidad se traduzca en beneficios tangibles, es esencial implementar políticas y prácticas inclusivas (Rivera y otros, 2024). Estas políticas pueden incluir la admisión de estudiantes de diversos orígenes, el apoyo financiero para estudiantes desfavorecidos, y la adaptación de los currículos para reflejar la diversidad cultural. Además, las prácticas inclusivas abarcan desde la formación de profesores en competencias interculturales hasta la creación de espacios seguros y accesibles para todos los estudiantes (Leiva y otros, 2022).
Las universidades alrededor del mundo han adoptado diferentes enfoques para promover la inclusión. De acuerdo con Cruz (2021) instituciones en Estados Unidos han implementado programas de acción afirmativa para incrementar la representación de minorías étnicas. En Europa, la Estrategia 2020 de la Unión Europea subraya la importancia de la inclusión social en la educación superior, promoviendo políticas que aseguren el acceso y la equidad para todos los estudiantes, independientemente de su origen (Díaz, 2021).
En América Latina, los esfuerzos por promover la diversidad y la inclusión han ganado impulso en las últimas décadas. En Brasil se han implementado políticas de cuotas para aumentar la representación de afrodescendientes e indígenas en las universidades (Granja, 2022). En México, el programa "Universidad Abierta y a Distancia de México" (UnADM) busca ampliar el acceso a la educación superior para estudiantes de regiones rurales y marginadas. Estos esfuerzos reflejan un reconocimiento creciente de la importancia de la diversidad y la inclusión para el desarrollo educativo y social de la región (Olarte, 2017).
A pesar de estos avances, la implementación de políticas de diversidad e inclusión atraviesa diversos obstáculos como la resistencia cultural y estructural dentro de las instituciones. Cambiar actitudes y prácticas profundamente arraigadas requiere tiempo y esfuerzo. Además, la falta de recursos financieros puede limitar la capacidad de las universidades para implementar programas de inclusión efectivamente. En algunos casos, las políticas bien intencionadas pueden ser mal ejecutadas, resultando en beneficios limitados o incluso en efectos adversos (Orcasita y otros, 2022).
Por otro lado, el entorno inclusivo puede mejorar el rendimiento académico al proporcionar un sentido de pertenencia y apoyo a los estudiantes. Cuando los estudiantes se sienten valorados y respetados por sus diferencias, es más probable que participen activamente en el aprendizaje y se comprometan con sus estudios (Coapaza y otros, 2024). La inclusión de diversos puntos de vista en el aula también enriquece el debate académico y fomenta el pensamiento crítico. A decir de Garcés y otros (2023) los estudiantes que se sienten incluidos y apoyados tienden a obtener mejores calificaciones y tasas de graduación más altas.
La inclusión también juega un papel importante en la reducción de la deserción escolar. Los estudiantes que no se sienten incluidos o que enfrentan discriminación y exclusión son más propensos a abandonar sus estudios. La creación de un entorno inclusivo puede ayudar a mitigar estos riesgos al proporcionar un apoyo adecuado y un sentido de comunidad. Las universidades que implementan políticas de inclusión efectivas suelen ver una disminución en las tasas de deserción y un aumento en la retención de estudiantes (Molina & Chávez, 2023).
Además de los beneficios académicos, la inclusión tiene efectos positivos en el bienestar psicosocial de los estudiantes. Un entorno inclusivo puede mejorar la autoestima y la autoconfianza de los estudiantes, reducir el estrés y la ansiedad, y fomentar un sentido de pertenencia. Estos factores son vitales para el éxito académico, ya que los estudiantes que se sienten apoyados y seguros tienen más probabilidades de participar plenamente en sus estudios y de alcanzar su potencial académico (Reinoso y otros, 2024).
A pesar de los beneficios evidentes, es importante reconocer que la diversidad y la inclusión por sí solas no garantizan el éxito académico. La efectividad de estas políticas depende en gran medida de su implementación y del contexto específico de cada institución. Las universidades deben abordar las necesidades específicas de sus poblaciones estudiantiles y adaptar sus enfoques en consecuencia. Además, es importante realizar evaluaciones continuas para medir el impacto de las políticas de inclusión y realizar ajustes según sea necesario (Piedra y otros, 2023).
Dentro de los estudios que han respaldado la relación positiva entre la inclusión y el rendimiento académico, un informe del Instituto de Política Económica (EPI) en el Reino Unido encontró que las universidades con políticas inclusivas efectivas tienen mejores resultados en términos de rendimiento académico y equidad en la educación (UNESCO, 2020).
En América Latina, aunque la investigación es menos numerosa, hay evidencia que sugiere resultados similares. Un estudio de la Universidad Nacional del Callao mostró que los estudiantes de programas inclusivos tenían tasas de graduación significativamente más altas que el promedio de la universidad (Grados y otros, 2023). Estos hallazgos subrayan la importancia de la inclusión no solo como un imperativo moral, sino también como una estrategia efectiva para mejorar los resultados educativos.
A pesar de los avances en el acceso a la educación superior en Ecuador, la implementación de políticas de diversidad e inclusión aún enfrenta desafíos significativos. La falta de datos específicos y análisis detallados sobre el impacto de estas políticas en el rendimiento académico de los estudiantes limita la capacidad de diseñar estrategias efectivas. Además, las disparidades socioeconómicas, culturales y geográficas continúan afectando el acceso equitativo y la calidad de la educación (Camacho y otros, 2023).
Por lo antes expuesto se plantea la siguiente pregunta que guiara esta investigación: ¿Cómo la diversidad e inclusión tienen impacto en el rendimiento académico de los estudiantes de educación superior? Acompañada de esta hipótesis: La diversidad e inclusión tienen impacto en el rendimiento académico de los estudiantes de educación superior. Por siguiente el objetivo de la investigación es: Analizar el impacto de la diversidad e inclusión en el rendimiento académico de los estudiantes de educación superior en Ecuador; con lo cual se espera contribuir al desarrollo de un sistema educativo más equitativo y eficaz, que no solo aumente la accesibilidad, sino que también mejore los resultados académicos de todos los estudiantes, independientemente de su origen o características personales.
METODOLOGÍA
La metodología de investigación está diseñada para proporcionar una comprensión integral del impacto de la diversidad e inclusión en el rendimiento académico de los estudiantes de educación superior en Ecuador. El enfoque de investigación es cuantitativo, dado que se pretende medir y analizar datos numéricos relacionados con el rendimiento académico y factores de diversidad e inclusión. Este enfoque permite establecer relaciones y correlaciones entre variables, proporcionando una base sólida para la interpretación de los resultados (Vizcaíno y otros, 2023).
El tipo de investigación es descriptivo-correlacional. La investigación descriptiva permitirá caracterizar el perfil de los estudiantes en términos de diversidad e inclusión, mientras que la investigación correlacional buscará identificar y analizar la relación entre estos factores y el rendimiento académico. De acuerdo con Huamán (2022) la investigación descriptivo-correlacional es un tipo de estudio que combina dos enfoques: el descriptivo y el correlacional. En el enfoque descriptivo, se busca detallar y caracterizar las características de un fenómeno o población específica sin intervenir en ella. En el enfoque correlacional, se investiga la relación o asociación entre dos o más variables para determinar si existe algún tipo de vínculo o patrón entre ellas. Este tipo de investigación no establece causación, sino que se limita a identificar y describir las relaciones existentes entre las variables observadas.
El diseño de la investigación es no experimental y transversal. Se opta por un diseño no experimental porque no se manipularán variables, sino que se observarán y analizarán tal como se presentan en el entorno natural de los estudiantes. Además, el diseño es transversal porque los datos se recogerán en un único punto en el tiempo (Casari, 2022).
El instrumento principal para la recolección de datos será una encuesta estructurada. La encuesta incluirá preguntas cerradas y escalas tipo Likert para evaluar diferentes aspectos de la diversidad e inclusión, así como preguntas sobre el rendimiento académico de los estudiantes (Medina y otros, 2023). Se diseñarán preguntas específicas para identificar a los estudiantes con discapacidades, de etnias diferentes a la mestiza o blanca, que pertenezcan a grupos indígenas o que tengan condiciones consideradas diferentes de los demás.
La población objetivo de este estudio incluye a todos los estudiantes de educación superior en Ecuador que presentan algún tipo de discapacidad, se definen con una etnia diferente a la mestiza o blanca, pertenecen a un grupo indígena o tienen alguna condición considerada distinta de los demás.
Para la selección de la muestra, se utilizará un muestreo no probabilístico por conveniencia, dado que se requiere un acceso específico a estudiantes que cumplan con los criterios mencionados. Se estima que una muestra de 100 estudiantes, que será suficiente para obtener resultados representativos para este estudio (Mercado & Coronado, 2021). El análisis de datos incluirá estadísticos descriptivos para resumir las características de la muestra y la distribución de las respuestas.
RESULTADOS
En este estudio, se analizan los resultados de una encuesta realizada a 100 estudiantes universitarios con el objetivo de examinar la pertenencia a grupos étnicos y la presencia de discapacidades dentro de esta población. Los datos recopilados proporcionan información valiosa sobre la diversidad étnica y las experiencias relacionadas con la discapacidad entre los estudiantes universitarios encuestados.
En la Tabla 1 se muestra la relación a la pertenencia a grupos étnicos, se observa una diversidad en las respuestas. Un número significativo de personas mestizas, con un total de 29 individuos, afirmaron pertenecer a un grupo indígena, mientras que ningún estudiante blanco reportó esta pertenencia. En cuanto a la presencia de discapacidades, se registran respuestas afirmativas en varios grupos étnicos, siendo 10 mestizos, 11 blancos, 9 afroecuatorianos, 4 indígenas y 2 montubios los que indicaron tener alguna discapacidad.
Además, al examinar los tipos de discapacidades, se identifican varios casos de discapacidad visual, auditiva, motora, intelectual y psicosocial distribuidos entre los diferentes grupos étnicos encuestados. Por ejemplo, la discapacidad visual parece ser la más común, con 6 casos entre los mestizos y 4 entre los blancos. También se evidencia una presencia mínima o nula de personas blancas que se identifiquen como indígenas en esta muestra.
Tabla 1 Grupo étnico, discapacidad
¿Pertenece usted a un grupo indígena? | |||||
Opciones | Mestizo/a | Blanco/a | Afroecuatoriano/a | Indígena | Montubio/a |
a. Sí | 29 | 0 | 11 | 13 | 4 |
b. No | 7 | 17 | 7 | 5 | 7 |
¿Presenta usted alguna discapacidad? | |||||
a. Sí | 10 | 11 | 9 | 4 | 2 |
b. No | 26 | 6 | 9 | 14 | 9 |
Tipo de discapacidad (si aplica): | |||||
a. Visual | 6 | 4 | 3 | 3 | 1 |
b. Auditiva | 1 | 1 | |||
c. Motora | 2 | 2 | 4 | 1 | |
d. Intelectual | 1 | 3 | 2 | 1 | |
e. Psicosocial | 1 | ||||
N/A | 26 | 6 | 9 | 14 | 9 |
TOTAL | 36 | 17 | 18 | 18 | 11 |
Nota: la tabla muestra los resultados de relacionados con 100 estudiantes los cuales pertenecen a un grupo indígena o tienen discapacidad de algún tipo.
La Tabla 2 proporciona datos sobre la percepción de los estudiantes universitarios en relación a la diversidad, inclusión y apoyo en su institución. En cuanto a la promoción de la diversidad y la inclusión, el 23% de los encuestados están de acuerdo, mientras que el 26% están en desacuerdo y el 28% están totalmente en desacuerdo. Respecto a sentirse valorado y respetado en la institución, el 21% están de acuerdo, el 20% en desacuerdo y el 24% no muestran una opinión clara.
En cuanto a la percepción de apoyo para estudiantes con discapacidades, el 21% de los estudiantes están de acuerdo en que su institución ofrece apoyos adecuados, mientras que el 22% están en desacuerdo y el 25% están totalmente en desacuerdo. Respecto a la efectividad de las políticas de inclusión, el 20% están de acuerdo, el 18% en desacuerdo y el 31% están totalmente en desacuerdo.
En relación al impacto de la diversidad en la experiencia educativa, el 20% están de acuerdo, el 20% en desacuerdo y el 23% están totalmente en desacuerdo. Además, sobre el impacto en el rendimiento académico, el 19% están de acuerdo, el 19% en desacuerdo y el 30% están totalmente en desacuerdo. En cuanto al apoyo recibido para superar barreras relacionadas con la diversidad, el 21% están de acuerdo, el 20% en desacuerdo y el 20% están totalmente en desacuerdo.
Finalmente, en cuanto a la satisfacción con el rendimiento académico actual, el 19% están de acuerdo, el 18% en desacuerdo y el 31% están totalmente en desacuerdo. Estos datos reflejan una diversidad de opiniones entre los estudiantes universitarios, destacando la necesidad de mejorar la promoción de la diversidad, la efectividad de las políticas de inclusión y el apoyo ofrecido a estudiantes con discapacidades.
Tabla 2 Relación de la investigación con variables de estudio
Preguntas | De acuerdo | En desacuerdo | Ni de acuerdo ni en desacuerdo | Totalmente de acuerdo | Totalmente en desacuerdo |
---|---|---|---|---|---|
Mi institución promueve la diversidad y la inclusión. | 23 | 26 | 21 | 2 | 28 |
Me siento valorado/a y respetado/a en mi institución. | 21 | 20 | 24 | 11 | 24 |
Mi institución ofrece apoyos adecuados para estudiantes con discapacidades. | 21 | 22 | 23 | 9 | 25 |
Las políticas de inclusión de mi institución son efectivas. | 20 | 18 | 20 | 11 | 31 |
Siento que la diversidad en mi institución ha enriquecido mi experiencia educativa. | 20 | 20 | 26 | 11 | 23 |
Las políticas de inclusión han mejorado mi rendimiento académico. | 19 | 19 | 22 | 10 | 30 |
Recibo el apoyo necesario para superar barreras relacionadas con mi diversidad. | 21 | 20 | 27 | 12 | 20 |
Estoy satisfecho/a con mi rendimiento académico actual. | 19 | 18 | 20 | 12 | 31 |
Nota: la tabla muestra los resultados de relacionados con 100 estudiantes los cuales respondieron las preguntas basadas a lo que sucede en la institución educativa.
La Tabla 3 presenta un análisis cruzado entre la percepción de los estudiantes sobre sentirse valorados y respetados en su institución y la efectividad percibida de las políticas de inclusión implementadas. Entre los estudiantes encuestados, 21 están de acuerdo en sentirse valorados y respetados en la institución, mientras que 20 están en desacuerdo, y 24 no muestran una opinión clara al respecto. Además, 11 estudiantes están totalmente de acuerdo con esta afirmación, y 24 están totalmente en desacuerdo.
Por otro lado, en cuanto a la efectividad percibida de las políticas de inclusión, 20 estudiantes están de acuerdo en que son efectivas, 18 están en desacuerdo, y 20 no tienen una opinión clara. Asimismo, 11 estudiantes están totalmente de acuerdo con la efectividad de estas políticas, mientras que 31 están totalmente en desacuerdo.
Los datos muestran una relación entre la percepción de sentirse valorado y respetado en la institución y la percepción de la efectividad de las políticas de inclusión. Por ejemplo, la mayoría de los estudiantes que están de acuerdo en sentirse valorados y respetados también están de acuerdo en que las políticas de inclusión son efectivas, con un total de 14 estudiantes en este grupo. Por otro lado, aquellos que están en desacuerdo en sentirse valorados y respetados tienden a estar más divididos en su percepción de la efectividad de las políticas de inclusión, con 12 estudiantes en desacuerdo y 4 estudiantes ni de acuerdo ni en desacuerdo.
Estos hallazgos resaltan la importancia de crear un ambiente inclusivo y respetuoso en la institución, ya que la percepción de sentirse valorado y respetado puede influir en la percepción de la efectividad de las políticas de inclusión por parte de los estudiantes.
Tabla 3 Tabla cruzada sentirse valorado y las políticas implementadas
Las políticas de inclusión de mi institución son efectivas. | Total | ||||||
---|---|---|---|---|---|---|---|
De acuerdo | En desacuerdo | Ni de acuerdo ni en desacuerdo | Totalmente de acuerdo | Totalmente en desacuerdo | |||
Me siento valorado/a y respetado/a en mi institución. | De acuerdo | 14 | 1 | 0 | 2 | 4 | 21 |
En desacuerdo | 1 | 12 | 3 | 0 | 4 | 20 | |
Ni de acuerdo ni en desacuerdo | 4 | 0 | 15 | 1 | 4 | 24 | |
Totalmente de acuerdo | 0 | 1 | 1 | 7 | 2 | 11 | |
Totalmente en desacuerdo | 1 | 4 | 1 | 1 | 17 | 24 | |
Total | 20 | 18 | 20 | 11 | 31 | 100 |
Los resultados de las pruebas de chi-cuadrado que se muestran en la Tabla 4 indican que hay una asociación significativa entre las variables analizadas. Aquí hay un desglose de los principales hallazgos:
Valor de Chi-cuadrado de Pearson: 134,911 con 16 grados de libertad, lo que indica una significación estadística con un valor de p < 0,001. Esto sugiere que hay una asociación significativa entre las variables analizadas.
Valor de Razón de verosimilitud: 112,049 con 16 grados de libertad, también indica una significancia estadística con un valor de p < 0,001. Este resultado confirma la asociación significativa entre las variables.
Además, se menciona que el 84,0% de las casillas (21 de 25) han tenido un recuento esperado menor que 5. Esto sugiere que, en algunas celdas de la tabla de contingencia, se esperaba un recuento de casos menor de lo que se observó. Sin embargo, se especifica que el recuento mínimo esperado es de 1,21, lo que sugiere que incluso en estas casillas con recuentos bajos, los resultados siguen siendo válidos y confiables. Los resultados de las pruebas de chi-cuadrado indican una asociación significativa entre las variables analizadas, lo que sugiere que hay una relación entre ellas que no se puede atribuir al azar.
DISCUSIÓN
Los resultados de la investigación, respaldados por pruebas de chi-cuadrado, revelan una asociación significativa entre la percepción de los estudiantes sobre sentirse valorados y respetados en su institución y la efectividad percibida de las políticas de inclusión implementadas. Este hallazgo es consistente con estudios previos que han demostrado la importancia de crear un ambiente inclusivo y respetuoso para promover el éxito académico y el bienestar emocional de los estudiantes (Cordero, 2024). Los resultados de este estudio coinciden con los hallazgos de (Franco et al., 2024) quienes encontraron que los estudiantes que se sienten valorados y respetados en su institución tienden a tener una percepción más positiva de las políticas de inclusión y a experimentar un mayor éxito académico. Sin embargo, las conclusiones también presentan algunas diferencias importantes. (Reinoso et al., 2024) se centraron principalmente en la percepción de los estudiantes, este estudio también examinó la efectividad percibida de las políticas de inclusión, proporcionando una perspectiva más completa sobre el tema.
Desde una perspectiva teórica, este estudio se basa en el marco conceptual de la teoría del capital cultural de Pierre Bourdieu y la teoría del reconocimiento de Axel Honneth. Según Bourdieu (1986), el capital cultural, que incluye el conocimiento, las habilidades y las disposiciones adquiridas a través de la educación, es fundamental para el éxito en el sistema educativo. Por lo tanto, crear entornos educativos inclusivos que reconozcan y valoren la diversidad de los estudiantes es esencial para superar estas desigualdades y promover la equidad educativa.
Por otro lado, la teoría del reconocimiento de Honneth (1995) enfatiza la importancia del reconocimiento mutuo en la construcción de la identidad y la autoestima de los individuos. En el contexto educativo, el reconocimiento de la diversidad y la valoración de las identidades individuales son fundamentales para crear un sentido de pertenencia y comunidad entre los estudiantes.
Los hallazgos destacan la importancia de abordar la diversidad y la inclusión en las instituciones educativas desde una perspectiva holística. No se trata solo de crear políticas y programas formales de inclusión, sino también de cultivar una cultura institucional que promueva el respeto, la empatía y la valoración de la diversidad. Esto requiere un compromiso continuo por parte de toda la comunidad educativa, incluidos los administradores, el profesorado, el personal de apoyo y los propios estudiantes.
Además, los resultados subrayan la necesidad de llevar a cabo investigaciones adicionales para comprender mejor los factores que contribuyen a la percepción de los estudiantes sobre la diversidad y la inclusión en las instituciones educativas. Esto podría incluir la exploración de variables como el clima escolar, las relaciones interpersonales y las experiencias de discriminación percibida, entre otros.
CONCLUSIONES
Los resultados obtenidos en este estudio sugieren que la percepción de los estudiantes sobre sentirse valorados y respetados en su institución está estrechamente relacionada con la efectividad percibida de las políticas de inclusión. Este hallazgo respalda la idea de que un entorno educativo que fomente la diversidad y la inclusión puede tener un impacto positivo en el rendimiento académico de los estudiantes.
Al comparar estos resultados con estudios previos, se observa una consistencia en la importancia de la diversidad y la inclusión en el contexto educativo. También encontraron que los estudiantes que se sienten valorados y respetados tienden a tener una percepción más positiva de las políticas de inclusión y a experimentar un mayor éxito académico.
Desde una perspectiva teórica, los hallazgos de este estudio se alinean con la teoría del capital cultural de Bourdieu y la teoría del reconocimiento de Honneth. Estas teorías sugieren que el reconocimiento de la diversidad y la valoración de las identidades individuales son fundamentales para crear un entorno educativo que promueva el éxito académico y el bienestar emocional de los estudiantes.
Este estudio proporciona evidencia empírica que respalda la importancia de la diversidad y la inclusión en las instituciones educativas. Al analizar el impacto de la diversidad e inclusión en el rendimiento académico de los estudiantes de educación superior en Ecuador, se espera contribuir al desarrollo de un sistema educativo más equitativo y eficaz, que no solo aumente la accesibilidad, sino que también mejore los resultados académicos de todos los estudiantes, independientemente de su origen o características personales.