INTRODUCCIÓN
El desarrollo sostenible se ha transformado en uno de los temas más importantes de la agenda empresarial. La responsabilidad social empresarial a menudo se confunde con hacer donaciones, pero ser socialmente responsable implica no solamente hacer el bien por el medio ambiente, la comunidad o la familia de los empleados, sino también comprometerse con un comportamiento ético en los negocios y un ejercicio transparente de la información. Las organizaciones han adoptado la responsabilidad social empresarial como un elemento clave de su estrategia. Se analiza la relación que existe entre la responsabilidad social y la toma de decisiones. Uno de los objetivos de esta nueva estrategia empresarial es que los directivos gestionen teniendo en cuenta las preferencias, los objetivos, intereses, valores e ilusiones de los diferentes sujetos que se ven afectados por las decisiones de la organización.
El concepto de RSE ha evolucionado a lo largo del tiempo, remontándose al siglo XIX con el movimiento cooperativo y las primeras formas de altruismo empresarial. Durante la segunda mitad del siglo XX, surgieron preocupaciones sobre el impacto social y ambiental, lo cual llevó a desarrollar un enfoque más sistemático y estructurado. Según Gogaladze Id et al. (2020), en el año 1990, la RSE comenzó a ganar más atención y aceptación a nivel mundial. A partir de 1980, se desarrollaron y fortalecieron acuerdos internacionales importantes, como el Protocolo de Montreal (1987) y el Protocolo de Kyoto (1997) (Yu et al., 2021). Estos antecedentes históricos son importantes para comprender su evolución y las oportunidades actuales. En este estudio se investiga el papel del trabajo colectivo para la protección del medio ambiente y el impacto de la educación ambiental; así como la investigación y la práctica del trabajo social en la conservación del medio ambiente (Wang et al., 2022). Para Sakshi et al. (2020), el comportamiento socialmente responsable de los empleados está influido por el liderazgo ético de las empresas, lo que aporta valiosa información para la responsabilidad social empresarial. La relación entre la política ambiental y las prácticas sostenibles indica que la preservación de recursos y energía influye de forma positiva en el rendimiento tanto ambiental como económico. La regulación ambiental también tiene un impacto en el empleo social en diferentes niveles de intensidad; la regulación tiene un efecto limitador a corto plazo, pero promotor a largo plazo sobre el empleo social.
En este contexto, Lutkovska y Kaletnik (2020) señalan que la difusión obligatoria de la responsabilidad social empresarial tiene un impacto directo en el fomento de la responsabilidad ambiental corporativa, lo cual resulta en una mejora en la gestión ambiental empresarial. Este enfoque implica analizar la gestión de la seguridad ambiental considerando tanto el sistema económico como el marco legal, con el propósito de fortalecer la seguridad ecológica para proteger los intereses nacionales y prevenir posibles amenazas.
Asimismo, Bai y Bai (2020) destacan la estrecha relación entre la política medioambiental y las acciones sostenibles, evidenciando que la conservación de recursos y energía no solo tiene un impacto positivo en la eficiencia ambiental, sino también en la eficiencia económica. Esta conexión resalta la importancia de implementar prácticas sostenibles que no solo beneficien al medio ambiente, sino que también generen impactos positivos en el ámbito económico.
Del mismo modo, Li et al. (2020) señalan que la innovación verde y la sostenibilidad empresarial en la industria manufacturera impactan positivamente en el desempeño financiero, ambiental (incluida la neutralización en la emisión de carbono) y social. La emisión excesiva de gases de efecto invernadero, como el CO2, está provocando un aumento de la temperatura global, lo que origina fenómenos climáticos extremos: calor intenso, sequías e inundaciones. Por su parte, Lorenzo (2021) indica que para reducir los problemas ambientales, los ciudadanos, los gobiernos y las organizaciones deben tomar medidas para reducir su impacto ambiental y fomentar la aceptación de políticas proambientales. La pérdida de biodiversidad, la desconexión con la naturaleza, la industrialización y la pérdida de acceso a espacios verdes reducen nuestra empatía por el entorno natural.
En el ámbito corporativo, Phillips et al. (2020) señala que el impacto de la responsabilidad social corporativa y la financiarización en la innovación empresarial en industrias altamente contaminantes revela que la RSE tiene un efecto más positivo en la innovación corporativa que la financiarización. La relación entre las políticas medioambientales y las prácticas sostenibles muestra que la conservación de recursos y energía resulta beneficiosa tanto para el medio ambiente como para la economía.
Por otro lado, el Parque Forestal Nacional Chino ha avanzado en la protección forestal y el turismo, pero enfrenta obstáculos como una planificación deficiente y una gobernanza ineficaz. Es esencial abordar estos problemas para asegurar un desarrollo sostenible a largo plazo de este importante recurso natural (Wojciechowska-Solis et al., 2021).
El propósito fundamental se centra en la conservación ecológica, un tema de interés global creciente donde el cuidado del medio ambiente se vuelve cada vez más imperativo y urgente, respaldado por la teoría del aprendizaje social en relación con el estudio ético-moral (He et al., 2021). La responsabilidad social empresarial (RSE) persigue que las empresas adopten prácticas comerciales éticas y responsables que no solo busquen maximizar las ganancias, sino que también contribuyan al bienestar general de la sociedad (Kolahi y Azimiseginsara, 2023).
Este estudio pone de manifiesto la urgencia del tema debido a la creciente contaminación ambiental, la falta de estrategias efectivas y la necesidad de promover un desarrollo sostenible. Por tanto, el propósito radica en analizar e identificar los riesgos asociados, así como en desarrollar estrategias para mitigarlos. Asimismo, la relevancia de esta investigación destaca su potencial para informar a las empresas sobre los beneficios económicos, sociales y ambientales derivados de la adopción de prácticas sostenibles. De esta manera, se busca impulsar la acción y la innovación en la conservación del medio ambiente.
METODOLOGÍA
El presente estudio es de tipo descriptivo-explicativo, con un diseño documental y transversal. Se centra en la recopilación y análisis de información científica sobre responsabilidad social empresarial (RSE) y conservación del medio ambiente en un contexto global, haciendo énfasis en la revisión de literatura relevante para el periodo 2020-2024. Este diseño permite identificar tendencias, patrones y relaciones entre las categorías analizadas, proporcionando una base sólida para extraer conclusiones fundamentadas.
El enfoque adoptado es cualitativo, complementado por elementos cuantitativos al analizar la distribución de los estudios en términos de frecuencia, países, y años de publicación. El enfoque cualitativo asegura una interpretación detallada de los conceptos, teorías y prácticas reportadas en los estudios seleccionados.
El método seguido en este trabajo es el modelo PRISMA (Preferred Reporting Items for Systematic Reviews and Meta-Analyses), ampliamente reconocido por su rigor y estructura para revisiones sistemáticas. Este método garantiza la transparencia y reproducibilidad del proceso de selección, evaluación y síntesis de los artículos incluidos.
Se utilizó una matriz de análisis bibliográfico diseñada específicamente para recopilar y organizar la información clave de cada estudio seleccionado. La matriz incluyó campos como: año de publicación, país de origen, título de la publicación, nombre de la revista, objetivos del estudio, metodología utilizada.
Además, se empleó un formulario estandarizado de recopilación de datos que permitió registrar de manera precisa los resultados de la búsqueda, los criterios de inclusión y exclusión, y las características específicas de cada artículo.
La búsqueda se realizó en dos bases de datos principales: Scopus y SciELO, seleccionadas por su prestigio y cobertura en temas académicos. Se utilizó una combinación de descriptores específicos y operadores booleanos para optimizar los resultados. Los descriptores en español e inglés incluyeron:
En español: “responsabilidad social empresarial” OR “corporate social responsibility” AND “conservación del medio ambiente” OR “conservar el medio ambiente”.
En inglés: “corporate social responsibility” AND “environmental conservation” OR “preserving the environment”.
La búsqueda se limitó a publicaciones en acceso libre, realizadas entre marzo de 2020 y enero de 2024, con el fin de asegurar la incorporación de información reciente y relevante. Los criterios de inclusión fueron: artículos científicos en español o inglés, estudios enfocados en responsabilidad social empresarial y conservación del medio ambiente, publicaciones accesibles en las bases de datos seleccionadas, período de publicación entre marzo 2020 y enero 2024. Mientras, los criterios de exclusión se establecieron como: estudios documentales, libros y conferencias, publicaciones sin acceso libre, investigaciones centradas exclusivamente en otras áreas no relacionadas con rse y medio ambiente, estudios desarrollados en un contexto demasiado específico y no generalizable.
El procedimiento se llevo a cabo mediante las etapas de: 1. Identificación: Búsqueda exhaustiva en Scopus y SciELO utilizando los descriptores definidos, luego un registro detallado de los resultados preliminares. 2. Selección: Aplicación de criterios de inclusión y exclusión y filtrado inicial mediante la revisión de títulos y resúmenes. 3. Evaluación: Análisis completo de los textos seleccionados y exclusión de artículos que no cumplieran con los requisitos metodológicos o de legibilidad. 4. Síntesis: Organización de los datos recopilados en la matriz de análisis e identificación de patrones, tendencias y hallazgos relevantes.
RESULTADOS
En la Tabla 1, se muestra que se encontraron 72 artículos en Scopus y 3 en Scielo. Todos los artículos hallados en ambas bases de datos fueron clasificados como artículos sin una clasificación específica durante la búsqueda preliminar.
El flujograma presentado sigue el modelo PRISMA (Preferred Reporting Items for Systematic Reviews and Meta-Analyses) y describe de manera visual las etapas del proceso de revisión sistemática para identificar, seleccionar, evaluar e incluir artículos relevantes. A continuación, se realiza un análisis detallado de cada sección:
Se recopilaron 72 registros desde Scopus y 3 desde SciELO, lo que totaliza 75 artículos iniciales. Sin embargo, 825 artículos fueron eliminados mediante filtros y límites predefinidos (800 de Scopus y 25 de SciELO). Esta gran cantidad de exclusiones sugiere que los criterios iniciales de búsqueda fueron específicos, aunque podría ser relevante verificar si estos límites fueron demasiado restrictivos.
De los registros identificados, 60 artículos no duplicados pasaron a la siguiente etapa, mientras que 35 artículos duplicados o eliminados fueron descartados. Aquí se evidencia un adecuado control de duplicados, clave para garantizar la calidad de la revisión. Posteriormente, se realizó un cribado por título y resumen, lo que resultó en la exclusión de 10 artículos. Este paso es esencial para eliminar estudios que no sean pertinentes, aunque el número de artículos excluidos sugiere un enfoque inicial adecuado en los criterios de selección.
Tras las etapas anteriores, 12 artículos de texto completo fueron finalmente incluidos en la revisión. Este resultado representa el núcleo de la evidencia utilizada para responder a la pregunta de investigación planteada.
Tabla 2
Nº | Autor y año | Enfoque | Resultado |
---|---|---|---|
1 | Lutkovska y Kaletnik, (2020) | Cuantitativo | El mecanismo organizativo y económico de la gestión de la seguridad armoniza intereses económicos y ambientales, fortaleciendo la seguridad natural, antropogénica y ecológica del país. Es eficaz en situaciones normales y de emergencia. |
2 | Liang et al. (2020) | Cuantitativo | La industria manufacturera china adopta la conservación de energía y reducción de emisiones. La investigación muestra que la innovación verde mejora la sostenibilidad empresarial, con reciclaje impactando más el desempeño social y productos verdes el financiero. |
3 | Zhou y Jin (2023) | Cuantitativo | La innovación en industrias altamente contaminantes mejora la eficiencia energética y reduce emisiones. La RSE impulsa la innovación, mientras que la financiarización la limita. La RSE y las restricciones financieras influyen en el impacto de la financiarización. |
4 | Liu et al. (2021) | Cuantitativo | La política de divulgación obligatoria de RSE en China mejora la responsabilidad ambiental corporativa (CER) a través de mejor gestión ambiental y aumento de patentes, con mayor impacto en grandes empresas y empresas no estatales. |
5 | Herforth et al. (2022) | Cuantitativo | Para mejorar sistemas alimentarios que promuevan dietas saludables y protejan el medio ambiente, se presenta una metodología de diagnóstico con 39 indicadores clave para evaluar el desempeño nacional, facilitando decisiones informadas y acciones estratégicas. |
6 | Li et al. (2020) | Cuantitativo | Este estudio engloba la importancia de la estrategia ambiental y la gobernanzacorporativa en China, en la rápida expansión económica y el preocupamiento por el ambiente global. |
7 | Zhao et al. (2020) | Mixto | La regulación ambiental afecta el empleo social, restringiéndolo a corto plazo y promoviéndolo a largo plazo, con efectos adversos aumentados bajo regulaciones ambientales de alto nivel. |
8 | Kolahi y Azimiseginsara (2023) | Cuantitativo | El estudio de las principales universidades de Irán muestra deficiencias en responsabilidad socioambiental, con correlaciones positivas entre variables de investigación y disparidades por género, resaltando la necesidad urgente de redefinir roles universitarios hacia la conservación ambiental. |
9 | George (2022) | Cuantitativo | La integración de responsabilidad social, cuidado ambiental y buena gobernanza impulsa el crecimiento sostenible organizacional a través de la innovación, asegurando resultados económicos, sociales y ambientales positivos a largo plazo. |
10 | Zhu et al. (2019) | Cuantitativo | La distancia social percibida influye en cómo antropomorfizar el medio ambiente afecta las intenciones de conservación, mediada por la debilidad y la responsabilidad percibidas, y moderada por el poder social. |
11 | Tseng et al. (2020) | Cuantitativo | Este estudio revela que el aumento en las responsabilidades ambientales, sociales y de gobernanza impulsa la sostenibilidad corporativa, destacando la influencia de la estructura del directorio y el desempeño financiero mediante métodos cualitativos y teoría de conjuntos difusos. |
12 | Bai y Bai (2020) | Cuantitativo | Las normas personales tienen un impacto más significativo en el comportamiento de protección ambiental que las normas sociales, mediadas por la voluntad de protección ambiental y moderadas por la conciencia de los costos ambientales. |
DISCUSIÓN
Algunos analistas opinan que cuando se abordan los problemas éticos en el contexto de la responsabilidad social, muchos consideran la ética como algo poco pertinente debido a la visión que se tiene de las empresas como agentes económicos. Sin embargo, es claro que la presión ejercida desde la esfera internacional para reducir los daños ambientales que provocan las empresas tiene su origen en la preocupación epistemológica y axiológica; de ahí que el discurso sobre la responsabilidad social, por definición, implique una dimensión ética que plantea escenarios de dilemas aparentes y reales.
Por ejemplo, George (2022) demostró que la sostenibilidad y la responsabilidad social corporativa (RSC) son fundamentales para el crecimiento sostenible. Al integrar la RSC, el cuidado del medio ambiente y la buena gobernanza, se busca el triple balance económico, social y ambiental, crucial para la conservación ambiental a largo plazo.
De manera similar, Zhu et al. (2019) muestran una aproximación a la conservación ambiental mediante la antropomorfización del entorno natural. Al analizar los efectos mediadores de la debilidad y la responsabilidad percibidas, junto con el efecto moderador del poder, se revela que estas percepciones influyen positivamente en las intenciones de conservación.
Por su parte, Trasca et al. (2024) resaltan que la responsabilidad ambiental impulsa mejoras en la estructura del directorio corporativo, el desempeño financiero y la gobernanza. Además, enfatizan la gestión eficiente de residuos, políticas de reutilización y reciclaje, retorno de inversiones en activos mejorados, contribuciones comunitarias y conservación energética como prioridades clave para la sostenibilidad corporativa. Asimismo, Lüdeke-Freund (2020) resalta los beneficios de la conservación del medio ambiente, al mostrar que la calidad del control interno en las empresas mejora la inversión en protección ambiental y el desempeño financiero. Esto promueve una gestión ambiental efectiva, fortalece la responsabilidad corporativa y contribuye al desarrollo sostenible.
Por otro lado, algunos autores han discutido sobre la Responsabilidad Social Empresarial y la Conservación del Medio Ambiente: estrategias y desafíos para un desarrollo sostenible. Por ejemplo, Wang et al. (2022) y Yu et al. (2021) señalan que la regulación ambiental afecta el empleo social, limitándolo a corto plazo y promoviéndolo a largo plazo, con efectos adversos aumentados bajo regulaciones ambientales de alto nivel. Además, Chivulescu et al. (2024) expresan que el trabajo social tiene una influencia limitada en la conservación ambiental. A pesar de su potencial, las actividades relacionadas con educación, investigación y práctica aún no impactan significativamente en la prevención de la contaminación. En cambio, el estudio llevado a cabo por George (2022) sobre la integración de la responsabilidad social, el cuidado ambiental y la buena gobernanza destaca su capacidad para promover el crecimiento sostenible en las organizaciones mediante la innovación, garantizando resultados positivos en los ámbitos económico, social y ambiental a largo plazo.
El estudio realizado por Li et al. (2020) se enfoca en maximizar las ganancias y la Responsabilidad Ambiental Corporativa (RAC) a través de estrategias óptimas de fijación de precios para la calidad, influenciadas positivamente por subsidios gubernamentales. Este análisis se basa en modelos de equilibrio y simulaciones numéricas. Los resultados positivos contrastan con los hallazgos de Bai y Bai (2020), quienes resaltan que las normas personales impactan de manera más significativa en el comportamiento de protección ambiental que las normas sociales. Este efecto es mediado por la voluntad de protección ambiental y moderado por la conciencia de los costos ambientales.
Estos resultados coinciden con los expuestos por Lorenzo (2021), quien señala que el fortalecimiento del control interno mejora tanto la gestión ambiental como la financiera, impulsando la responsabilidad corporativa y el desarrollo sostenible. Estos hallazgos se alinean con lo indicado por Herforth et al. (2022), quienes destacan que la metodología es fundamental para evaluar y mejorar los sistemas alimentarios, fomentando dietas saludables y la sostenibilidad ambiental, aspectos clave para tomar decisiones estratégicas y avanzar en políticas públicas efectivas.
Li et al. (2020) aborda específicamente la industria manufacturera en China, destacando la importancia de adoptar prácticas de conservación de energía y reducción de emisiones. La innovación verde se posiciona como un factor crucial para mejorar la sostenibilidad empresarial, donde el reciclaje no solo beneficia el desempeño social, sino que también contribuye a la preservación del medio ambiente. Estos conceptos se refuerzan con los estudios de Gogaladze et al. (2020) y Wang et al. (2022), quienes evaluaron los recursos ambientales en carteles digitales utilizando diversos enfoques y mensajeros, destacando impactos positivos en percepciones y acciones comunitarias hacia el medio ambiente.
Además, Ao et al. (2023) y Tseng et al. (2020) llevaron a cabo un estudio que revela que el aumento en las responsabilidades ambientales, sociales y de gobernanza impulsa la sostenibilidad corporativa. Destacan la influencia de la estructura del directorio y el desempeño financiero, utilizando métodos cualitativos y la teoría de conjuntos difusos. Estos hallazgos se alinean con los de Liu et al. (2021), quienes discuten los desafíos que enfrentan tanto países desarrollados como en desarrollo en términos de protección ambiental y crecimiento económico. Proponen un modelo de control de contaminación óptimo basado en responsabilidades diferenciadas.
Finalmente, los resultados de Kolahi y Azimiseginsara (2023) resaltan la importancia de la responsabilidad socioambiental, mostrando correlaciones positivas y disparidades de género que requieren una redefinición de roles hacia la conservación ambiental. De manera similar, Zhou y Jin (2023) señalan que la innovación reduce las emisiones en industrias contaminantes, aunque advierten que la financiarización puede limitar este proceso, afectando el impacto ambiental, económico y social en el medio ambiente.
CONCLUSIONES
La integración efectiva de la Responsabilidad Social Empresarial (RSE) en las estrategias de conservación del medio ambiente representa un pilar fundamental para avanzar hacia un desarrollo sostenible en el contexto actual de los desafíos ambientales globales. La RSE implica que las empresas no solo deben cumplir con las regulaciones ambientales vigentes, sino que también deben ir más allá, adoptando prácticas y políticas que minimicen su impacto negativo en el entorno natural y maximicen su contribución positiva a la sociedad y al medio ambiente. La adopción de estrategias de RSE orientadas a la conservación del medio ambiente no solo implica la implementación de tecnologías limpias y eficientes que reduzcan las emisiones contaminantes y el consumo de recursos, sino también el compromiso activo en la restauración y conservación de ecosistemas vulnerables.
Este enfoque requiere una colaboración estrecha con diversas partes interesadas, incluidos gobiernos, organizaciones no gubernamentales, comunidades locales y consumidores conscientes. Además de los beneficios ambientales directos, las empresas que incorporan prácticas de RSE en su estrategia de gestión ambiental pueden mejorar su reputación corporativa, fortalecer la lealtad de los empleados y atraer a consumidores que valoran la sostenibilidad. Este compromiso también puede generar oportunidades de innovación y diferenciación en el mercado, facilitando la adaptación a regulaciones futuras más estrictas y a cambios en las expectativas de los consumidores. Sin embargo, el camino hacia una RSE efectiva y orientada a la conservación del medio ambiente presenta desafíos significativos. Estos incluyen la necesidad de recursos financieros y técnicos para implementar iniciativas sostenibles, la gestión de riesgos asociados con la cadena de suministro y la evaluación continua del desempeño ambiental a través de métricas claras y transparentes. Además, es crucial superar la resistencia interna dentro de las organizaciones y asegurar un compromiso a largo plazo con los principios de sostenibilidad.
Asimismo, para alcanzar un impacto positivo y sostenible, las empresas deben considerar la RSE no solo como una obligación ética, sino como una oportunidad estratégica para promover un desarrollo equitativo y armonioso entre la actividad económica y la conservación del medio ambiente. A través de la colaboración, la innovación y el liderazgo responsable, las empresas pueden jugar un papel crucial en la creación de un futuro más sostenible para las generaciones venideras.
En conclusión, la integración efectiva de la Responsabilidad Social Empresarial (RSE) en las estrategias de conservación del medio ambiente representa un pilar fundamental para avanzar hacia un desarrollo sostenible. Este enfoque no solo fomenta la gestión ambiental responsable dentro de las organizaciones, sino que también fortalece su compromiso con la comunidad y el entorno natural. Para alcanzar un impacto positivo duradero, es crucial que las empresas asuman un papel proactivo, adoptando prácticas sostenibles y colaborando con diversas partes interesadas. De esta manera, se puede contribuir significativamente a la preservación de los recursos naturales y al bienestar de las generaciones futuras.