A. Ejes de comprensión lectora

En la figura 1 se presentan los principales ejes de la comprensión lectora, que serán fundamentales para lograr la comprensión de diferentes textos.

Figura 1 Ejes de la comprensión lectora. 

El primer eje es aprender a leer: Esto implica desarrollar las habilidades básicas necesarias para descodificar y comprender el lenguaje escrito, como la conciencia fonémica, el reconocimiento de letras y el vocabulario de palabras a la vista. Una vez asentadas estas habilidades básicas, los lectores pueden empezar a desarrollar sus capacidades de comprensión aprendiendo a reconocer e interpretar distintos tipos de textos.

El segundo eje es leer para aprender: Esto significa que la lectura se puede usar como herramienta para adquirir nuevos conocimientos y habilidades a la lectura, tanto en contextos académicos como cotidianos. Ya se trate de leer un libro de texto para una clase, un artículo de noticias para estar informado sobre la actualidad o una receta para probar un plato nuevo, la lectura es una parte esencial del aprendizaje permanente y del crecimiento personal. Permite a las personas adquirir nuevos conocimientos, competencias y desarrollar nuevas habilidades ⁵.

El último eje, es aprender a disfrutar de la lectura: Aunque a veces leer puede parecer una tarea tediosa, es importante cultivar el amor por la lectura para cosechar sus múltiples beneficios. La lectura puede ser una fuente de entretenimiento, relajación e inspiración, y puede proporcionar un escape del estrés de la vida cotidiana. Encontrando libros y otros materiales que resulten atractivos, interesantes y agradables de leer, los lectores pueden desarrollar el hábito de leer por placer para toda la vida ⁵.

De acuerdo con la mayoría de las investigaciones ^6,7,12, comúnmente se dividen los niveles de comprensión lectora en tres categorías: literal, inferencial y crítico. En el nivel literal, se trata de entender el significado básico del texto, identificando hechos y detalles clave. En el nivel inferencial, los lectores deben utilizar pistas contextuales y conocimientos previos para hacer inferencias y sacar conclusiones sobre el texto. Por último, en el nivel crítico, los lectores deben analizar y evaluar el texto, teniendo en cuenta su propósito, tono y credibilidad. En este sentido, el nivel literal, incluye el reconocimiento de frases de texto y palabras clave. El lector comprende el texto sin comprometerse activamente con sus estructuras cognitivas o intelectuales. Esto incluye reconstruir el texto (que no debe considerarse mecánico) y reconocer la estructura básica del texto. Centrarse en ideas e información expresadas explícitamente al reconocer o recordar hechos ⁴. Según Sabalete ⁷, es la capacidad de reconocer datos, hechos e ideas principales y subyacentes en un texto es indicativo de la implicación en la comprensión del significado textual. También es importante tener la habilidad para retener, generalizar y sintetizar los contenidos explícitos presentes en el mismo ⁶. Este nivel está relacionado con las competencias y la información se puede obtener de textos escritos. Los estudiantes encuentran y seleccionan información explícita en textos escritos para propósitos específicos. Esto significa que el reconocimiento implica encontrar e identificar elementos de texto, lo que puede llevar a identificar secuencias de acciones. Identificar signos, tiempos y lugares únicos ⁷.

Por otra parte, el segundo nivel es el inferencial, donde los estudiantes deben utilizar las ideas y la información explícitamente indicadas en el texto. De tal manera que el estudiante utiliza su experiencia personal e intuición como punto de partida para realizar hipótesis y suposiciones de causa y efecto. Su característica distintiva consiste en examinar y tener en cuenta las redes de asociaciones entre relaciones y significados, asumiendo e infiriendo de tal manera que el lector pueda interpretar el contenido implícito. Este nivel se relaciona con las competencias. Los estudiantes construyen el significado del texto extrayendo e interpretando información del texto. En esta función se establecen conexiones entre la información proporcionada de manera explícita e implícita con el objetivo de deducir conocimientos adicionales o subsanar lagunas en el contenido escrito ⁷. De estas conclusiones, los estudiantes interpretan las relaciones para formar una comprensión completa y profunda del texto, abordando aspectos como el propósito del autor, la utilización estética del lenguaje, la intención subyacente y a conexión entre el lector y el entorno sociocultural del texto ⁶. Considerando la lectura crítica, los lectores emiten juicios evaluativos al comparar las ideas expuestas en los textos con estándares externos establecidos por profesores, otras autoridades o fuentes escritas, así como con criterios internos derivados de su experiencia, conocimientos y valores como lectores. El lector puede juzgar el texto y aceptarlo o rechazarlo, pero de forma lógica. Este tipo de lectura implica una personalidad evaluativa influenciada por la sofisticación, el juicio y el conocimiento del lector sobre lo que se lee. Estos juicios consideran cualidades como la precisión, la aceptabilidad y la viabilidad. Se emiten juicios sobre la realidad o la fantasía, la adecuación o la razonabilidad, la asimilación, el rechazo o la aceptación, según la moral y los valores del lector ².

Asimismo, la investigación sobre la comprensión lectora ha sido abordada desde varias perspectivas teóricas que buscan entender cómo las personas procesan, interpretan y dan significado a la información presente en los textos. Algunas de las teorías más relevantes de la comprensión lectora incluyen la Teoría Lineal como la comprensión del discurso que se produce en la mente del lector. Según esta perspectiva, la lectura no se considera un proceso netamente lingüístico, sino uno perceptivo que implica una traducción con ayuda de un código lingüístico. El cerebro procesa esta traducción como un proceso lingüístico ⁸. La lectura, a pesar de ser vista comúnmente como una tarea de decodificación, se conceptualiza desde un enfoque cognitivo como un proceso elaborado y complejo donde el lector construye significado. Este cambio de paradigma, influenciado por avances en la psicolingüística y la psicología, va más allá de la perspectiva conductista, posibilitando la exploración de los procesos internos de la mente. La lectura se aprecia como un medio para comprender la relación entre este proceso y la función cognitiva humana, destacando la interacción entre el bagaje cultural del lector y el significado del texto como elemento fundamental para lograr la comprensión, a esta teoría se le conoce como Teoría interactiva de la comprensión ⁹.

Además, la teoría del Esquema Interactivo implica un lector comprometido que procesa la información presentada en un texto a través de sus propios marcos cognitivos o conceptuales derivados de su conocimiento y experiencia del mundo. El lector es un participante activo en el proceso de comprensión ¹⁰. Esto significa que la interpretación que el lector hace de un texto no depende únicamente del significado que pretende darle el escritor, sino también de las experiencias, creencias y valores personales del lector. En esencia, el lector aporta su propia perspectiva al texto, lo que da lugar a un proceso de comprensión dinámico e interactivo. En este contexto, el programa “Leo y comprendo” es una herramienta de aprendizaje integral que consta de 14 sesiones diseñadas para mejorar la comprensión lectora. El programa emplea una serie de estrategias y técnicas eficaces basadas en principios avanzados de programación neurolingüística (PNL). Estas fueron elaboradas para estudiantes de cuarto año de secundaria, que se supone que ya han adquirido las habilidades básicas de lectura, pero que aún pueden tener dificultades con la comprensión lectora. El programa se basa en el aprendizaje significativo de Ausubel, este implica que la nueva información de importancia se conecta de manera coherente y profunda con la estructura cognitiva previa del individuo, evitando conexiones aleatorias o superficiales. En este proceso, la información se integra de manera significativa en el conocimiento preexistente del individuo ¹¹. Asimismo, se caracteriza por ser mayormente un proceso externo, originado por la internalización de información y factores provenientes del entorno físico y social. Los contenidos que el sujeto va a adquirir provienen del exterior, se le proporcionan o se le ofrecen a través del lenguaje, un medio simbólico con carga emocional, lo que también hace que sea un aprendizaje comunicativo externo.

Por su parte, Solé ¹² aporta una visión integral de las estrategias, subrayando su papel esencial en el desarrollo de la comprensión lectora y destacando la importancia de abordarlas de manera sistemática. De esta manera, la visualización positiva se destaca como una estrategia poderosa que involucra la creación de imágenes mentales positivas asociadas al contenido del texto. Al visualizar escenas, personajes o conceptos, los lectores pueden fortalecer su conexión emocional con el material, facilitando así una comprensión más profunda ⁵. La predicción, otra estrategia de comprensión lectora, se centra en anticipar eventos o desarrollos en la trama antes de que se revelen en el texto. Esta estrategia no solo activa el conocimiento previo, sino que también estimula el interés y la participación activa del lector ¹². Aunque es frecuente que los educadores propongan interrogantes como parte de las tareas destinadas a fomentar la comprensión, no es una práctica habitual entre los estudiantes, especialmente si son preguntas que estimulan niveles más altos de conocimiento, conducen a un conocimiento más profundo del texto y conducen a una mejor comprensión y aprendizaje. Además, uno de los descubrimientos más frecuentes entre los investigadores que analizan el proceso de lectura es que el fundamento de la comprensión radica en el razonamiento ¹³.

Las estrategias mencionadas pueden ser potenciadas con las técnicas de la Programación Neurolingüística (PNL), que es un campo fascinante que profundiza en los intrincados patrones del comportamiento, el pensamiento y el lenguaje. El objetivo último de la PNL es construir estrategias eficaces que permitan a las personas tomar decisiones con conocimiento de causa, establecer relaciones fortalecedoras, inspirar y motivar a los demás y lograr el equilibrio en su vida cotidiana ¹⁴. Al aprender a aprender, los individuos pueden comprender más efectivamente los procesos de cambio y cómo anticiparse a las respuestas de quienes los rodean. Esto, a su vez, les permite generar conexiones más significativas con los demás.

El término "programación" en PNL se refiere a la forma en que nuestros hábitos y comportamientos se desarrollan y se llevan a cabo automáticamente. Implica organizar nuestros pensamientos y acciones de forma que produzcan resultados favorables. Por su parte, el aspecto "neurológico" de la PNL tiene que ver con las experiencias sensoriales (vista, oído, gusto, tacto y emociones) que procesa nuestro cerebro. Por último, el componente "lingüístico" de la PNL hace hincapié en el poder transformador del lenguaje, que puede dar forma a nuestras experiencias y, en última instancia, conducir a la creación de nuevos modelos. Parte esencial de la Programación Neurolingüística es utilizar el modelado de identificación de las características de un lector competente y poder transmitirlas a otro individuo. Las estrategias que usa un lector competente en primer lugar es aprovechar conocimientos previos para dotar de sentido a la lectura. En estudios realizados a lectores expertos y lectores nuevos se llegó a la conclusión de que la retención y asimilación óptima de nueva información ocurre cuando se integra con conocimientos o esquemas previamente adquiridos o ya existentes. En este sentido, la relevancia de elaborar un programa integral de comprensión lectora se destaca debido a la urgencia de aplicar técnicas basadas en la Programación Neurolingüística, con el objetivo fundamental de elevar significativamente la comprensión lectora entre los alumnos. Este enfoque innovador se centra en las estrategias tradicionales de comprensión lectora potenciados con los principios fundamentales de la Programación Neurolingüística, proporcionando así un marco educativo que no solo aborda las habilidades básicas de lectura, sino que también se esfuerza por potenciar la conexión mente-texto de manera más profunda y efectiva.